Demografía y Geografía Humana de España


Estructura Demográfica y Mercado Laboral en España

La España actual se enfrenta a un envejecimiento de su población, con solo el 15% de jóvenes y casi el 18% de personas mayores de 65 años. Este fenómeno se debe al descenso de la natalidad y al aumento de la esperanza de vida, que alcanza los 82 años. Las regiones más afectadas son las de emigración tradicional, como Galicia, y aquellas que atravesaron fuertes crisis económicas, como la Cornisa Cantábrica. Las consecuencias son un aumento en el gasto público y consecuencias sociales como el aumento de la pobreza, desahucios y marginación.

La población activa de España está compuesta por personas entre 16 y 65 años, y se divide en tres sectores económicos: primario (agricultura, ganadería, pesca), secundario (industria y construcción), y terciario (servicios como educación, sanidad y comercio), siendo este último el que más empleo genera (70%). Sin embargo, la tasa de actividad en España es inferior a la media europea, debido a factores como la baja participación femenina, la economía sumergida y la ineficacia.

En cuanto al desempleo, España presenta una tasa superior a la media europea, con un notable aumento durante la crisis de 2008, alcanzando el 26% en 2013 y manteniéndose cerca del 20% en la actualidad. El desempleo afecta especialmente a las mujeres y a los jóvenes, con un paro juvenil superior al 55%. Además, existen grandes diferencias regionales, con algunas comunidades autónomas registrando tasas de paro inferiores al 20%. Las diferencias regionales en las tasas de desempleo también están relacionadas con factores económicos y sociales específicos. Las comunidades autónomas con una mayor importancia de las exportaciones o con sistemas fiscales diferenciados, como el País Vasco o Navarra, tienden a tener tasas de desempleo más bajas. Por otro lado, las regiones con un sector público de gran peso, que ha sufrido importantes recortes, como Andalucía y Extremadura, experimentan tasas de paro más altas. Además, algunas zonas, como Cataluña, han enfrentado una crisis industrial, y otras, como la Comunidad Valenciana, han visto cómo el colapso del sector de la construcción ha afectado gravemente su empleo. También, Ceuta y Melilla presentan una situación particular, con escasa industria.

El desempleo en España es uno de los mayores problemas económicos y sociales del país, con una tasa de paro alta, especialmente entre los jóvenes y las mujeres. Además, existen diferencias marcadas entre regiones, lo que agrava las disparidades territoriales y contribuye a una creciente brecha en la economía del país. Las causas de estas diferencias son diversas, pero incluyen la estructura económica regional, los recortes en el sector público, y el impacto de la crisis económica y la recesión de sectores.

Distribución de la Población en España

La población total en España es de 46.438.422 (datos de julio 2016) y con una densidad de población de 93 hab./km². La densidad de población es la relación entre los habitantes de un área con su superficie en kilómetros cuadrados. Esta población está desigualmente repartida en el territorio: las regiones más pobladas se concentran en las áreas urbanas e industriales de la periferia, en especial el litoral mediterráneo, en las islas Baleares y Canarias y en Madrid. Por el contrario, el interior (con predominio de economía agraria) está poco poblado, con densidades por debajo de 25 hab./km². De hecho, la zona formada por las provincias de Teruel, Soria, Guadalajara y Cuenca, es la zona más deshabitada y envejecida de Europa.

Dentro de cada Comunidad Autónoma, la población se concentra en torno a las capitales provinciales y las áreas urbanas con importantes funciones industriales y terciarias.

Hasta el siglo XVII el interior de la península era la zona más poblada debido a la hegemonía económica de Castilla. Con la crisis económica del siglo XVII se inició la emigración de población hacia el litoral, donde empezaban a desarrollarse las actividades comerciales marítimas. Esta tendencia se vio reforzada con el inicio de la industrialización en España en la segunda mitad del siglo XIX: la población comenzó a desplazarse hacia las zonas urbanas industriales, sobre todo a las más industrializadas: Cataluña (Barcelona), País Vasco (Bilbao) y Madrid fundamentalmente.

La consolidación de la industrialización española entre 1960 y 1975, consolidó la actual distribución de la población española: un interior despoblado, excepto Madrid, y una periferia que concentra la mayoría de la población española. En la actualidad, la concentración demográfica en las grandes ciudades se ha frenado por el encarecimiento de la vivienda y la mejora en los sistemas de transporte: estos factores permiten que la población resida en ciudades medias y pequeñas, incluso espacios rurales, cercanos a las grandes ciudades a las que se desplazan diariamente a trabajar.

Movimientos Migratorios

Los movimientos migratorios se dividen en emigración (salida) e inmigración (llegada), y se miden a través del Saldo Migratorio (SM) y el Crecimiento Real de la Población (CRP). En España, desde la crisis de 2008, ha habido un saldo migratorio negativo debido a más emigrantes que inmigrantes, especialmente con el retorno de latinoamericanos y el aumento de españoles que buscan oportunidades en el exterior.

Históricamente, los movimientos migratorios interiores han pasado por diversas etapas: desde el éxodo rural pre-Guerra Civil hasta la actual tendencia de migraciones interurbanas, donde las ciudades grandes pierden población a favor de localidades medianas y pequeñas. Los tipos actuales incluyen migraciones residenciales, laborales, de retorno rural y desplazamientos habituales por trabajo o estudios. Las consecuencias abarcan desequilibrios demográficos, problemas económicos y sociales, así como deterioro ambiental.

En cuanto a la emigración exterior, España ha pasado de ser un país de emigrantes hasta la década de 1980 a uno receptor desde la década de 1990. Sin embargo, desde 2008, ha aumentado la emigración de jóvenes cualificados hacia Europa. Esto ha generado una reducción de la población joven y una fuga de talento que puede afectar el desarrollo económico.

La inmigración extranjera ha crecido significativamente desde 1999 hasta 2008, con cerca de 5 millones de extranjeros en el país. Los inmigrantes se clasifican en nacionalizados, legales e ilegales, y provienen principalmente de Europa y América Latina. Sin embargo, las tendencias actuales muestran una disminución en la población latinoamericana y un aumento de inmigrantes del Norte de África y el Próximo Oriente debido a conflictos. Las consecuencias de la inmigración incluyen una población más joven que ayuda a frenar el descenso de la natalidad, aunque también surgen problemas de integración cultural y actitudes xenófobas. La inmigración ilegal plantea desafíos como condiciones laborales precarias y explotación. La Ley de Extranjería regula la entrada y derechos de los extranjeros en España mientras busca apoyo europeo para gestionar estos flujos migratorios.

Vocabulario Clave

Censo
Es el registro de datos demográficos, económicos, sociales y culturales de un país en un momento dado. Entre ellos, el total de efectivos, sexo, edad, estado civil, lugar de nacimiento, nacionalidad, lengua hablada, nivel de instrucción, características económicas, fecundidad y vivienda. Se realiza cada diez años; desde 1981, los años acabados en 1.
Crecimiento natural o vegetativo
Es el crecimiento biológico de una población, en España es muy bajo.
Densidad de población
Es la relación entre el número de habitantes que componen una población y la superficie que ocupan. Se expresa en habitantes por km² (hab./km²). Actualmente en España es de 92,2 hab./km².
Envejecimiento de la población
El envejecimiento se produce cuando el porcentaje de ancianos de una población supera el 12% (en España se sitúa en un 18,7%). Sus causas son el aumento de la esperanza de vida y el descenso de nacimientos y de la fecundidad.
Éxodo rural
Es el movimiento migratorio desde el campo a la ciudad. Es una migración entre áreas rurales y urbanas con carácter definitivo o larga duración. Consecuencia de ello es la disminución del hábitat rural y el incremento de la población urbana.
Migración o movimiento migratorio
Desplazamiento de la población de un lugar a otro que lleva consigo un cambio de residencia. Las llegadas a una población se llaman inmigración, y las salidas de una población toman el nombre de emigración.
Padrón
Es el registro de los vecinos de un municipio. Recoge también datos demográficos, económicos y sociales de la población. El padrón se actualiza al 1 de enero de cada año y es un documento dinámico que se modifica constantemente con las altas y bajas residenciales y con los nacimientos y defunciones de los vecinos.
Pirámide de población
Representación gráfica que refleja la estructura de una población por sexo y edad de un territorio en un momento determinado.
Población activa
Es el conjunto de personas que proporcionan mano de obra disponible para la producción de bienes y servicios (población entre 16 y 65 años). Comprende tanto a la población activa que trabaja (población activa ocupada) como a la que está buscando trabajo (población activa desocupada).
Saldo migratorio
Es la diferencia entre inmigrantes y emigrantes en un periodo de tiempo concreto. Será positivo cuando la inmigración sea mayor que la emigración, y negativo en caso contrario.
Tasa de fecundidad
Es el número de nacidos vivos por cada 1000 mujeres en edad de procrear (15-49 años). La tasa española está entre las más bajas del mundo (37,22‰).
Tasa de mortalidad
Es el número de fallecidos por cada 1000 habitantes durante un año. Se halla mediante la fórmula: Tm=Número de fallecidos x 1000/Número total de habitantes. En España es de un 8,79‰.
Tasa de mortalidad infantil
Es el número de niños fallecidos menores de un año por cada 1000 en relación con el total de nacidos vivos. Se trata de un buen indicador del desarrollo, ya que si es baja refleja una buena estructura sanitaria. La de España se encuentra entre las más bajas del mundo (2,68‰).
Tasa de natalidad
Es el número de nacidos vivos por cada 1000 habitantes durante un año. Actualmente España tiene una de las más bajas del mundo (8,80‰).
Tasa de nupcialidad
Es el número de matrimonios por cada mil habitantes dividido por la población total. Se ha reducido significativamente desde 1975, debido en parte al incremento de parejas que viven en unión libre. Actualmente es de un 3,73‰.
Tasa de paro
Es la relación entre la población activa desocupada y la población activa total (empleados y desempleados), expresada en %. En el 2015 la tasa de paro se situaba en un 22,1%. En octubre de 2018 la EPA arrojaba un dato de 14,8%.
Transición demográfica
Paso del antiguo sistema demográfico, caracterizado por elevadas tasas de natalidad y mortalidad, que originaban un lento crecimiento, a un sistema demográfico moderno de nuevo equilibrio, con un lento crecimiento, pero ahora debido a unas tasas de natalidad y mortalidad reducidas. Entre ambos periodos tendría lugar una fase de transición de elevado crecimiento, consecuencia de un descenso de la mortalidad, anterior al de la natalidad.

Geografía Urbana

Existen cuatro tipos básicos de plano urbano:

  • Plano irregular: Sin ningún tipo de planificación, con calles estrechas…
  • Plano lineal: Crecimiento de una ciudad a lo largo de una vía de comunicación.
  • Plano ortogonal: Heredado de Grecia y Roma, donde las calles son rectas y cortadas en ángulo de 90 grados.
  • Plano radiocéntrico: Desde la Edad Moderna, se traza una Plaza Central y desde ella parten calles rectas como los radios de una rueda.

Tipos de Planos Urbanos Detallados

Irregular: Calles estrechas y tortuosas, y plazas sin formas definidas, corresponden al casco antiguo con edificios muy juntos y altos.

Radiocéntrico (o radial): Desde un centro (plaza) parten calles radiales cortadas por otras concéntricas (forman anillos en torno al centro).

Plano ortogonal (en cuadrícula o en damero): Las calles se cortan perpendicularmente entre sí, formando manzanas cuadradas/rectangulares. Proceden de las ciudades griegas o romanas, y se generalizan en los ensanches del s. XIX-XX.

Estructura de la Ciudad

El casco antiguo, que es una zona preindustrial con plano irregular, trama cerrada y edificios históricos. Su morfología varía según la época, ya sea romana, medieval o moderna. Las transformaciones en esta área incluyen la industrialización entre el siglo XIX y 1975, que trajo el derribo de murallas, apertura de calles rectas, densificación, terciarización y deterioro por saturación. Desde 1975, en la etapa postindustrial, se han implementado medidas de peatonalización, rehabilitación de edificios, auge del turismo y gentrificación, que implica el desplazamiento de población de bajos ingresos.

La ciudad industrial surgió entre mediados del siglo XIX y 1936 tras la demolición de murallas medievales, dando paso a paseos y nuevos barrios. Los barrios del ensanche burgués se caracterizan por ser ordenados, higiénicos y lucrativos, con un plano ortogonal y edificios de altura media, como el Barrio de Salamanca en Madrid. Por otro lado, los barrios obreros están situados en el extrarradio y presentan una urbanización desorganizada y escasos servicios; con el tiempo se han revalorizado y remodelado. Los barrios-jardín, inspirados en ideas higienistas como la Ciudad Lineal de Arturo Soria, estaban inicialmente destinados a obreros pero luego atrajeron a clases medias.

Desde 1950, la periferia urbana ha crecido aceleradamente debido al éxodo rural e industrialización, formando áreas residenciales que van desde barrios marginales hasta urbanizaciones privadas. También se han desarrollado áreas industriales y comerciales como polígonos, parques empresariales y centros comerciales. Desde 1975, la ciudad se ha expandido con baja densidad en lo que se conoce como ciudad difusa, generando críticas por su consumo de espacio. Actualmente se apuesta por la densificación y reciclaje urbano.

Aglomeraciones Urbanas

En cuanto a aglomeraciones urbanas, existen áreas metropolitanas que son grandes ciudades con municipios dependientes como Madrid o Barcelona. Las conurbaciones son ciudades que crecen hasta unirse, como Málaga-Marbella. Las regiones urbanas conectan ciudades sin una líder clara; un ejemplo es Asturias con Oviedo, Gijón y Avilés. Por último, las megalópolis son conjuntos urbanos extensos y continuos como el Eje Mediterráneo.

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