Continentes
Se definen por su relación con el manto y por su espesor, de tal modo que sus límites se fijan en los lugares en que la corteza continental pasa bruscamente a la más delgada corteza oceánica. Los continentes comprenden las masas continentales y las zonas sumergidas (el precontinente).
Están constituidos por unidades rocosas antiguas (cratones o escudos) que se encuentran bordeadas y/o cruzadas por formaciones rocosas más modernas (cordilleras).
Macizos Continentales
Cratón
Masa continental que ha alcanzado tal estado de rigidez en un pasado geológico que, desde entonces, no ha sufrido fragmentaciones ni deformaciones al no haber sido afectada por los movimientos orogénicos. Por tal motivo, tienden a ser llanos o presentan relieves bajos con formas redondeadas y rocas frecuentemente arcaicas. Los cratones submarinos se denominan nesocratones.
El cratón se utiliza para distinguir la porción interna estable de la corteza continental respecto de aquellas regiones geosinclinales móviles, las cuales son cinturones lineales de acumulación de sedimentos sujetos a la subsidencia.
Los cratones están divididos geográficamente en provincias o zonas geológicas. Estas son entidades espaciales con atributos geológicos importantes. Una provincia puede incluir un único elemento dominante o un número de elementos relacionados contiguos.
Escudo
Región continental con rocas formadas en el Precámbrico que no han sido recubiertas por el mar. Están formados por las rocas más antiguas de la corteza terrestre, granitizadas (roca proveniente de volcán en la cual hay muchos minerales) y metamorfizadas (han sufrido cambios en la presión y temperatura). Desde sus orígenes, han permanecido estables y conservado su rigidez.
El hecho de que no hayan sido recubiertas por el mar se debe a que han sufrido movimientos tectónicos verticales. No experimentaron plegamientos, ya que resistieron a todos los empujes horizontales. Un escudo es generalmente una gran área de rocas ígneas y metamórficas expuestas que son tectónicamente estables y con poca actividad orogénica. A causa de su estabilidad, la erosión ha aplanado la topografía de la mayoría; sin embargo, comúnmente poseen una superficie bastante convexa y pueden estar rodeadas de una región recubierta de sedimentos denominada plataforma. Los escudos normalmente son los núcleos de los continentes.
Las Cordilleras
Edificios de porte prismático más o menos arqueados, constituidos por rocas metamórficas y/o sedimentarias. Su principal característica es el espesor de las series sedimentarias, dado que exceden la profundidad de las cuencas marinas en que se efectuó su depósito; por ello, se pensó en el hundimiento o subsidencia del fondo sobre el que se realiza el depósito, simultáneamente a la acumulación de los materiales, lo que ha sido confirmado por las teorías de la tectónica de placas.
Al lugar donde se realiza el depósito se le denomina geosinclinal y, junto con los sedimentos que contiene, va a ser deformado por compresión tangencial y elevada la masa de materiales para constituir la cordillera, que de este modo emerge del mar.
El Precontinente
Se subdivide en tres provincias principales: Plataforma Continental, Talud Continental y Borde Continental.
Plataforma Continental
Es una superficie sumergida, suavemente inclinada que se extiende desde la línea de costa hacia el borde de las cuencas oceánicas profundas. Dado que está sobre la corteza continental, se trata claramente de una extensión inundada de los continentes. Al cambiar el nivel del agua durante las glaciaciones, la plataforma fue cubriéndose, pero conservó la mayoría de sus características continentales, que han cambiado a través del tiempo debido a los procesos de erosión y sedimentación.
La extensión promedio de las plataformas continentales mundiales es de 200 a 600 m, y su profundidad media es de 150 a 200 m. En algunos lugares, las plataformas continentales tienen uno o dos escalones en el borde que las une al talud continental. Dichos escalones son planicies marginales.
Tienen una gran importancia económica y política, porque contienen importantes depósitos minerales, entre ellos grandes reservas de petróleo y gas natural, así como enormes depósitos de arena y grava. Las aguas de la plataforma continental contienen también importantes bancos de peces, que son fuentes significativas de alimento. Es un área de muy baja sismicidad y de intensa sedimentación clástica de origen continental, así como química (principalmente carbonatos) y bioquímica.
Talud Continental
Es de mayor declive que la plataforma y llega de 1500 a 3000 m de profundidad, donde se localiza el borde continental. Abunda en depresiones y cuencas. Su origen es tectónico y sedimentario.
Una de las irregularidades más marcadas en el talud son los cañones submarinos, cortados verticalmente en forma de V a modo de valles sumergidos. Estos se localizan a profundidades de 2000 a 4000 m.
Su mayor importancia radica en que es un transmisor de sedimentos entre la plataforma y los fondos oceánicos, principalmente por medio de las corrientes de turbidez que discurren por los cañones. El talud es una región de alta sismicidad, lo cual favorece la inestabilidad y la consecuente movilidad de los materiales sedimentarios que hasta aquí llegan.
Cañones Submarinos
Son profundos valles de laderas escarpadas en el talud continental. Originados por la erosión producida por masas de sedimentos que se desplazan a altas velocidades hacia las zonas más profundas de las cuencas oceánicas.
Borde Continental
Se ubica a continuación del talud y es difícil reconocer el lugar donde se inicia. Es una zona de transición entre el talud y el suelo profundo del océano. Su inclinación es semejante a la de la plataforma continental y tiene un metro más de profundidad por cada 1000 m.