La Minoría de Edad y el Papel de los Tutores
Tesis
Primera Tesis
Kant sostiene que la mayoría de las personas permanecen en un estado de minoría de edad no porque sean incapaces de razonar, sino por pereza y cobardía. Aunque la naturaleza ya los ha dotado de la capacidad de pensar por sí mismos, prefieren seguir dependiendo de otros para evitar el esfuerzo y la responsabilidad de tomar decisiones. Esta idea refleja una crítica a la pasividad de los individuos ante la posibilidad de ejercer su propia razón.
Segunda Tesis
Debido a esta actitud pasiva, algunos individuos asumen el papel de tutores, es decir, se erigen como guías que piensan y deciden por los demás. Kant menciona ejemplos como el libro que piensa por el individuo, el director espiritual que dicta su moral y el médico que regula su vida. De este modo, la dependencia se perpetúa porque resulta cómodo delegar la responsabilidad del pensamiento y la toma de decisiones en otros.
Tercera Tesis
Los tutores no solo ejercen control sobre los individuos, sino que también les hacen creer que ser autónomo es difícil y peligroso. Mediante estrategias de miedo y desinformación, convencen a la sociedad de que es mejor seguir bajo su dirección. Kant insinúa que este mecanismo de control no es accidental, sino intencionado: los tutores desean mantener su poder y evitar que las personas descubran su capacidad de actuar por sí mismas.
Cuarta Tesis
Para reforzar su dominio, los tutores infantilizan a las personas, comparándolas con niños pequeños o animales domésticos que necesitan apoyo constante para no caerse. Mediante este proceso de «embrutecimiento», logran que los individuos tengan miedo de la libertad y rechacen cualquier intento de independencia. Kant sugiere que la sociedad ha sido condicionada a la sumisión, de manera que cualquier acto de autonomía se percibe como peligroso.
Conclusión
A pesar de la imposición de estos miedos, Kant afirma que la independencia intelectual no es tan difícil ni peligrosa como se hace creer. Aunque es natural que al principio haya errores y caídas, con el tiempo se logra la autonomía. La clave está en superar el temor inicial y atreverse a usar la razón de manera libre y crítica.
Relación con Descartes
La crítica de Kant a la dependencia intelectual puede relacionarse con la teoría del método cartesiano de René Descartes. Propone la duda metódica como herramienta para liberarse de creencias impuestas y alcanzar el conocimiento verdadero mediante la razón. Al igual que Kant, Descartes insiste en la importancia de pensar por uno mismo en lugar de aceptar pasivamente lo que otros dictan. Mientras Kant denuncia la pereza y la cobardía como obstáculos para la autonomía.
La Ilustración como Proceso y la Libertad Religiosa
En este fragmento de ¿Qué es la Ilustración?, Kant reflexiona sobre el proceso de emancipación intelectual de la humanidad. Aunque aún no vivimos en una época ilustrada, estamos en un proceso de Ilustración, es decir, en un periodo en el que las personas tienen la posibilidad de salir de su autoculpable minoría de edad. A través del análisis de las siguientes tesis, se observa cómo Kant describe el avance hacia la autonomía del pensamiento, especialmente en relación con la religión, y el papel del rey Federico en este proceso.
Tesis
Primera Tesis
Kant comienza planteando la pregunta de si vivimos en una época ilustrada y responde negativamente, pero aclara que sí estamos en una época de Ilustración. Esto significa que la humanidad aún no ha alcanzado un estado en el que la mayoría de las personas piensen por sí mismas de manera autónoma, pero estamos en camino hacia ello. La Ilustración es un proceso gradual que requiere tiempo y esfuerzo para superar la dependencia intelectual.
Segunda Tesis
Kant señala que, si bien hemos avanzado en muchos aspectos, seguimos siendo menores de edad en materia de religión. Esto implica que la mayoría de las personas aún dependen de autoridades externas para guiar su pensamiento religioso y no se atreven a razonar libremente sobre sus creencias. La tradición, el dogma y el miedo al castigo han impedido que los individuos ejerzan plenamente su uso público de la razón en este ámbito.
Tercera Tesis
A pesar de estos obstáculos, Kant sostiene que estamos saliendo poco a poco de la autoculpable minoría de edad. Se han abierto espacios de debate y reflexión, y cada vez hay más personas que ejercen su capacidad de pensamiento independiente. El proceso es lento, pero irreversible, ya que la difusión del conocimiento y la libertad de expresión están debilitando progresivamente las barreras que impedían el acceso a la Ilustración.
Cuarta Tesis
Finalmente, Kant destaca el papel del rey Federico II de Prusia, a quien considera un símbolo del avance de la Ilustración. Durante su reinado, se promovió la libertad en el ámbito del pensamiento y el conocimiento, aunque aún se mantenían restricciones en el uso privado de la razón (como en el ámbito militar o administrativo). Federico permitió que los intelectuales escribieran y debatieran libremente, siempre que no desafiaran el orden político establecido.
Conclusión
Kant nos muestra que la Ilustración es un proceso en desarrollo, no un estado alcanzado. Aunque todavía hay áreas en las que la humanidad sigue dependiendo de tutores, especialmente en la religión, el camino hacia la autonomía intelectual se está abriendo. La figura de Federico representa un gobierno que, sin ser completamente ilustrado, favoreció el avance del pensamiento crítico y la libertad intelectual.
Relación con Descartes
Este texto de Kant puede relacionarse con la filosofía de René Descartes, quien defendía el uso de la razón como único camino para alcanzar la verdad. Descartes propuso la duda metódica, un ejercicio en el que se pone en cuestión todo conocimiento previo hasta encontrar una base indudable (cogito, ergo sum). De manera similar, Kant señala que la Ilustración es un proceso en el que las personas deben aprender a pensar por sí mismas en lugar de aceptar pasivamente lo que la tradición o la religión dictan. Ambos filósofos abogan por la autonomía del pensamiento como el camino hacia el verdadero conocimiento.
La Emancipación Intelectual y el Rol del Gobernante Ilustrado
En este fragmento, Kant presenta su idea central sobre la Ilustración como la salida del ser humano de su «minoría de edad», entendida como la incapacidad de pensar y decidir por sí mismo sin la guía de otros. El texto enfatiza especialmente la cuestión religiosa, donde la tutela es más perjudicial, y argumenta que un gobernante ilustrado debe permitir la libertad de pensamiento, no solo en religión, sino también en la legislación y el debate público. Federico el Grande es mencionado como un ejemplo de este tipo de gobernante.
Federico II de Prusia (1712-1786) fue un monarca ilustrado que promovió la libertad de pensamiento, la tolerancia religiosa y el progreso cultural, convirtiéndose en un referente del despotismo ilustrado.
Tesis
Primera Tesis
Kant define la Ilustración como el proceso en el que el ser humano abandona su dependencia intelectual y aprende a pensar por sí mismo. En este contexto, la «minoría de edad» es el estado de obediencia ciega a autoridades externas.
Segunda Tesis
A diferencia de la religión, en el arte y la ciencia no hay una imposición dogmática tan fuerte, ya que los gobernantes no suelen intervenir directamente en estas áreas. Esto demuestra que la tutela intelectual no es necesaria en todos los ámbitos.
Tercera Tesis
La falta de libertad en cuestiones religiosas no se debe a la incapacidad de la gente, sino a la opresión de quienes ostentan el poder. El miedo y las amenazas son los mecanismos de control que impiden la emancipación del pensamiento.
Cuarta Tesis
Kant argumenta que un gobernante ilustrado no solo debe permitir la libertad religiosa, sino también la crítica en la legislación. La razón pública debe ser libre para que los ciudadanos puedan debatir y mejorar las leyes sin que ello amenace la estabilidad del Estado.
Conclusión
Kant elogia a Federico II de Prusia como un modelo de gobernante ilustrado, ya que permitió libertad religiosa y fomentó el uso público de la razón sin temer una amenaza a su poder.
Relación con Descartes
El pensamiento de Kant sobre la Ilustración se vincula con Descartes en la importancia del uso autónomo de la razón. Descartes inaugura la modernidad filosófica con el «pienso, luego existo», defendiendo que la verdad debe basarse en la razón individual y no en la autoridad externa. Kant lleva este principio al ámbito social y político, argumentando que la emancipación intelectual debe extenderse a la sociedad en su conjunto.
Libertad de Pensamiento y Acción: La Paradoja de la Ilustración
En este fragmento, Kant expone la relación entre la libertad de pensamiento y la libertad de acción, destacando la aparente paradoja de la Ilustración. Para Kant, la Ilustración no significa la ausencia total de restricciones, sino el uso progresivo de la razón pública dentro de los límites impuestos por la sociedad y el gobierno. A través del análisis de estas tesis, podemos comprender cómo Kant concibe la emancipación intelectual y su impacto en la vida política y social.
Tesis
Primera Tesis
Kant establece la paradoja fundamental de la Ilustración: «¡Razonad todo lo que queráis, pero obedeced!». Esto significa que los individuos tienen el derecho de pensar libremente y debatir sobre cualquier asunto, pero deben obedecer las leyes vigentes mientras tanto. Es decir, aunque la libertad de pensamiento sea ilimitada en el ámbito público, el uso privado de la razón (por ejemplo, dentro del trabajo o la jerarquía estatal) sigue estando restringido.
Segunda Tesis
Kant señala otra paradoja de la Ilustración: aunque la libertad parece un medio para el desarrollo del espíritu humano, en realidad impone barreras. En contraste, un grado menor de libertad puede ser beneficioso, pues proporciona el espacio controlado en el que la razón puede desarrollarse de manera ordenada. Esta afirmación sugiere que la Ilustración no puede surgir del caos, sino dentro de un marco estructurado que permita el crecimiento de las facultades humanas.
Tercera Tesis
El texto sugiere que la libertad de pensamiento llevará, con el tiempo, a la libertad de acción. Kant utiliza la metáfora de la semilla que, una vez plantada, crecerá y cambiará el espíritu del pueblo. A medida que los ciudadanos comiencen a cuestionar y razonar, eventualmente demandarán mayor libertad de acción y transformación social.
Cuarta Tesis
En la última tesis, Kant enfatiza que el ser humano no es una máquina, sino un ser con dignidad. Esto significa que el gobierno no debe tratar a sus ciudadanos como simples engranajes dentro de un sistema, sino como individuos capaces de pensar y actuar libremente. La Ilustración no solo busca la expansión del conocimiento, sino también el reconocimiento de la humanidad como algo más que un simple objeto de control.
Conclusión
Kant muestra cómo la Ilustración es un proceso progresivo y estructurado. No se trata de una revolución inmediata, sino de un desarrollo en el que el libre pensar lleva paulatinamente a la libertad de acción. Sin embargo, este cambio debe darse dentro de ciertos límites para evitar el caos. Al final, el objetivo de la Ilustración es que el ser humano sea tratado con dignidad, no como una máquina obediente, sino como un ser autónomo.
Relación con Descartes
Este texto de Kant puede relacionarse con la filosofía de Descartes, especialmente con su idea del método racionalista. Descartes propuso la duda metódica, es decir, cuestionar todo conocimiento previo para llegar a verdades evidentes. De manera similar, Kant defiende el derecho a razonar libremente como el camino hacia la emancipación intelectual. Ambos filósofos ven en el uso de la razón la clave para el desarrollo humano, aunque Kant enfatiza que este proceso debe ser gradual y enmarcado en un orden social.