La Piel: Estructura, Tipos y Afecciones Comunes
La piel es el órgano más extenso del organismo, representando entre el 10% y el 15% de su peso total, pudiendo llegar a pesar hasta 4 kg.
Tipos de Piel
La clasificación de la piel se basa en sus características y necesidades específicas:
- Piel normal o eudérmica: Se caracteriza por un equilibrio adecuado entre agua y grasa. Presenta una superficie lisa, color uniforme, poros poco visibles y buena resistencia a los cambios de temperatura.
- Piel seca: Tiende a la aparición de placas escamosas, sensación de tirantez y enrojecimiento. Requiere hidratación constante.
- Piel grasa o seborreica: Se distingue por un aspecto brillante debido a una secreción excesiva de sebo. Posee poros visibles, textura irregular y predisposición a sufrir imperfecciones como el acné.
- Piel mixta: Combina zonas secas con zonas grasas. Típicamente, la «zona T» (nariz y frente) suele ser más grasa, mientras que las mejillas pueden ser secas o normales.
- Piel sensible: Caracterizada por una reacción exagerada a diversos estímulos, manifestándose con enrojecimiento, irritación, ardor, picor y sequedad. La piel atópica es un tipo de piel sensible en la que se produce una reacción exagerada a alérgenos, acompañada de intenso picor, inflamación y aparición de placas por descamación.
Problemas Cutáneos Comunes
Afecciones Específicas de la Piel
- Acné: Es un trastorno de la glándula pilosebácea, causado por su obstrucción o inflamación debido a una elevada producción de sebo y el sobrecrecimiento de bacterias.
- Rosácea: Enfermedad inflamatoria crónica de la piel caracterizada por enrojecimiento persistente, que puede estar acompañado por vasos sanguíneos visibles (cuperosis), rubor y la aparición de granos enrojecidos que no deben confundirse con el acné.
- Pigmentación: Se refiere a la aparición de manchas debido a un exceso de producción de melanina. Los principales problemas de pigmentación incluyen el melasma y las manchas de envejecimiento o lentigos solares.
Envejecimiento Cutáneo: Causas y Prevención
El envejecimiento de la piel es un proceso complejo influenciado por:
- Factores intrínsecos: Son difíciles de controlar e incluyen alteraciones hormonales o cambios en el material genético.
- Factores extrínsecos: Relacionados con el estilo de vida y los agentes ambientales a los que estamos expuestos (exposoma).
Siguiendo un estilo de vida saludable y controlando los factores extrínsecos, podemos mejorar significativamente el aspecto y la salud de nuestra piel.
Cosméticos: Composición y Clasificación
Interpretación de Etiquetas Cosméticas
El INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos) es el listado de ingredientes que se encuentra en la etiqueta de los productos cosméticos. Detalla la composición completa, incluyendo principios activos y excipientes.
Clasificación de Productos Cosméticos
Los productos cosméticos se pueden clasificar de diversas maneras:
- Según su acción cosmética: Se agrupan en categorías como higiene y limpieza, decorativos, para perfumar, correctivos, de mantenimiento y de protección.
- Según el lugar de aplicación: Se clasifican en función de las áreas o superficies del cuerpo con las que están en contacto (ej., facial, corporal, capilar, uñas, etc.).
- Según su forma cosmética: La forma cosmética es la presentación final del producto, determinada por el tipo de forma galénica y los excipientes utilizados (ej., cremas, geles, lociones, polvos, etc.).
Afecciones y Problemas Corporales Específicos
Abordaje de diversas afecciones cutáneas que afectan al cuerpo:
- Celulitis: Se aborda con activos lipolíticos, circulatorios-venotónicos y reestructurantes.
- Flacidez: Se trata con cremas reafirmantes y la práctica regular de ejercicio.
- Estrías: Se benefician de activos hidratantes, regenerantes y nutritivos.
- Acné corporal: Requiere el uso de cremas no grasas y reguladoras del sebo.
- Queratosis pilar: Se recomienda el uso de cremas exfoliantes.
- Dermatitis atópica o eccema: Se maneja con activos emolientes, calmantes y reparadores.
Consejos para el Cuidado de la Piel Sensible o Atópica
- Evita baños muy calientes y prolongados.
- Utiliza siempre jabones y geles suaves, sin fragancia, preferiblemente emolientes y reparadores.
- Mantén la piel bien hidratada con productos adecuados.
- Utiliza ropa de algodón suelta y transpirable.
- Evita el rascado y mantén las uñas limpias y cortas para prevenir lesiones cutáneas.
- Evita el contacto con productos irritantes y alérgenos conocidos.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria, crónica y no contagiosa de la piel, caracterizada por la aparición de placas escamosas.
Estructura y Fisiología del Cabello
El cabello se compone de dos partes principales: el tallo y la raíz.
El Tallo Capilar
El tallo, la porción visible del cabello, posee tres capas desde el interior al exterior:
- Médula: Compuesta por queratina blanda.
- Corteza: Formada por fibras de queratina, responsables de aportar fuerza y elasticidad al cabello. Contiene la melanina, que determina el color.
- Cutícula: Proporciona protección al tallo capilar. Está compuesta por escamas que pueden dañarse con facilidad, condicionando el aspecto y brillo del cabello.
La Raíz Capilar
La raíz es la porción profunda del pelo que penetra en la dermis y en el tejido subcutáneo, rodeada por el folículo piloso.
- Bulbo piloso: Contiene las células germinativas responsables del crecimiento del cabello.
- Papila dérmica: Compuesta por células dérmicas y vasos sanguíneos que nutren el folículo.
Glándulas Sudoríparas
Existen dos tipos principales de glándulas sudoríparas en la piel:
- Glándulas ecrinas: Distribuidas por casi todo el cuerpo, su función principal es la regulación de la temperatura corporal a través de la producción de sudor.
- Glándulas apocrinas: Se localizan en áreas específicas como axilas e ingles. Se relacionan con aspectos odoríferos, ya que sus secreciones, al ser metabolizadas por bacterias, producen el olor corporal. Se comunican con un folículo piloso y, junto con él, vierten sus secreciones en la superficie de la piel.
Cosmetovigilancia y Seguridad Cosmética
¿Qué es el Sistema de Cosmetovigilancia y cómo funciona?
La cosmetovigilancia es el sistema de notificación, recogida, evaluación y seguimiento de la información sobre los efectos no deseados observados como consecuencia del uso normal de los productos cosméticos. Su objetivo es garantizar la seguridad de los consumidores.
¿Quién puede notificar un efecto no deseado de un cosmético?
La normativa establece que los distribuidores y las personas responsables de los productos cosméticos tienen la obligación de notificar todos los efectos graves no deseados relacionados con el uso habitual de estos productos. Los ciudadanos también pueden notificar estos efectos a las autoridades competentes.
Componentes Cosméticos que Causan Reacciones Adversas
Algunos de los componentes que habitualmente causan reacciones adversas en los cosméticos incluyen:
- Las fragancias.
- Los conservantes, como los parabenos.
- El amoniaco y sus derivados en los tintes.
- Algunos filtros químicos en protectores solares.
Tipos de Reacciones Adversas Más Habituales
Entre las reacciones leves que pueden surgir se encuentran:
- Irritación, ardor, enrojecimiento.
- Aparición de comedones.
- Dermatitis de contacto con irritación, eritema o quemadura.
- Acné cosmético.