Teatro crítico universal resumen


Miguel de Cervantes =>


Publica su primera obra, La Galatea, en 1585. Veinte años más tarde aparecerá El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha (1605). En 1615 publica la segunda parte del Quijote y en esa década salen también a la luz las Novelas ejemplares, el Viaje de Parnaso y las Ocho comedias y ocho entremeses.
En el prólogo a su última obra, Los trabajos de Persiles y Sigismunda, escrita poco antes de morir (1616), se despide de sus amigos y de su público.

Francisco de Quevedo =>

Escribíó El Buscón, una novela picaresca, y numerosos libros de prosa didáctica, entre los que destacan Los sueños y De la cuna a la sepultura.
En estas obras utiliza el estilo conceptista. Su poesía es un ejemplo de las contradicciones del espíritu barraco, pues en ella conviven tres planos opuestos: el sublime de su poesía amorosa, el ascético de su prosa moral y el impertinente de su poesía satírica. Toda su obra está traspasada por el sentimiento de desengaño, tanto en el plano personal como en el político.

Luis de Góngora =>

Como poeta se caracteriza por la brillantez y complejidad de su estilo culterano, dominaba el registro popular y era capaz de escribir romances y letrillas llenos de gracia e ingenio. A partir de 1613, al difundirse sus dos poemas extensos, las Soledades y la Fábula de Polifemo y Galatea, su poesía sirvió de modelo para los poetas de la tendencia culterana, que imitaban su estilo brillante y complicado. Estas dos obras son difíciles de entender, pero constituyen dos cumbres de la poesía barroca y convirtieron a Góngora en el poeta más admirado de su tiempo.

Lope de Vega =>

Se dice que Lope escribíó más de mil quinientas obras de teatro, aunque solo se conserven cuatrocientas. Hizo de su teatro el espectáculo que más atraía a los españoles del Siglo XVII. Entre todos los temas, destacan los reflejados en dos tipos de obras: los dramas de honor y las comedias de enredo. – En los dramas de honor, el tema principal es el honor o la dignidad del individuo. Destacan Fuenteovejuna y El caballero de Olmedo.
– En las comedias de enredo se plantean conflictos amorosos y sentimentales con un final feliz. Destaca El perro del hortelano.

Calderón de la Barca =>

En sus obras los protagonistas adquieren un relieve especial en los monólogos. Su producción se puede clasificar en cuatro grupos: – Comedias. Las más importantes son
las de capa y espada.
La dama duende y Casa con dos puertas mala es de guardar son los títulos más conocidos. – Autores sacramentales. Representa el pensamiento católico a través de personajes simbólicos. Escribíó más de setenta autos sacramentales, entre los que destaca El gran teatro del mundo.
– Dramas de honor.

El alcalde de Zalamea

– Dramas filosóficos. El más importante es La vida es sueño.

Fei joo =>

Escribíó el Teatro crítico universal, y divulgó el saber y la falsedad de las supersticiones. Defendíó que palabras nuevas en el castellano de otras lenguas era algo positivo.

José Cadalso =>

Era un autor que viajó por Europa y aprendíó varias lenguas. Su obras más importante es Cartas Marruecas.
La visión de cada uno de estos personajes permite contemplar desde distintas perspectivas los temas tratados. Estos son variados, pero giran sobre todo en torno a la historia de España y las causas de su decadencia, las costumbres de los españoles y diversas cuestiones morales.

Gaspar Melchor de Jovellanos =>

Pretende con sus obras reformar el país. Sus escritos más importantes son:
Memoria para el arreglo de la policía de espectáculos, obra en que describe el origen y desarrollo de los diversos juegos, espectáculos y diversiones populares;
Informe sobre el expediente de la ley agraria, donde expone su programa de reformas, sus ideas sobre las causas de la decadencia española y sus planes como educador; y Memoria del castillo de Bellver, análisis artístico de este monumento, donde estuvo preso. Escribíó también poesía y una notable obra teatral, El delincuente honrado.
Son muy interesantes también sus Cartas y sus Diarios.

Moratín =>

Escribíó solamente cinco obras teatrales. Cuatro de ellas tratan el mismo tema: los errores de una mala educación basada en la falta de libertad y en la coalicción de los padres sobre los hijos. La otra obra, La comedia nueva o El café, satiriza a los malos dramaturgos que por entonces escribían obras extravagantes. La mejor obra de Moratín y la más representativa del teatro neoclásico es El sí de las niñas.
Se trata de una comedia neoclásica cuyo lenguaje se caracteriza por la verosimilitud  y la sencillez.

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *