Fenómenos Geológicos Externos o Inducidos
Los fenómenos geológicos externos o inducidos son aquellos causados por movimientos en el terreno, en los que intervienen la acción de la gravedad y otros factores naturales: litológicos, climáticos, topográficos o antrópicos.
1. Movimientos de Ladera
Son los desplazamientos de los materiales de una ladera a favor de la gravedad, impulsados por su propio peso. Los factores que actúan sobre los movimientos de laderas pueden ser condicionantes, es decir, aquellos que producen las condiciones propicias para el movimiento, o desencadenantes, que provocan el inicio del movimiento.
Factores Condicionantes:
- Litológicos: Presencia en la superficie de materiales alterados tras una meteorización, falta de cohesión de los materiales que forman la roca y alternancia de estratos de distinta naturaleza en profundidad.
- Estructurales: Disposición de los planos de estratificación de las rocas respecto a la superficie del talud y presencia de fracturas o fallas.
- Climáticos: Alternancia de épocas de lluvia, sequía, hielo y deshielo.
- Hidrológicos: Aumento de la escorrentía superficial, estancamiento del agua, cambios en el nivel freático alcanzado por aguas subterráneas y presencia de estratos de diferente permeabilidad.
- Topográficos: Pendiente superior al 15%, lo que implica riesgo de erosión y de movimiento de ladera.
- Vegetación: Su ausencia o escasez; la presencia de vegetación fuertemente enraizada protege las laderas independientemente de la pendiente.
Factores Desencadenantes:
- Naturales: Precipitaciones, inundaciones, erupciones volcánicas, terremotos, cambios de volumen del terreno por ciclos de hielo-deshielo o humedad-sequía.
- Inducidos por actividades humanas: Movimiento de peso sobre el talud por acumulación de escombros o construcciones, excavaciones con retirada de materiales del pie del talud, creación de taludes artificiales, inundaciones por rotura de presas, encharcamiento por exceso de riego, deforestación de taludes.
Tipos de Movimientos de Laderas:
- Flujos: Movimientos descendentes de ladera de barro, tierra o derrubios rocosos. Con ausencia de una superficie de rotura definida, suelen estar condicionados por la presencia de agua. Según su velocidad pueden ser:
- Reptación: Lento y discontinuo, resultado de la suma de dos movimientos: una extensión perpendicular al terreno por hinchamiento (hidratación de las arcillas) y una caída en vertical por la gravedad (retracción al secarse los materiales). Se manifiesta por el desplazamiento hacia abajo, inclinación de troncos y vallas, así como acumulación de materiales en la parte inferior del talud.
- Coladas de tierra, barro, derrubios: Materiales sueltos (fragmentos de rocas, arcillas). Son súbitas, provocadas por la presencia de agua que aumenta la fluidez de los materiales.
- Desplazamientos: Se producen sobre una superficie de rotura situada en la parte inferior del mismo.
- Traslaciones: Superficie de rotura más o menos paralela a la del talud. Frecuente cuando hay materiales heterogéneos.
- Rotacionales: Superficie de rotura curva o cóncava. Se dan en laderas con materiales homogéneos, normalmente arcillosos.
- Desprendimientos: Caída brusca y aislada de bloques o fragmentos rocosos de un talud. Se dan en terrenos con fuertes pendientes y dependen del grado de fragmentación de las rocas. Son comunes en climas de alternancia de hielo y deshielo o de humedad y sequía.
- Avalanchas: Desprendimientos masivos y rápidos. Pueden ser:
- De nieve (aludes): Grandes masas de nieve que se deslizan ladera abajo.
- De arena o bloques de piedra (en seco): Desprendimientos masivos y en seco de arena o bloques de piedra.
Medidas de Predicción y Prevención:
- Predicción: Mapas de peligrosidad que evalúan el grado de peligrosidad y la inclinación de las pendientes.
- Prevención o Corrección: Mapas de riesgos y medidas de protección civil. En cuanto a medidas estructurales, se incluye la modificación de la geometría de los taludes, revegetación de taludes, construcción de drenajes y medidas de contención.
2. Subsidencias y Colapsos
Son hundimientos del terreno, de origen natural o inducidos por actividades humanas.
- Subsidencia: Hundimiento lento y paulatino del suelo, como el asentamiento del suelo tras la extracción de fluidos o fenómenos de licuefacción sísmica.
- Colapsos: Derrumbamientos bruscos y verticales del terreno, como el hundimiento de una cueva o de una galería minera.
En Terrenos Kársticos:
Dentro del sistema kárstico se agrupan los fenómenos de erosión, transporte y sedimentación en rocas solubles en agua. También pueden afectar a rocas de escasa cohesión como conglomerados y areniscas, que son fácilmente arrastradas por aguas subterráneas, formando túneles y cuevas. En estos terrenos, la escorrentía superficial es escasa y la infiltración a través de grietas originadas por disolución es elevada.
Fenómenos de disolución superficial incluyen: canales o lapiaz y depresiones circulares con forma de embudo (dolinas).
Medidas de Predicción y Prevención:
- Predicción: Estudios geológicos para detectar zonas susceptibles y detectar cavidades.
- Prevención: Mapas de riesgo, ordenación del territorio y relleno de cavidades.
3. Inundaciones
Las inundaciones pueden ser costeras y avenidas (estas últimas pueden ser torrenciales o fluviales). Las inundaciones, tanto costeras como continentales, son el riesgo más destructivo a escala mundial. Forman parte de la dinámica natural de la geosfera, pero tienen un importante componente antrópico debido a la urbanización masiva de valles, costas y otras zonas inundables.
Están causadas por riesgos climáticos, geológicos y antrópicos. Se originan por huracanes, lluvias torrenciales, rápida fusión de hielo y nieve por la subida de temperaturas, erupciones volcánicas, obstáculos en las desembocaduras de los ríos, modificación de cauces, rotura de presas y tsunamis.