Variedades meridionales del español


1. El castellano. Orígenes  y revolución.1.1 Las lenguas prerromanas y la romanización

En la Península convivían diferentes lenguas antes de la conquista romana: indoeuropeas y no indoeuropeas. Con la invasión romana comenzó la romanización expandiéndose así la cultura latina. El lenguaje de los conquistadores era en latín vulgar y es de este de donde procede el español. Más tarde llegaron los visigodos, que también hablaban Latín y posteriormente llegaron los musulmanes que no pudieron establecerse en el norte peninsular y del latín de esta zona surge el castellano.

1.2 Del latín a las lenguas romances

El latín acabo fragmentándose y dio lugar a las lenguas románicas (castellano). De su contacto con otras lenguas proceden algunos cambios que se dieron en él, que conocemos como sustrato, superestrato o adstrato.Sustrato:  las lenguas prerromanas influyeron en el latín hablado dejándonos celtismos.Superestrato: debido a los pueblos que nos conquistaron después de los romanos mantenemos germanismos y arabismos.Adstrato: las lenguas vecinas a la nuestra han dejado préstamos en ella también.

1.3 El nacimiento del castellano en la Edad Media

El castellano nació en una zona norte peninsular, ya que en el norte de España los musulmanes no habían ocupado territorios. Este castellano se diferenciaba por la aspiración de la -f- inicial latina o la evolución del sonido -ll- a un sonido -j-.El castellano fue acompañando a los cristianos en su conquista y repoblación de los territorios situados al sur. Durante la Reconquista convivieron cristianos y musulmanes y se adoptaron un gran número



de préstamos árabes en ámbitos como los de la ciencia o la filosofía. En el siglo XI se establecieron fuertes relaciones entre Castilla y Francia, por lo que eso explica los galicismos existentes en nuestra lengua a lo largo de la Edad Media.

1.4 El español en los Siglos de Oro

Con la unión de Castilla y Aragón, el castellano se convirtió en la lengua administrativa de la monarquía. Esto favoreció la progresiva uniformación gráfica, léxica y sintáctica del castellano.

1.5 El español en el siglo XVIII. La labor ilustrada

El interés de los ilustrados por la educación y la ciencia les llevo a preocuparse también por el idioma y se crearon instituciones como la Real Academia Española, que buscaba fijar las grafías y evitar vacilaciones, evitar los excesos lingüísticos y proponer modelos más cercanos a la naturalidad y frenar la incorporación de extranjerismos innecesarios.La labor ilustrada influyó poderosamente en la nivelación del idioma oficial sobre sus variedades dialectales.

2. Características del español actual

El español se ha transformado en los distintos niveles de la lengua, particularmente en el léxico.

2.1 El léxico del español actual

El español ha tomado en este tiempo un considerable número de palabras del inglés y además hemos asistido a la desaparición  de objetos u oficios y a la aparición de otros nuevos. A veces, para escapar de aspectos negativos de la realidad, nos acogemos a eufemismos y sustituimos palabras mal sonantes por otras.También los jóvenes han tratado de diferenciar su manera de hablar de la de los mayores creando numerosas voces y expresiones nuevas2.2 Usos y abusos léxicos



En algunos casos las innovaciones léxicas se consideran criticable, pues han terminado por convertirse en clichés empalagosos que conviene evitar.Algunos cambios obedecen a la simplificación, que lleva a sustituir varios sinónimos por una palabra que recubre el significado de todos. En otros casos, se tiende a una mayor complejidad como cuando se sustituye una palabra habitual por otra supuestamente más prestigiosa o refinada.

2.3 La formación de palabras

Se ha abandonado el sufijo -ero y se han formado sustantivos a partir del sufijo -ista. Hay sufijos que han aumentado considerablemente su fuerza como -al, -alia o -ing.

2.4 La pronunciación y otros aspectos lingüísticos

Los cambios afectan más lentamente a otros niveles lingüísticos, como la pronunciación o la sintaxis. Aunque el yeísmo, empezó hace siglos, se ha generalizado en nuestros días. En la sintaxis, asistimos a la extensión de usos tradicionalmente considerados incorrectos que afectan al régimen de preposiciones, o al empleo galicista de la preposición a en construcciones de palabras. En la pragmática de la lengua destaca pedir perdón cuando uno se choca con alguien.



DIALECTO:

conjunto de hablas definido de manera imprecisa por una serie de peculiaridades lingüísticas que se extienden de manera normalmente irregular en una zona geográfica.

VARIEDADES DIALECTALES DEL CASTELLANO:

son la zona española con Canarias y el español de América. Habría que considerar Andalucía, Canarias y América como una zona dialectal caracterizada por su tendencia en lo fonológico, frente al norte peninsular de tendencia más conservadora. Hay  una franja en el centro de la Península con variedades dialectales intermedias.

CASTELLANO DEL NORTE PENINSULAR:

-Distinta pronunciación de /s/ y /ɵ/. –Pronunciación no aspirada de la /s/ final. Ocupa el área geográfica donde nació el castellano y antiguos reinos de León y Aragón, Galicia, País Vasco y Cataluña. Peculiaridades según las zonas:

Variedad norteña central:

desde Cantabria hacia el sur, por Alcarria y Madrid hasta La Mancha. –Leísmo, -Laísmo, -relajación de la “d” intervocálica, -Pronunciación fuerte de la “d” final.

Variedad oriental o aragonesa

–entonación ascendente y alargamiento de la vocal final. –Tendencia a pronunciar como graves las palabras castellanas esdrújulas. –Empleo del “pues” al final del enunciado como apoyo idiomático. –Uso de pronombres de sujeto como término de preposición. –uso del diminutivo “ico””.

Variedad occidental o leonesa:

en las zonas de mayor contacto con el asturleonés se habla con variantes más acusadas. En Asturias ha influido el “Bable” y se encuentra influencia también en Salamanca o Cáceres. –Tendencia a cerrar las vocales finales –e y –o. –Proposición de pronombres átonos. –Utilización de verbos intransitivos como transitivos. –Apócope de la “e” final en formas verbales. –Uso de la negación “non”. –Diminutivos con –ín, -ino, -ina

El castellano en las zonas bilingües:

el contacto con el catalán, gallego y vasco hace que el castellano adopte una forma peculiar “acento”. Un hablante catalán pronunciará la “d” final como /t/; un hablante gallego se distingue por reducir los grupos consonánticos cultos y un hablante vasco o navarro empleará condicional donde la norma elige imperfecto de subjuntivo.

DIALECTOS MERIDIONALES:

proceden de los cambios desde que el castellano comenzó a expandirse por Al-Ándalus hasta hoy. En s.XVI existe una norma toledana y una sevillana: la segunda se extendió por Canarias y América y la primera sirvió para fijar la normal culta. Hay dos tendencias:

simplificación del sistema consonántico y relajación articulatoria. –Yeísmo, -Seseo, -Aspiración de la –s final, -Neutralización de /l/ y /r/ finales, -Relajación y caída de las consonantes sonoras intervocálicas, -Relajación de los sonidos correspondientes a “ch” y “j”.

Andaluz:

existen “variantes andaluzas” con límites poco precisos. –Alternancia entre seseo y ceceo. –Vocalismo en el andaluz oriental (caída de la –s), -Confluencia del “vosotros y ustedes”, -Léxico conservado.

Canario:

el castellano comparte los rasgos dialectales típicos del sur peninsular. Fue zona de paso hacia y desde el nuevo continente. Muchos rasgos del español caribeño son similares a los rasgos dialectales canarios.

VARIEDADES DE TRANSICIÓN:

en el centro de la Península se unen los dialectos norteños y los meridionales. Hay fenómenos meridionales como el yeísmo, la aspiración de la –s final y la vacilación de /l/ y /r/ finales. En La Mancha se da relajación en la articulación de consonantes pero el habla manchega carece de rasgos propios que sí existen en otras variedades. El extremeño ofrece rasgos meridionales mezclados con otros leoneses. La influencia de la norma sevillana siempre ha sido muy fuerte al sur de la región. El murciano es una variación entre castellano del norte y meridional con influencia aragonesa.



VARIEDAD LINGÜÍSTICA:

conjuntos definidos de rasgos peculiares que caracterizan el uso de una lengua por parte de unos y otros grupos de hablantes, en virtud de distintos factores. Clasificación:

Diacrónicas (determinadas por la evolución histórica de la lengua), Diatópicas (variantes que se derivan del uso de la lengua en distintas zonas geográficas), Diastráticas (vienen dadas por los distintos nieveles culturales, edades… y determinan los sociolectos que son objeto de estudio de la sociolingüística), Diafásicas (variedades funcionales que utiliza un hablante en función de la situación comunicativa y el propósito de la comunicación, determinan diferentes registros.

Los tres primeros tipos de variedades determinan la forma de hablar de un individuo (idiolecto)

.

VARIEDADES SOCIALES O DIASTRÁTICAS:

los factores que determinan la existencia de estas variedades son: raciales, religioso, económicos, generacionales… En los sociolectos del castellano son: -Nivel sociocultural, -Entorno, -Actividades grupales, -Edad.

Nivel sociocultural:

en la infancia adquirimos un conocimiento limitado a través del entorno más inmediato y las relaciones familiares (código restringido)

. Después los estudios académicos, lecturas, relaciones sociales… va aportando a cada hablante un código diferente, más elaborado ligado a la escritura (código elaborado)

El nivel sociolingüístico es el resultado de la mayor o menor formación de la competencia comunicativa del hablante y hay que tener en cuenta que: -El nivel de la lengua de un hablante no depende de su posición económica, -El código elaborado puede estar modificándose y desarrollándose indefinidamente, -El código elaborado no sustituye al restringido sino que se superpone, -El código restringido varía según la clase social y la cultura de cada familia.

Niveles de la lengua

:

Código restringido:

tendencia a la relajación articulatoria de grupos consonánticos, limitación del vocabulario empleado, uso impropio de palabras, oraciones breves y simples, predominio de coordinación y yuxtaposición, dificultades en la construcción sintáctica y desconocimiento de la norma lingüística.

Código elaborado:

pronunciación correcta de fonemas, mayor riqueza y variedad de léxico, precisión y corrección en las designaciones, expresiones sintácticamente más ricas, mayor abundancia de subordinación y variedad de nexos, selección adecuada y correcta estructuración de las construcciones sintácticas, uso ajustado de las normas lingüísticas.

Entorno:

los rurales y urbano llevaron a establecer una serie de diferencias lingüísticas. Actualmente esas diferencias son percibidas como menos importantes. Ha desaparecido uno de los rasgos fundamentales de la lengua rural: el uso específico de términos ligados a labores rurales. En los entornos urbanos la convivencia de grupos humanos de diferente origen da lugar a rasgos lingüísticos peculiares.

Actividades grupales:

ciertos grupos sociales pueden desarrollar una variedad de lengua especial (jerga) que se caracterizan por mantener la base gramatical de la lengua y variar sólo el léxico. A veces la intención es oscurecer el mensaje para los hablantes que no pertenecen al grupo (argot). Suelen evolucionar con mucha rapidez ya que los vocablos acaban por ser conocidos y tienen que mantener su propósito de ocultación.

Edad:

la edad del hablante suele influir porque el habla de los mayores es más conservadora mientras que la de los jóvenes más permeable a las influencias porque la competencia de los más jóvenes está aún en formación. Los grupos juveniles buscan distinguirse a través de la lengua.

VARIEDADES FUNCIONALES O DIAFÁSICAS:

define el uso que el hablante hace del código en un momento determinado. Se denomina registro o estilo de lengua al conjunto de características lingüísticas que permiten al hablante adecuar el uso de la lengua a una determinada situación comunicativa.

Factores fundamentales

: –

Medio o canal empleado (por uso oral o escrito, el lengua oral se caracteriza por la fugacidad del mensaje con utilización de recursos no verbales y menor grado de formalización y la lengua escrita se caracteriza por la perdurabilidad del mensaje pro la diferente situación de emisor y receptor y por mayor grado de formalización). –Atmósfera:

tipo de relación que se establece entre los interlocutores. Diferencia entre situaciones formales e informales que determinan el uso formal (mayor tensión comunicativa con atención a fórmulas de cortesía y convenciones en la expresión y uso informal (mayor relajación tanto en el léxico como en la construcción sintáctica o la pronunciación).

Grados de formalidad

: grado de conocimiento mutuo, espontaneidad o planificación y actitud del hablante.

–Dominio:

situación comunicativa especial ligada a alguna actividad social típica por la que la intervención de los interlocutores aparece siempre regulada (escuela, prensa, familia). A cada uno le corresponden variedades funcionales diferentes (usos específicos)

.

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