Clasificación de Espacios Turísticos y Dinámicas del Régimen Demográfico Antiguo


Clasificación de los Espacios Turísticos

Los espacios turísticos incluyen áreas y puntos turísticos.

  • Las áreas turísticas son espacios amplios que cuentan con una elevada densidad de turistas extranjeros o nacionales.
  • Los puntos turísticos son focos turísticos aislados ligados a atractivos concretos, como las estaciones de esquí, los centros de turismo rural y las ciudades históricas del interior peninsular.

De acuerdo con su uso, todos estos espacios turísticos pueden ser:

  • De temporada: si su estacionalidad es superior a la media.
  • Especialmente turísticos: por contar con estancias prolongadas o bien con visitas puntuales, pero sin notoria estacionalidad, relacionadas con su patrimonio histórico.

Áreas Turísticas de Alta Densidad

  1. Áreas turísticas de sol y playa: Incluyen las Islas Baleares y Canarias y la costa mediterránea peninsular. Todas ellas reciben una importante afluencia turística basada en sus favorables características climáticas y en sus excelentes playas. Presentan diferencias notables en tres aspectos:

    • Accesibilidad: Ha favorecido el temprano desarrollo turístico de las zonas más accesibles a la clientela europea (por carretera o vía aérea). En cambio, ha retrasado la ocupación de las áreas menos accesibles, como las zonas litorales alejadas de la Autovía del Mediterráneo.
    • Modelo de ocupación del espacio: Diferencia las zonas en las que los alojamientos e instalaciones turísticas se integran en los núcleos de población preexistentes (modificándolos o configurando ensanches) y las zonas turísticas nuevas.
    • Tipo de alojamiento: Distingue zonas con predominio de establecimientos hoteleros o extrahoteleros; con modelos extensivos de baja densidad o intensivos en altura; con categoría alta o medio-alta; y con clientela nacional o extranjera.
  2. Madrid: La capital administrativa y financiera de la nación apenas presenta estacionalidad turística y alberga una importante oferta hotelera destinada al turismo cultural y a un creciente turismo de negocios (en torno a ferias, exposiciones, congresos y convenciones).

Áreas de Media y Baja Densidad y Puntos Turísticos

Las áreas turísticas con densidades medias y bajas y los puntos turísticos están relacionados con la difusión del turismo de sol y playa hacia espacios litorales o prelitorales próximos y con el crecimiento de otras modalidades turísticas diferentes de las de sol y playa.

  1. Ciertos tramos del litoral y prelitoral mediterráneo y suratlántico se han incorporado al turismo de sol y playa como resultado de la reestructuración de los espacios litorales tradicionales y de la demanda de espacios menos saturados.

  2. El litoral gallego y cantábrico ofrece áreas costeras e interiores no masificadas y destacados paisajes rurales y naturales.

  3. Los puntos turísticos más destacados son las estaciones de esquí, los centros de turismo rural y las ciudades históricas y artísticas. En estas últimas predominan las estancias cortas de fines de semana y puentes, y las visitas dentro de viajes de ocio.

El Régimen Demográfico Antiguo (Hasta Principios del Siglo XX)

Este régimen se caracteriza por altas tasas de natalidad y mortalidad y por un crecimiento natural bajo.

  1. La Natalidad

    Presentaba valores elevados debido a dos causas principales:

    • El predominio de una economía y una sociedad rurales, en la que los hijos empezaban a trabajar pronto, ayudando en las labores del campo. Eran muy baratos de mantener y aseguraban el porvenir de los padres, dado que no existían seguros de accidentes, enfermedad ni jubilación.
    • La inexistencia de sistemas eficaces para controlar los nacimientos. La única posibilidad era retrasar la edad del matrimonio en las coyunturas económicas de crisis, con el consiguiente acortamiento del periodo fértil de la mujer y el descenso del número de hijos.
  2. La Mortalidad General

    Era alta y oscilante. Sus causas eran el bajo nivel de vida y las precarias condiciones médicas y sanitarias:

    • La dieta alimenticia era escasa por la baja productividad agraria y desequilibrada por falta de proteínas (el pan era el alimento básico y escaseaban la carne, la leche y los huevos). Como consecuencia, la mayoría de la población estaba malnutrida y debilitada.
    • Las enfermedades infecciosas transmitidas a través del aire, el agua y los alimentos tenían alta incidencia. Esto se veía favorecido por el atraso de la medicina, el desconocimiento de las vías de transmisión de las enfermedades y la falta de higiene privada y pública.

    A la elevada mortalidad general se sumaban momentos de mortalidad catastrófica causada por epidemias, guerras y malas cosechas de cereales que provocaban la subida del precio del grano, el hambre y la muerte de quienes no podían pagarlo.

    La mortalidad infantil también era alta (tanto la neonatal por defectos congénitos y problemas en el parto, como la posneonatal por desnutrición e infecciones). La esperanza de vida era baja debido a la elevada mortalidad infantil y materna.

  3. El Crecimiento Natural

    Como consecuencia de las altas tasas de natalidad y de mortalidad, el crecimiento natural era bajo y presentaba oscilaciones debidas a las crisis de sobremortalidad.

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