Atención y Memoria: Procesos Cognitivos Fundamentales


Atención: Proceso selectivo de la percepción

La atención es el proceso que orienta nuestros receptores hacia los estímulos que queremos percibir. Algunas tareas permiten un procesamiento automático y demandan poca atención, lo que permite realizar varias actividades al mismo tiempo. La formación reticular es una zona del cerebro que trabaja en el control y selección de los impulsos sensitivos.

Factores que influyen en la atención de estímulos:

  • Un filtro puramente físico: Atendemos sobre todo a una parte de nuestro campo perceptivo, lo que consideramos el centro, mientras que otra parte de él queda desatendida. Los objetos de mayor tamaño son atendidos antes que otros de menor tamaño. Los objetos situados en la zona superior del campo perceptivo son atendidos antes que otros situados en la zona inferior. Los objetos blancos y negros atraen la atención antes que otros de diversos colores. Los objetos dotados de movimiento captan la atención antes que los fijos. Los objetos que contrastan por alguna característica con los situados a su alrededor.
  • Factores no físicos:
    • Fenómeno cóctel: el interés en nuestra atención.
    • Defensa perceptiva: los estímulos agradables son recibidos y los desagradables rechazados.
    • Otros factores: estado físico (fatiga, mental o sueño), ciertos fármacos y alimentos, condiciones extremas.



Memoria: La facultad fascinante de almacenar información

La memoria es una capacidad fascinante, flexible, frágil y compleja a la que exigimos más esfuerzo. Nos permite recuperar imágenes del pasado, conservar nuestras experiencias y emociones, y desarrollar nuestra historia personal. La memoria se divide en memoria a corto plazo y memoria a largo plazo.

Memoria a corto plazo

La información sensorial captada por la memoria sensorial pasa a la memoria a corto plazo (MCP). La MCP nos permite interpretar información constante para responder a los problemas de nuestro presente. Sus características son la limitación de su capacidad de almacenamiento y la brevedad de retención. Se ha observado que la capacidad máxima de recuerdo estadísticamente es de 7 unidades de información, con una variación media de +/- 2. La relación entre la MCP y la MLP es bidireccional: parte de la información de la MCP pasa a la MLP para ser almacenada con carácter indefinido, y cuando necesitamos recuperar información del pasado, ocurre lo inverso.

Memoria a largo plazo

En la memoria a largo plazo (MLP) se guardan las percepciones, los sentimientos y las acciones pasadas. Su capacidad de almacenamiento es ilimitada, pero no siempre es accesible. A veces, no somos capaces de recordar no porque la información se haya borrado, sino porque no puede actualizarse por inhibiciones o porque no se han ejecutado correctamente las claves para su recuperación (lo tengo en la punta de la lengua).

Tipos de MLP:

  1. Memoria semántica: diccionario lleno de información general del mundo (historia, lengua). Casi inmune al olvido.
  2. Memoria episódica: memoria autobiográfica o personal que nos permite recordar fechas y acontecimientos especiales para el sujeto (la canción de una fiesta).
  3. Memoria procedimental: memoria sobre habilidades o destrezas que uno ha aprendido a ejecutar.
  4. Memoria emocional: respuestas emocionales aprendidas (amores y odios).



Teorías sobre la memoria y el olvido

Múltiples estudios han puesto de manifiesto que las estructuras cerebrales relacionadas con la memoria se encuentran estrechamente asociadas con las regiones que modulan.

Teorías sobre la memoria:

  • Modelo conductista: inspirado en la concepción empirista, afirma que la mente del ser humano, al nacer, es como un papel en blanco y que con el paso del tiempo van grabándose las experiencias vividas. La memoria consiste en establecer relaciones de asociación entre los elementos percibidos, y el olvido es fruto del desuso.
  • Psicología cognitiva: ha llamado la atención sobre el carácter activo de la memoria. No se limita a reproducir lo captado en un pasado más o menos cercano, sino que llega a construir sus propios recuerdos. Lo que recordamos está sometido a una estructuración e interpretación según los esquemas propios de cada persona, que selecciona ciertos aspectos del recuerdo y olvida otros.

Teorías del olvido normal:

  • Teoría del desuso: cuanto menos se utiliza la información memorizada, más se borra y desaparece. Cuanto más se practique la relación estímulo-respuesta, la conexión será más fuerte y tendrá mayor resistencia al olvido. La memoria se considera una sucesión de engramas, que son huellas que el aprendizaje deja en la corteza cerebral. Si el circuito neuronal correspondiente a un engrama se activa frecuentemente, la huella de la memoria tiende a hacerse más profunda.
  • Teoría de la interferencia: unos aprendizajes repercuten negativamente en otros. La interferencia retroactiva ocurre cuando los aprendizajes recientes borran los aprendizajes antiguos, mientras que la interferencia proactiva ocurre cuando los aprendizajes antiguos dificultan los aprendizajes recientes.

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