Lacan y Descartes


9. CONCILIO DE TRENTO
Ante la situación crítica de la Iglesia, dividida por los reformadores, el papa
Paulo III convocó
un Concilio Ecuménico en Trento.
En él participaron, además del Papa, muchos obispos, representantes del emperador y de los
reyes cristianos, Superiores de órdenes religiosas y teólogos invitados para ayudar a definir la
fe católica.
Destacaron los jesuitas, dominicos y los teólogos de la Escuela de Salamanca. En la
segunda etapa del Concilio participaron también delegaciones de los protestantes.
Tuvo tres etapas:
 Primera etapa (1545-47), centrada en la doctrina de la fe. Entre sus enseñanzas
doctrinales destacan:
o La doble fuente de la revelación (Sagrada Escritura y Tradición)
o la importancia de la fe y las obras para la salvación
o la única mediación de Jesucristo y la intercesión de la Virgen y los santos
 Segunda etapa (1551-52), centrada en los sacramentos
o Afirmó el carácter salvífico de los siete sacramentos y su institución por Cristo
 Tercera etapa (1561-63), dedicada a la disciplina y la reforma eclesiástica. Entre sus
reformas disciplinares destacan:
o la formación de los seminarios
o la reforma de los obispos
o la edición del Catecismo romano
o la prohibición de vender indulgencias

Las reformas del Concilio de Trento ayudaron a renovar la piedad, la ascética y la mística
católicas. La fe proclamada en Trento se exprésó en el Arte Barroco.


5. LA “REFORMA” PROTESTANTE
La situación de la Iglesia en el siglo XVI, como hemos visto, era dramática: escándalos en
la corte vaticana, relajación de las órdenes religiosas, ignorancia del pueblo sencillo…

Mientras el catolicismo se expandía hacia áreas geográficas donde no había sido predicado
nunca, en el viejo continente sufríó una verdadera crisis: la “reforma” religiosa propugnada
por los fundadores de las distintas ramas del protestantismo (Lutero, Calvino, Zwinglio) y el
cisma provocado por el rey de Inglaterra Enrique VIII (anglicanismo), rompíó la unidad de la
Iglesia en el mundo cristiano occidental.
Como consecuencia, por primera vez en la Historia, Europa queda dividida en dos campos:
el católico y el protestante. Este sistema cristalizó en la fórmula cuius regio, eius et religio, por
la cual los súbditos estaban obligados a seguir la religión del príncipe. El enfrentamiento entre
estos dos mundos condujo al fenómeno dramático de las guerras de religión, que asolarían
Europa en los siguientes siglos.


4. PERSECUCIÓN RELIGIOSA DURANTE LA REVOLUCIÓN FRANCESA
El 4 de Julio de 1789 estalla la Revolución Francesa, de neto contenido liberal y masónico.
Lleva a la creación de un nuevo concepto de Estado y sociedad, bajo el lema “libertad,
igualdad, fraternidad”. Pero ¿fue verdaderamente “libertad” para todos, o solo para los que
compartían el ideal revolucionario? Pocas veces, al hablar de la Revolución Francesa, se dan los
datos de que tres mil curas fueron asesinados, cientos de religiosas violadas y torturadas hasta
morir y decenas de miles de campesinos fueron descuartizados por no querer renunciar a su
religión.
La Iglesia Católica sufríó desde los inicios un ataque sistemático. Aunque la Revolución
Francesa fue apoyada en sus inicios por el bajo clero, derivó rápidamente hacia actitudes de
galicanismo extremo: se obliga a los obispos y sacerdotes a prestar juramento a la
Constitución y a renunciar a la obediencia a Roma, bajo pena de muerte, y se suprimen
órdenes religiosas.
En un segundo momento, la Revolución asumíó tonos claramente anticristianos: se instaura el
culto al Ente Supremo, y se toman medidas como la abolición del calendario cristiano, etc.
Finalmente, durante el Terror se produce una cruenta persecución de la Iglesia, con la
matanza de sacerdotes y asesinatos colectivos, el cierre de las iglesias y la prohibición del culto
público.
La revuelta de la Vendeé, un levantamiento popular en el Oeste de Francia donde los
campesinos sublevados pidieron ayuda a los nobles y formaron un ejército en defensa de la
religión y de la monarquía, que fue duramente reprimida. Las tropas revolucionarias llevaron a
cabo una destrucción total de la regíón y la masacre sistemática de sus habitantes, hasta el
punto de que este episodio ha sido definido por algún historiador como el primer "genocidio


ideológico” moderno.
El papa Pío VI, que se opuso a las actuaciones del régimen revolucionario, fue apresado por las
tropas de Napoleón y murió en el 1799 prisionero de los revolucionarios franceses. Napoleón
Bonaparte accede al trono por un Golpe de Estado en 1799. Firma un Concordato con la Santa
Sede y se corona a sí mismo en presencia del Papa en 1804, pero pronto pretende someter y
utilizar a la Iglesia para sus fines. Como el Papa Pío VII se opone a sus planes, lo hace
prisionero durante cinco años.


2. IDEOLOGÍAS DE LA MODERNIDAD
Durante los siglos XVII y XVIII se producen una serie de cambios profundos en la sociedad
occidental, como resultado de la difusión de un conjunto de ideologías vinculadas a la
modernidad. Estas ideologías llevan consigo cambios importantes en relación con:
 La concepción del mundo

 La organización política y económica del Estado
 La religión
Las principales ideologías de estos siglos son:
 Racionalismo: corriente de pensamiento que sostiene que la única fuente de
conocimiento es la razón. La inicia Descartes en el Siglo XVII.
o Como consecuencia, la religión deja de ser la base de la comprensión y
explicación del mundo, como lo era en la Edad Media
o La confianza en la razón prevalece ante la supuesta oscuridad de las creencias
que llevaron a las guerras de religión, donde los hombres se mataban entre sí
defendiendo su interpretación de Dios
o Esto no quiere decir necesariamente que los filósofos de estos siglos no fueran
religiosos (el mismo Descartes era un ferviente católico), pero sí que parten de
la duda. En la Época Moderna, Dios siguió siendo la razón de toda verdad y
justicia: la Época Moderna no es atea, sino deísta

 Absolutismo monárquico: un sistema de gobierno centralizado en que los reyes
acaparaban todos los poderes. El ejemplo más claro es Luis XIV de Francia, el “Rey Sol”
o Los monarcas católicos tendieron a invadir el ámbito de la jurisdicción
eclesiástica, en el intento de crear una Iglesia sometida y dócil respecto al
poder del rey: es un fenómeno que asume nombres diversos dependiendo de
los estados: regalismo en Portugal y España, galicanismo en Francia, etc.
o Este fenómeno tuvo su punto álgido con la expulsión de los


jesuitas por parte
de muchos gobiernos y en la presión sobre el Papa para que suprimiese la
orden

 Deísmo: corriente de pensamiento del Siglo XVIII que admite la existencia de un Dios
no personal, “el supremo Arquitecto”, que ha puesto en marcha el universo y no
interviene en la historia humana.
o De esta corriente nace la masonería, asociación secreta antirreligiosa, que
pretende instaurar un humanismo sin Dios.

 Ilustración: movimiento, en primer lugar filosófico, que tuvo gran éxito entre las clases
dirigentes en el Siglo XVIII. Tiene como fondo una corriente cultural que exalta la razón
y la naturaleza, y presenta una difundida hostilidad contra la Iglesia Católica
o En Francia, filósofos como Voltaire pretendieron acabar con la religión
católica. La Ilustración rechazaba el dogma como manifestación de
intolerancia, se mostraba tolerante a todas las confesiones religiosas y
promovía el librepensamiento. Buena parte de los ilustrados pertenecieron a
la masonería
o La Enciclopedia, síntesis de los conocimientos de la época, expone la ideología
laicista y materialista de la Ilustración, y fue un medio para propagar la
irreligión y la oposición a la monarquía


2. LA EVANGELIZACIÓN DEL NUEVO MUNDO
Con la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492 y las exploraciones en África y Asía, se
dio comienzo a la colonización europea de otras partes del mundo.
Tras el regreso de Colón de su primer viaje, los Reyes Católicos tomaron como suya la
empresa de evangelizar las nuevas tierras. En el segundo viaje ya fueron religiosos
franciscanos para predicar el evangelio a los indígenas. Otras órdenes religiosas se sumaron a
esta empresa. Destaca la labor de los dominicos y de los misioneros jesuitas, que fundaron las
famosas reducciones del Paraguay (poblados en los que se congregaban los indios y se
intentaba educarlos en la vida cristiana) y defendieron los derechos de los indígenas frente a
los abusos de los colonizadores
La evangelización de América es otro de los fenómenos afectados por la “Leyenda Negra”,
un movimiento de propaganda antiespañola promovida por escritores ingleses, holandeses y
de otras nacionalidades durante el Siglo XVI, cuyo objetivo era reducir el prestigio e influencia
del Imperio español en su Siglo de Oro.
La interpretación de la Leyenda Negra presenta a los conquistadores españoles como
ejemplos de crueldad y tiranía. Conviene aclarar algunos puntos:
 Acusación de genocidio. Sobre la masacre de los indios a manos de los españoles.
Ciertamente, durante la conquista millones de indios murieron en América Central y
del Sur. Pero la elevada mortalidad no se debíó a las armas de los conquistadores, sino
a que los europeos trajeron consigo nuevas enfermedades para las que los indios
carecían de defensas, como la viruela o el sarampión.
o Hay un rasgo carácterístico de la colonización española que no encontraremos
en la francesa ni la anglosajona: el mestizaje. Los católicos españoles y
portugueses no dudaron en casarse con indias, a quienes


veían como seres
humanos, iguales a ellos. Conviene recordar que, mientras que en Estados
Unidos y Canadá no quedan muchos descendientes de los pueblos nativos de
América del Norte, en la América exespañola y exportuguesa la mayoría de la
población es de origen indio o mestizo.
o Hay que tener en cuenta que los pueblos de América Central habían caído bajo
el dominio de incas y aztecas, uno de los pueblos más feroces de la historia,
con una religión basada en los sacrificios humanos masivos. Los españoles
acabaron con estas ceremonias y evitaron así el exterminio de los indígenas.
 Sobre la esclavitud de los indios. La Leyenda Negra presenta a la Iglesia y a la Corona
española como promotores de la esclavitud de los indios, pero la historia verdadera es
muy distinta:
o Cristóbal Colón, recién nombrado virrey de las tierras descubiertas, envió por
propia iniciativa a España los primeros esclavos indígenas en 1496.
o La reina Isabel la Católica reacciónó inmediatamente: ordenó al gobernador
liberar a los esclavos y destituir a Colón, que volvíó a España en calidad de
prisionero por sus abusos.
o Para la Corona, el indígena debía ser considerado un vasallo como cualquier
súbdito español. El testamento de Isabel La Católica deja muy clara la política
de Castilla: "…Suplico al Rey mi señor y ordeno a mi hija y su marido que no
consientan que los nativos y los habitantes de dichas tierras conquistadas y
por conquistar sufran daño alguno en sus personas o bienes, sino que sean
tratados con justicia y humanidad y que si sufrieren algún daño, lo repararen"
o Es verdad que se produjeron abusos de los conquistadores, sobre todo en el
sistema de las encomiendas (a un propietario español se le “encomendaban”
o asignaban tierras para cultivar y los indios que vivían en ellas. El
encomendero


3. ¿OPOSICIÓN ENTRE CIENCIA Y FE? EL CASO Galileo
Dentro de las “Leyendas Negras de la Iglesia” ocupa un lugar prominente el “Caso Galileo”,
como ejemplo de una Iglesia oscurantista contraria a la razón, que se opone al progreso
científico. En 1992, el papa Juan Pablo II ordenó investigar el caso para superar los prejuicios.
 Es una opinión extendida que Galileo Galilei fue sometido a torturas por la Inquisición
y condenado a morir en la hoguera por defender la teoría heliocéntrica, en contra de
una Iglesia empezada en defender que era el sol el que giraba alrededor de la tierra.

Incluso se recuerda como frase «absolutamente histórica», el Eppur si muove! (“y, sinembargo, se mueve”), palabras que supuestamente dijo Galileo tras recibir su
condena.
 Sin embargo, pocos saben que Galileo no pasó ni un solo día en la cárcel, ni sufríó
ningún tipo de violencia física. Es más, llamado a Roma para el proceso, fue alojado y
tratado con toda clase de atenciones en un palacio del Vaticano y murió a los setenta y
ocho años, en su cama, con la indulgencia plenaria y la bendición del Papa. Y la frase
legendaria la escribíó un periodista en Londres casi un siglo después de la muerte del
astrónomo.
Para situar la polémica conviene recordar que, en aquel momento, existían dos hipótesis que
tenían el mismo peso, porque no había pruebas definitivas: el sistema ptolemaico (el Sol y los
planetas giran en torno a la Tierra) y el sistema copernicano (la Tierra y los planetas giran en
torno al Sol). De hecho, muchos religiosos católicos estaban a favor del «innovador»
Copérnico.
¿Cuál fue la verdad del caso? Galileo imprimíó sin licencia un libro, Diálogos sobre los dos
mayores sistemas del mundo, en el que daba por demostrada la teoría copernicana sin
presentar argumentos. En un primer proceso le dijeron que obtendría la licencia eclesiástica a
le corresponde).


condición de que presentara la teoría copernicana como hipótesis: Galileo no tenía pruebas a
favor de Copérnico, y la única que aportaba era totalmente errónea.
A pesar de todo, se mantuvo en su posición y no corrigió el manuscrito. Incluso entró en
cuestiones teológicas, lo que trajo una dificultad añadida. El caso pasó a ser juzgado por un
tribunal del Santo Oficio, presidido por el cardenal san Roberto Belarmino, y Galileo fue
llamado a Roma para una segunda fase del proceso (1633).
El problema se dio al mezclar en la discusión la ciencia experimental con la interpretación de
la Escritura. Se pidió a una comisión de teólogos que discutieran el caso y dieron un parecer
contrario a la teoría copernicana, basándose en la contradicción con la filosofía de Aristóteles
y la interpretación literal de la Biblia, lo que evidentemente fue un error desde el punto de
vista intelectual.
En todo caso, aunque el dictamen de la comisión fue negativo, el Santo Oficio nunca emitíó un
decreto de condenación de la doctrina copernicana como herética. Por lo tanto, la Iglesia
nunca condenó el heliocentrismo como herejía. Lo que se hizo fue prohibir a Galileo que
enseñara esta doctrina no probada en las universidades católicas y se le conmutó la pena de
cárcel por la de arresto domiciliario. Después, se le permitíó trasladarse a la casa que tenía en
las afueras de Florencia, desde donde pudo continuar con sus investigaciones científicas.
El proceso de Galileo no debería entenderse como un enfrentamiento entre ciencia y
religión. Galileo siempre se consideró católico e intento mostrar que el copernicanismo no se
opónía a la doctrina católica. De hecho, afirmó explícitamente durante el proceso que las
verdades de la fe y de la ciencia proceden ambas de Dios y no pueden contradecirse. Por su
parte, los eclesiásticos no se opónían al progreso de la ciencia; el problema es que no
consideraban que el movimiento de la Tierra fuera una verdad científica y cometieron el error
de meterse a juzgar una cuestión científica (que no es el campo que le corresponde)

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