Maniobra de heimlich acostado


PÉRDIDAS DE CONOCIMIENTO


Las pérdidas de conocimiento son aquellas situaciones en las que, por la causa que sea, se halla abolida la actividad consciente de la víctima. Éstas se clasifican en:

LIPOTIMIA O DESMAYO

En la que el sujeto siente que le fallan las fuerzas y registra la sensación de que va a sufrir una pérdida inminente de la conciencia; a veces pasa por una fase breve de tambaleo postural antes del caer al suelo; se produce de carácter súbito y está provocada por la falta de sangre al cerebro, y sus causas pueden ser: emociones fuertes, agotamiento, frío o calor excesivo, dolor, cambios significativos de la presión atmosférica, hemorragias, etc.

SÍNCOPE

Es la pérdida de conocimiento por causa cardiaca, al producirse una brusca disminución del número de contracciones (latidos) del corazón.

COMA;

que es un estado de pérdida profunda de la conciencia, o de sopor intenso, que surge en diferentes enfermedades o tras haber sufrido un traumatismo grave.

TRATAMIENTO

En el caso de un simple desmayo: se colocará a la víctima en el suelo, o sobre un plano horizontal, con la cabeza lo más baja posible y las piernas ligeramente elevadas, se le aflojarán las prendas que pudieran estar oprimiéndole, dándole aire hasta su recuperación que, en estas situaciones leves, será prácticamente inmediata. 

CONVULSIONES


Las convulsiones son crisis de contracciones involuntarias y violentas, continuas o discontinuas, de los músculos esqueléticos, que suceden con o sin pérdida de conciencia. Sus causas pueden ser por trastorno cerebral (convulsiones epilépticas), por ingestión de sustancias tóxicas, por fiebre elevada, por disminución de la concentración de oxígeno en la sangre (convulsiones durante un síncope) y por causas psíquicas (convulsiones histéricas).

TRATAMIENTO

La conducta que se debe seguir en primeros auxilios en el caso de que la víctima haya caído al suelo es:  *Protegerla para que no se hiera con lo que le rodea y evitarle situaciones peligrosas (como en el caso de la caída sobre el agua con peligro de ahogamiento),  *Se procurará que no se dañe al realizar los movimientos convulsivos involuntarios, sin intentar sujetar al paciente con fuerza. *Colocar un almohadillamiento bajo la cabeza. *Aflojarle la ropa de alrededor del cuello y ponerle algo entre sus dientes (superiores e inferiores)
para evitar que se muerda la lengua.

5. OBSTRUCCIÓN DE LAS VÍAS RESPIRATORIAS

Entendemos por obstrucción de las vías respiratorias aquella que compromete a tráquea, laringe y faringe. Esta obstrucción suele ser de aparición brusca, ocasionada en la mayoría de las ocasiones por la entrada de un cuerpo extraño en las citadas vías respiratorias. Esta obstrucción provoca que se limite, e incluso se bloquee, el paso de aire a los pulmones, produciéndose como consecuencia una carencia de oxígeno a las células del organismo, que si no es resuelta en un tiempo moderado puede llegar a comprometer la vida del afectado.

Síntomas:

Asfixia.
• Dificultad para respirar que se manifiesta en una respiración forzada. • Agitación e inquietud. • Cianosis. • Cambios en el estado de conciencia, pudiendo llegar a la pérdida de conocimiento.

Obstrucción incompleta o parcial:

El cuerpo extraño no tapa toda la entrada de aire, por lo que se pone en funcionamiento el mecanismo de defensa y la persona empieza a toser. – Dejarlo toser (los mecanismos de defensa funcionan). – Observar que siga tosiendo o que expulse el cuerpo extraño. – NO golpear nunca la espalda, ya que se podría producir la obstrucción completa o introducirse más el cuerpo extraño.

Obstrucción completa o total

En este caso la persona no tose, ni habla. Esto indica que no entra ni sale aire, pues las cuerdas vocales se mueven gracias a la vibración que produce el aire al respirar. Generalmente el accidentado se lleva las manos al cuello y no puede explicar lo que le pasa, emitiendo sonidos afónicos. Presenta gran excitación, pues es consciente de que no respira: tiene la sensación de muerte inminente. El objetivo de la maniobra de Heimlich es empujar el cuerpo extraño hacia la tráquea y, por ende, hacia la salida mediante la expulsión del aire que llena los pulmones. Esto se consigue efectuando una presión en la boca del estómago (abdomen) hacia adentro y hacia arriba para desplazar el diafragma (músculo que separa el tórax del abdomen y que tiene funciones respiratorias) que a su vez comprimirá los pulmones, aumentando la presión del aire contenido en las vías respiratorias (tos artificial).Actuación: 1. Actuar con rapidez. 2. Agarrar al accidentado por detrás y por debajo de los brazos. Colocar el puño cerrado 4 dedos por encima de su ombligo, justo en la línea media del abdomen. Colocar la otra mano sobre el puño. 3. Reclinarlo hacia adelante y efectuar una presión abdominal centrada hacia  adentro y hacia arriba, a fin de presionar (de 5 a 10 veces) el diafragma. De este modo se produce la tos artificial. Es importante resaltar que la presión no se debe lateralizar. Ha de ser centrada. De lo contrario se podrían lesionar vísceras abdominales de vital. 4. Seguir con la maniobra hasta conseguir la tos espontánea o hasta la pérdida de conocimiento. 5. En caso de pérdida de conocimiento, se coloca al accidentado en posición de Soporte
Vital Básico (acostado), con la cabeza ladeada, y se sigue con la maniobra de Heimlich en el suelo. En esta situación (de inconsciencia) se debe alternar la maniobra de Heimlich con la ventilación artificial (boca-boca), ya que es posible que la persona haya efectuado un paro respiratorio fisiológico, por lo que tampoco respirará aunque hayamos conseguido desplazar el cuerpo extraño. Si se consigue introducir aire el los pulmones, se iniciará el protocolo de Soporte Vital Básico.

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