La Escultura y Pintura Románica en España: Características, Obras y Vocabulario Esencial


ESCULTURA ROMÁNICA

A través del Camino de Santiago, penetra la influencia de la escultura francesa, dando lugar a una gran cantidad de relieves y esculturas de bulto redondo de gran dramatismo y expresividad.

La escultura española comparte la misma función didáctica y los mismos valores estéticos que el resto de la escultura románica europea, destacando el hieratismo, el esquematismo y la deformación de las figuras.

CARACTERÍSTICAS ESTILÍSTICAS

  • Antinaturalismo: Desconexión de lo representado con el mundo real. Posee un carácter simbólico y alegórico, buscando la expresión del contenido religioso.
  • Las figuras se deforman intencionadamente buscando el impacto emocional.
  • Simplicidad y estilización. Predominio del geometrismo y la abstracción.
  • Se rehúsa la representación del cuerpo humano desnudo; todas las figuras se cubren con vestiduras. No existe un canon de proporcionalidad ni equilibrio entre masa y peso.
  • Las figuras son rígidas y hieráticas. Son solemnes y alargadas, para acentuar su carácter espiritual. Técnicamente, presentan un cierto aire arcaico.
  • Ausencia general de movimiento.
  • Las composiciones y escenas se yuxtaponen en un mismo plano, sin formar grupos cohesionados.
  • Falta de volumen; las composiciones son planas y simétricas, con un claro predominio de la frontalidad.
  • Es una plástica que se dirige a la mente, de una gran carga intelectual, dado que transmite contenidos ideográficos con un evidente afán didáctico.

ESCULTURA MONUMENTAL O DECORATIVA

  • Destacan los tímpanos del Crismón de la Catedral de Jaca, del Cordero de San Isidoro de León, y el Pórtico de las Platerías de Santiago, caracterizados por su arcaísmo.
  • Los mejores ejemplos de escultura románica castellana se encuentran en el claustro del Monasterio de Silos (Burgos): los capiteles de las columnas geminadas presentan decoración vegetal, animales fantásticos y temas bíblicos (con influencia de los marfiles islámicos). Los relieves de los pilares de los ángulos se decoran con escenas de la vida de Cristo de un realismo muy expresivo, como La Incredulidad de Santo Tomás (donde los personajes se arquean para adaptarse al marco y las piernas entrecruzadas dan sensación de movimiento).
  • La portada del Monasterio de Ripoll (Barcelona) es el mejor ejemplo de la escultura románica catalana: una especie de arco triunfal con escenas en frisos (el Pantocrátor y los 24 ancianos en el superior).
  • El Pórtico de la Gloria (S. XII-XIII) de Santiago de Compostela es la obra cumbre de la escultura románica española. Aunque la estructura de la fachada y los relieves del tímpano son claramente románicos (Pantocrátor con los símbolos de la Pasión), las figuras de los apóstoles en las jambas y la de Santiago en el parteluz representan la transición al gótico por su búsqueda del naturalismo, su humanización y por no deformarse para adaptarse al marco, ya que poseen proporciones reales, volumen y movimiento.

ESCULTURA EXENTA

  • Estatuas en madera policromada de dos tipos:
    1. El Cristo Majestad crucificado, cubierto con una rica túnica, rígido e inmóvil, sin gesto (ej. Cristo Batlló).
    2. El Cristo Crucificado, solo o rodeado de la Virgen, San Juan y otros personajes, que ofrece una imagen de sacrificio (ej. Descendimiento de San Juan de las Abadesas).
  • También son comunes las Vírgenes sedentes con el Niño, figuras inexpresivas y distantes, indicando la pertenencia a otro mundo.
  • Trabajos en marfil: Destaca el Crucifijo de Don Fernando y Doña Sancha.

PINTURA ROMÁNICA

Los temas tratados son fundamentalmente bíblicos, destacando el Apocalipsis (último libro del Nuevo Testamento) y, sobre todo, la Majestas Domini o Pantocrátor. Otro tema recurrente es el de los Tetramorfos, la representación de los cuatro evangelistas acompañados de su simbología correspondiente:

  • San Lucas: Toro
  • San Marcos: León
  • San Juan: Águila
  • San Mateo: Ángel

La técnica más utilizada para la pintura mural en interiores de iglesias y ábsides es el fresco (pigmentos diluidos en agua aplicados sobre yeso húmedo). Sin embargo, los retoques se realizaban con la técnica del temple, utilizando el huevo como aglutinante. Su finalidad y estilo son similares a los del resto de la pintura románica europea: trazo lineal, colores vivos, hieratismo, frontalismo, y ausencia de profundidad y volumen.

También existe la pintura sobre tabla, como los frontales de altar, colocados delante del altar y divididos en secciones. Destaca el Frontal de la Seu d’Urgell (Lleida), con el Pantocrátor en el centro con doble mandorla y los apóstoles a los lados dirigiendo la mirada hacia Cristo.

CARACTERÍSTICAS FORMALES DE LA PINTURA

Entre sus características formales podemos destacar las siguientes:

  • La figura humana se reduce a esquemas, buscando plasmar una idea concreta (ideográfica).
  • Trazo dibujístico grueso, silueteando las figuras en negro o rojo.
  • Utilización de colores planos, sin mezcla ni gradación.
  • Representación de figuras hieráticas, sin movimiento.
  • Carencia de profundidad (ausencia de perspectiva).
  • Composiciones yuxtapuestas, con muchas figuras juntas y agolpadas.
  • La pintura es antinatural y está llena de misticismo.
  • Anatomía desproporcionada.

PRINCIPALES FOCOS EN ESPAÑA

Cataluña

En Cataluña surgen importantes pinturas románicas en el siglo XI, utilizando la técnica peculiar del fresco retocado al temple, lo que aporta mayor vivacidad a las obras. Un ejemplo es el Martirio de San Quirce. Este estilo resulta a menudo muy arcaizante y recuerda a la pintura bizantina de los siglos VI y VII.

Deben mencionarse especialmente los frescos de San Clemente y Santa María de Taüll (Lleida).

Castilla y León

La influencia de la miniatura mozárabe, junto con matices más naturalistas, da lugar a una pintura románica de mayor inspiración, con más capacidad narrativa y sutiles toques de paisaje.

El ejemplo fundamental es la cripta de San Isidoro de León (Panteón de los Reyes), cuyas pinturas datan del siglo XII. Seis bóvedas están cubiertas con pintura donde se utiliza el blanco como elemento plástico para sugerir volumen. A pesar del convencionalismo característico, los ropajes y los rostros están tratados con una libertad y naturalidad poco comunes, reflejo de una atención más dedicada al natural.

En Soria, encontramos pinturas en la iglesia de San Baudelio de Berlanga, característica porque en ella no solo se representan temas religiosos, sino también escenas de caza.

Por último, en Segovia se encuentran las pinturas de Maderuelo, que representan escenas del Génesis (como Adán y Eva o Caín y Abel). Actualmente se conservan en el Museo del Prado en Madrid.

VOCABULARIO ESENCIAL DEL ARTE ROMÁNICO

ABOCINADO: Dícese de cualquier vano (ventana o puerta) cuya anchura aumenta o disminuye hacia el interior en un muro grueso. En el arte románico se aplica especialmente a las portadas, cuyas arquivoltas y jambas van disminuyendo de anchura y altura hacia la entrada. Ej. Portada de la Catedral de Santiago de Compostela (S. XII).

ARQUIVOLTA: Conjunto de arcos abocinados que forman una portada o ventana. Ej. Portada de Santo Domingo de Soria (S. XI-XII).

BANDA LOMBARDA: Pilastra alargada y vertical que sobresale escasamente del muro, que suele acompañarse de arquerías ciegas a modo de friso (los arquillos ciegos o arcos lombardos). Es un motivo decorativo arquitectónico, originario del norte de Italia, que se extendió por toda Europa, adaptándose en España, especialmente en Cataluña. Ej. Santa María de Taüll (S. XI).

BESTIARIO: Conjunto de figuras de animales reales, fantásticos o monstruosos (arpías, vulpejas) que poseen un significado moral. Suelen estar tallados en los capiteles de las iglesias y monasterios románicos. Ej. Capiteles de Santo Domingo de Silos (S. X).

CABECERA: Testero de una iglesia, o parte en que se halla el altar principal. Ej. Cabecera de San Martín de Frómista (S. XI).

CLAUSTRO: Espacio de galerías porticadas con arcos apoyados en columnas simples o pareadas, que rodean un patio, generalmente de forma cuadrangular. Desde los claustros se accede normalmente a otras dependencias. Ej. Claustro de Santo Domingo de Silos (S. X).

CONTRAFUERTE: Elemento sustentante, también llamado estribo. Es una especie de pilastra adosada al muro, que sirve para reforzarlo en aquellos puntos donde soporta mayores empujes, coincidiendo normalmente con los arcos fajones que sostienen la bóveda interior. Ej. Contrafuerte de San Martín de Frómista (S. XI).

CRUCERO: Espacio cuadrangular formado por el cruce de dos naves. Recibe también la denominación de transepto. Ej. Crucero de la Catedral de Santiago de Compostela (S. XI-XII).

DEAMBULATORIO: También llamado girola. Pasillo o corredor que rodea la parte trasera del presbiterio, prolongación de las naves laterales. Permite el tránsito de los fieles sin interrumpir el culto. Muy frecuente en las iglesias de peregrinación. Ej. Deambulatorio de la Catedral de Santiago de Compostela (S. XI-XII).

ESPADAÑA: Pared elevada sobre la fachada de una iglesia o monasterio, que cumple la función de albergar las campanas. Presenta uno o más vanos. Ej. Espadaña de Santa María de Eunate (S. XII).

JAMBA: Elemento arquitectónico vertical que flanquea un vano y sostiene un arco o un dintel. Ej. Jambas de la portada de San Isidoro de León (S. XII).

ISOCEFALIA: Norma artística, en escultura y pintura, que alinea las cabezas a la misma altura. También hace referencia a la costumbre de presentar rasgos faciales muy parecidos entre los personajes de una escena. Ej. La Duda de Tomás, machón de Santo Domingo de Silos (S. XI).

MANDORLA: Italianismo que significa almendra. Es un óvalo o marco almendrado que rodea a Cristo en Majestad, especialmente en el arte románico. Simboliza la luz divina que emana de Cristo. Ej. Pantocrátor de Santa Fe de Conques (S. XII).

PANTOCRÁTOR: Representación de Dios Todopoderoso, sedente, con un libro en una mano y bendiciendo con la otra. Es el Dios de la Segunda Parusía, que viene a juzgar al mundo, por lo que los símbolos que le rodean se inspiran en el Apocalipsis. Ej. Pantocrátor de Santa Fe de Conques (S. XII).

TETRAMORFOS: Significa cuatro formas. Se refiere a la representación de los cuatro evangelistas inspirada en la visión del Apocalipsis de San Juan. Se representan rodeando a Cristo, con simbología animal y siempre alados: Mateo (Hombre), Juan (Águila), Marcos (León), Lucas (Buey). Ej. Tetramorfos del Panteón de los Reyes de San Isidoro de León (S. XI).

TÍMPANO: Espacio interior de un frontón, delimitado por el dintel y las arquivoltas en las portadas de los templos. Se reserva para la decoración escultórica más importante. Ej. Portada del Cordero en San Isidoro de León (S. XII).

TRANSEPTO: Nave transversal que se cruza con la principal. Se utiliza indistintamente con el término crucero. Ej. Transepto de la Catedral de Santiago de Compostela (S. XI-XII).

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *