Desarrollo del Lenguaje Infantil: Etapas Clave y Estrategias de Estimulación


Factores Clave en el Desarrollo del Lenguaje

Factores Internos

  • Capacidad biológica innata.
  • Necesaria la maduración neurológica y perceptiva.
  • Percepción sensorial.
  • Maduración de estructuras cerebrales: Área de Broca, Área de Wernicke.
  • Funciones cognitivas.
  • Maduración de órganos fonadores y articulatorios.

Factores Externos

  • El entorno social.
  • La estimulación verbal.
  • La interacción y las rutinas lúdicas.
  • La comunicación motivadora y afectiva.

Etapas del Desarrollo del Lenguaje Infantil

Etapa Pre-lingüística

1. El Llanto (0-6 meses)

  • Es la primera forma de comunicación del niño.
  • Inicialmente instintivo para expresar necesidades (hambre, frío, malestar…).
  • Asociación muy temprana con la respuesta del adulto, emisión intencionada.
  • Características que aparecen junto al llanto para ayudarnos a interpretarlo:
    • Momento o situación en que se produce.
    • Características del sonido en sí mismo.
    • Movimientos y gestos que lo acompañan.
    • Modo en que se calma el llanto.

2. La Díada Comunicativa y el Lenguaje Maternal

  • Concepto de díada comunicativa: lenguaje comunicativo entre el bebé y la madre.
  • Lenguaje maternal. Características:
    • Ritmo más lento.
    • Oraciones cortas y simples.
    • Número reducido de palabras.
    • Diminutivos y términos cariñosos.
    • Preguntas retóricas y vocalizaciones.
    • Entonación melódica, incluso cantada.
    • Repeticiones.
    • Contacto físico y visual.

3. Vocalizaciones Reflejas y Gorjeos (0-2 meses)

Primeras emisiones sonoras. Son reacciones involuntarias:

  • Primer mes:
    • Emisiones instintivas.
    • Vocalizaciones reflejas y sonrisa refleja.
  • Segundo mes:
    • Comienza la ejercitación articulatoria (gorjeos) y auditiva (capta y emite sonidos).
    • Carácter exploratorio, sin intención comunicativa.

4. Balbuceo o Juego Vocal (3-6 meses)

  • Sonidos guturales y vocálicos.
  • Primeros intentos de controlar los movimientos linguolabiales.
  • Repite con constancia: /ga/, /ge/.
  • Gritos, gruñidos y otras manifestaciones emotivas.
  • Emiten sonidos para:
    • Inicialmente: para escucharse.
    • Progresivamente: protesta o expresión de alegría…
  • El niño empieza a utilizar expresiones faciales (sonrisa, sonidos, etc.) para llamar la atención del adulto.
  • Evolución del comportamiento: interés por personas y objetos.

5. Balbuceo Reduplicativo (6-12 meses)

  • Consiste en la repetición reiterativa de sílabas a distinta velocidad, ritmo y entonación. Ej. mamamama, tatata, bababa
  • Imitación de sonidos.
  • Aumento de emisiones fónicas respecto a la etapa anterior.
  • Aparición del gesto como forma de comunicación (gesto de señalar).

6. Ecolalias (8-12 meses)

  • Repetición involuntaria de palabras o frases, propias o del adulto.
  • Perfeccionamiento del balbuceo: se parece a los sonidos de su lengua.

Etapa Lingüística o Verbal (A partir de los 12 meses)

  • Continúa la actividad fónica exploratoria de la etapa anterior, pero con mayor complejidad en longitud, variedad y cantidad.
  • Aparecen las primeras palabras.
  • Distingue voces familiares.
  • Responde a palabras familiares: muestra un objeto cuando se le pide.
  • Responde a su nombre.
  • Dice adiós con la mano.

1. Primeras Palabras (9-18 meses)

  • Primeras palabras entre 9 y 18 meses, media más habitual 12-14 meses.
  • Jerga ininteligible.
  • A los 13 meses: 3 o 4 palabras diferentes.
  • Comprenden la mayoría de órdenes del adulto.
  • A los 15-18 meses: alrededor de 5 palabras.
  • A nivel fonológico: número limitado de sonidos. Primero vocales, luego consonantes “fáciles”. Articulación simplificada.
  • A nivel semántico: sentido de las palabras relacionado con su realidad cercana.
  • Inventa palabras propias.

2. Etapa Holofrásica (12-18 meses)

  • Una sola emisión equivale a toda una frase adulta: Holofrases.
  • El niño relaciona una secuencia de sonidos con un conjunto de situaciones comunicativas.
  • El niño “simplifica” las emisiones. Ej. /tes/ por tres, o /ame/ por dame.
  • Para entender estas emisiones es imprescindible atender al lenguaje no verbal (especialmente elementos paralingüísticos).

3. Etapa Telegráfica o Lenguaje Combinatorio (18-24 meses)

  • Empiezan a combinar diferentes palabras en un mismo enunciado.
  • Utilizan nombres, verbos y adjetivos (palabras “con significado”).
  • Las primeras combinaciones de dos palabras reflejan:
    • Designación o localización. Ej. coche allá, mamá aquí.
    • Petición. Ej. más papel.
    • Inexistencia. Ej. no chupe.
  • Más adelante reflejarán nociones como:
    • Agente + acción. Ej. papá jugar.
    • Poseedor + poseído. Ej. nene zapato.
    • Objeto + localización: Ej. pelota calle.

4. Primeras Frases y la Edad de las Preguntas (2-3 años)

  • “Explosión léxica”.
  • Comprende más palabras de las que utiliza.
  • Surgen los marcadores gramaticales, como género y número.
  • Hiperregularizaciones de verbos.
  • Estructuras sintácticas más complejas. Incorporan copulativos.
  • La “edad de las preguntas”:
    • 32 meses (2 años y medio): ¿Qué? ¿Dónde?
    • 36 meses (3 años): ¿Quién, cómo, por qué, cuándo, cuánto?

5. Hacia el Habla Adulta (3-6 años)

  • Mayor riqueza sintáctica: combinación de oraciones.
  • El lenguaje se va perfeccionando, tanto en estructura como en vocabulario.
  • Estudiaremos por separado:
    • De 3 a 4 años.
    • De 4 a 5 años.
    • De 5 a 6 años.
De 3 a 4 años
  • El vocabulario del niño pasa a unas 800 palabras.
  • Las frases se hacen más largas y complicadas, con preposiciones y artículos.
  • Continúan las dificultades en la pronunciación de determinados fonemas (material complementario: sílabas trabadas).
  • A los tres años y medio: capaz de contestar dos preguntas seguidas y nombrar todas las imágenes conocidas representadas en una lámina.
  • A los cuatro años ya:
    • Usa las preguntas para mantener la interacción con el otro.
    • Es capaz de conjugar verbos, aún a veces con hiperregularizaciones.
De 4 a 5 años
  • Desaparece el carácter infantil del lenguaje.
  • Pronuncia adecuadamente la mayoría de los fonemas.
  • Utiliza enunciados largos y construye frases con estructuras complejas.
  • El vocabulario es extenso e incorpora todas las categorías gramaticales.
  • Mantiene conversaciones ajustando el lenguaje al contexto y al interlocutor.
  • Es capaz de seguir cuentos complejos y entiende cualquier mensaje verbal.
  • Dificultades en la comprensión de las oraciones pasivas.
De 5 a 6 años
  • Dificultades residuales al pronunciar el fonema /r/.
  • Utiliza todo tipo de frases y conceptos abstractos.
  • Gran habilidad para ajustar el lenguaje a la situación comunicativa y al interlocutor.
  • Utiliza el lenguaje como modo de socialización.

Importancia del Contexto y la Intervención

  • Condiciones idóneas: desde necesidades cubiertas hasta un clima afectivo adecuado.
  • Componente lúdico del contexto comunicativo.
  • Cuándo intervenir en el lenguaje:
    • En todos los momentos y actividades; el lenguaje inunda la vida cotidiana.
    • No olvidar por ello hacer actividades específicas.
  • Atención no solo al lenguaje verbal, recordad lo no verbal.
  • Ser conscientes de que todos los momentos son importantes.
  • Establecer rutinas que faciliten a los niños prever las cosas y estructurar los hábitos relacionados con su vida cotidiana.

El Rol del Educador en la Conversación Infantil

El papel del educador en las conversaciones con los niños abarca diferentes aspectos:

  • Crear un ambiente óptimo, es decir, relajado, espontáneo y divertido. Se debe evitar gritar o repetir órdenes constantemente.
  • Establecer turnos de palabra de manera flexible. Los protagonistas son los niños y el educador ha de orientar sus intervenciones para facilitar la participación de todos.
  • Moderar la duración de la conversación para garantizar el interés de los niños. No debe alargarse más de diez o quince minutos.
  • Realizar retroalimentación correctiva, modificando los mensajes elaborados por los niños. Usar preferentemente preguntas abiertas, dirigidas a todo el grupo.

Las Asambleas como Herramienta de Comunicación

  • Colocación en círculo: todos se ven la cara, todos pueden ser emisor o receptor, y todos están participando.
  • Abordar distintos aspectos: desde recordar los nombres de todos hasta la organización del día.
  • Permitir flexibilidad en los temas, y que los niños puedan traer sus propios centros de interés.
  • La duración de la asamblea será variable, en función de la edad, los temas a tratar y la motivación que ellos despierten. En todo caso, recuerda ajustar la duración para no perder la atención.
  • Se debe configurar la asamblea como rutina o hábito permanente.

Técnicas de Estimulación del Lenguaje

Para realizar correcciones indirectas (las directas pueden ser aversivas). Es importante recordar que el niño debe atender a nuestros modelos y repetirlos, pero no hay que forzarlo a hacerlo.

  • La Expansión: El niño verbaliza y el adulto repite (asintiendo) el enunciado del niño, ampliándolo.
    • Niño: “Coche roto”.
    • Adulto: “Sí, el coche se ha roto”.
  • Corrección Indirecta: El adulto devuelve al niño la corrección de forma sutil, sin señalar el error directamente.
    • Petición de Aclaración: A través de una pregunta o comentario, mostramos al niño que no le hemos entendido. Ej. “No he entendido bien, ¿qué…?” o retomando sus palabras en forma de pregunta.
      • Niño: “Oto aso”.
      • Adulto: “¿Aso?”.
      • Niño: “Vaso”.
    • Preguntas Indirectas: Se trata de preguntar para que el niño, al responder, dé la respuesta correcta, corrigiéndose a sí mismo.
      • Niño: “Aso oto”.
      • Adulto: “¿El vaso está roto o oto?”.
      • Niño: “Roto”.
  • Preguntas Directas: ¿Qué es esto? ¿Qué hace? Al realizar las preguntas directas es aconsejable no mostrarnos directivos, sino interesados en que el niño nos diga algo que nosotros desconocemos.
  • Imitación: Jugando a las marionetas o viendo un cuento. Le animamos a que nos ayude. Ej. Adulto: “¡Lobo, no me comas!”, “Ayúdame”, “Dile al lobo”.
  • Verbalización en Voz Alta: Sobre lo que el adulto está haciendo, ofreciendo al niño un modelo de lenguaje sencillo, sin pedir respuesta. Únicamente capta su atención y le ofrece el modelo. Ej. “La mesa se ha roto”, “Yo me voy a dormir”, “Estoy pintando una casa grande”.
  • Habla Paralela: Cuando el niño esté realizando una acción, el adulto habla sobre lo que este hace, acompaña las acciones del niño con verbalizaciones claras y sencillas. Ej. El niño está jugando con un muñeco y se ha caído: “¡Este niño se ha caído y no puede levantarse!”.

Es importante usar estas técnicas solo si sabemos que el niño puede esforzarse, repetirlo y corregir.

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