Historia de España: Pueblos Prerromanos, Visigodos, Reconquista y Más


Pueblos Prerromanos

Los pueblos prerromanos son los pueblos indígenas que habitaban la Península Ibérica antes de la llegada de los romanos. Estaban conformados por diferentes culturas:

  • Pueblos de la cultura ibérica: Practicaban la agricultura mediterránea, la minería y la metalurgia. Tenían un sistema de caudillaje, ciudades con urbanismo regular, cerámica a torno, moneda, escritura y diversas formas artísticas (como la Dama de Elche).
  • Pueblos del interior: Asentados en la meseta y en el oeste de la península, hablaban un idioma indoeuropeo y dominaban la metalurgia del hierro. Practicaban una agricultura elemental y eran ganaderos, organizándose en tribus.
  • Pueblos del norte: Habitaban la cornisa cantábrica y los Pirineos. Eran más primitivos, con una realización parcial y predominio de la ganadería, diferencias sociales y, en algunos casos, matriarcado.

Vascones

Los vascones fueron un pueblo prerromano que surgió de la unificación étnica, cultural y lingüística. Habitaron, en el milenio II a.C., un territorio más amplio que la actual Navarra, llegando al Cantábrico por el oeste, al sur de La Rioja y al noreste de Jaca. Se caracterizaban por su primitivismo, con una ganadería pobre, dieta escasa, poca diferenciación social, organización en clanes y bandolerismo. Su origen étnico es incierto, y su lengua, el euskera, es preindoeuropea. La conquista romana en el siglo I a.C. los asignó a la provincia Tarraconense. La romanización fue intensa en la zona llana del sur (Ager vasconum), mientras que la zona montañosa del norte (Saltus vasconum) se mantuvo más independiente.

Mozárabes

Los mozárabes eran cristianos que vivían en Al-Ándalus tras la conquista de la península en 711. Mantuvieron la fe cristiana como un grupo social minoritario, respetados por los emires de Córdoba a cambio de pagar un tributo. Conservaron su organización política, eclesiástica y jurídica durante el siglo VIII. A comienzos del siglo IX, la tolerancia disminuyó y los impuestos aumentaron, lo que provocó rebeliones en las principales ciudades de Al-Ándalus, reprimidas con deportaciones, persecuciones y matanzas. En el siglo X, la comunidad mozárabe acentuó la huida hacia las tierras cristianas situadas al norte del Duero y el Ebro, donde fundaron monasterios y comenzaron a repoblar en los siglos XI y XII, creando una cultura original de base cristiana hispanovisigoda con gran influencia musulmana.

Batalla de las Navas de Tolosa

La batalla de las Navas de Tolosa fue un enfrentamiento crucial de la Reconquista, que tuvo lugar en 1212 al pie de Sierra Morena, junto al paso de Despeñaperros (Jaén). Fue impulsada por las prédicas del obispo Ximénez de Rada. Las coaliciones formadas por Alfonso VIII de Castilla, Pedro II de Aragón y Sancho VII el Fuerte de Navarra, apoyadas por nobles portugueses, franceses y órdenes militares, se enfrentaron al ejército almohade. La conquista del siglo XIII permitió a los castellanos apoderarse de toda Andalucía, la zona atlántica próxima al estrecho, tras el hundimiento del imperio almohade. Sancho VII de Navarra y sus caballeros atravesaron la defensa (la guardia negra).

Monarquía Visigoda

La monarquía visigoda fue el sistema político impuesto en España por los visigodos entre los años 507 y 711, siendo el primer estado independiente de la península. Los visigodos llegaron a la península en el siglo V como aliados del Imperio Romano para combatir a suevos, vándalos y alanos. Tras ser expulsados, se asentaron en la península con Toledo como capital. La monarquía se volvió hereditaria, apoyada en instituciones como el Aula Regia y los Concilios de Toledo. En el siglo VI, se produjo un proceso de unificación:

  • Territorial: Dominando a vascones, cántabros y astures, expulsando a los bizantinos y conteniendo a los francos.
  • Legislativa: Unificando el derecho romano y germánico con el Fuero Juzgo.
  • Religiosa: Con la conversión de Recaredo del arrianismo al catolicismo.

Las conspiraciones internas en la nobleza debilitaron el reino visigodo, culminando en la derrota de Guadalete a manos de tropas bereberes del norte de África en 711.

Almorávides y Almohades

Los almorávides y almohades fueron pueblos norteafricanos que incorporaron Al-Ándalus a sus respectivos imperios entre los siglos XI y XIII.

  • Almorávides: Soldados que apoyaban a los reinos taifas tras la conquista de Toledo por Alfonso VI en 1085 y la caída de Zaragoza en manos de Alfonso el Batallador de Aragón en 1118.
  • Almohades: Movimiento religioso entre las tribus bereberes del Atlas que se extendió por el Magreb hasta Al-Ándalus. En 1140 iniciaron la conquista de los dominios almorávides en el norte de África, estableciendo su capital en Marrakech. A mediados del siglo XII, dominaron las taifas de Al-Ándalus. La victoria de Alarcos en 1195 sobre Alfonso VIII de Castilla marcó su apogeo, pero su dominio terminó tras la victoria cristiana en las Navas de Tolosa en 1212.

Provincias Romanas

Las provincias romanas fueron la división política y administrativa de la Península Ibérica tras la conquista romana. Tras la victoria contra Cartago en 197 a.C., se crearon dos provincias: Hispania Citerior e Hispania Ulterior. En el siglo I a.C., el territorio se dividió en tres provincias: Lusitania, Bética y Tarraconensis. En el siglo III d.C., Gallaecia y Cartaginiensis se separaron de la Tarraconensis. En el siglo IV, se creó la Balearica. Cada provincia estaba gobernada por un pretor, ayudado por funcionarios encargados de las cuestiones fiscales, administrativas, jurídicas y militares. Las provincias se subdividían en conventos jurídicos. Navarra pertenecía a la provincia Tarraconensis.

Reino de Pamplona

El Reino de Pamplona fue una institución política cristiana que tuvo su origen en la actitud de insumisión de la aristocracia local encabezada por Íñigo Arista frente a francos y musulmanes en el siglo IX. En el siglo X, con Sancho Garcés (905-925), Córdoba se independizó y comenzó la expansión territorial con el nuevo monarca por La Rioja, Álava y Aragón, estableciendo la capital en Nájera. El reino de Pamplona alcanzó su máxima extensión e influencia política sobre los reinos peninsulares cristianos con Sancho III el Mayor (1004-1035). El reino permaneció hasta 1162, fecha en que Sancho VI el Sabio utilizó en los documentos reales el nuevo título navarrensis.

Reconquista

La Reconquista fue el proceso de expansión territorial llevado a cabo por los núcleos cristianos de la Península Ibérica para acabar con el poder musulmán (desde Covadonga en 722 hasta Granada en 1492). El objetivo era conquistar y repoblar los territorios de Al-Ándalus para restituir el antiguo reino visigodo.

  • Fase 1 (siglos VIII-X): Dominio emiral y califal. Los núcleos cristianos se situaban al norte de la Cordillera Cantábrica y Montes de Galicia (León) y en los valles pirenaicos (Navarra, aragoneses y catalanes), con la frontera en el río Duero y el Prepirineo, sujetos al pago de tributos a Córdoba.
  • Fase 2 (siglos XI-XII): Recuperación cristiana. La división de Al-Ándalus en reinos de taifas favoreció la superioridad militar cristiana. Alfonso VI de Castilla llevó la frontera al valle del Tajo (conquista de Toledo en 1085), y Alfonso I el Batallador de Aragón ocupó Tudela y Zaragoza en el valle del Ebro.
  • Fase 3 (siglos XIII-XV): Grandes conquistas. La victoria cristiana en las Navas de Tolosa en 1212 permitió a Fernando III ocupar el valle del Guadalquivir y a su hijo Alfonso X el Reino de Murcia. Jaime I conquistó las Baleares y Valencia. A finales del siglo XIII, solo quedaba el Reino de Granada, conquistado por los Reyes Católicos en 1492.

Expulsión de los Judíos

La expulsión de los judíos fue una medida política y religiosa adoptada por los Reyes Católicos en 1492, que obligaba a la expulsión de la población judía de Castilla y la Corona de Aragón. El sentimiento antisemita se había intensificado desde la crisis del siglo XIV, con asaltos a las juderías. Muchos judíos fueron forzados a convertirse al cristianismo. La imposición de la fe católica buscaba integrar y unificar sus reinos. En 1492, se dictó el edicto que daba cuatro meses a los judíos que no aceptaban convertirse al cristianismo para salir del reino. El objetivo era preservar la paz social y asegurar la unidad religiosa. Afectó a 150.000 personas en Castilla y a 30.000 en Aragón, que partieron hacia Portugal, el norte de África o el Mediterráneo oriental, donde fundaron comunidades sefardíes y conservaron su idioma, el ladino del siglo XV. Unos 50.000 conversos quedaron vigilados por la Inquisición. Las consecuencias fueron muy negativas para la economía peninsular.

Casa de Contratación

La Casa de Contratación fue una institución fundada por los Reyes Católicos en 1503 para controlar todo el tráfico de personas y mercancías con América, y así cobrar los tributos reales, en especial los metales preciosos. Se estableció en Sevilla. También organizaba las expediciones al Nuevo Mundo en asuntos judiciales y científicos, ya que se ocupaba de elaborar los mapas e instrumentos de navegación para los marinos. En 1717, se trasladó a Cádiz, y en 1790 fue suprimida porque se había liberalizado el comercio con las Indias. Hoy en día, se constituye en un archivo de 80 millones de páginas de documentos originales acerca de los tres siglos de historia de América y de las Filipinas.

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