Glosario de Elementos Arquitectónicos
- Bóveda de cañón: Cubierta continua en forma de medio cilindro.
- Bóveda de arista: Intersección de dos bóvedas de cañón en ángulo recto.
- Cimborrio: Torre sobre el crucero de una iglesia.
- Canecillos: Pequeñas ménsulas decoradas que sostienen los aleros del tejado.
- Arquivoltas: Conjunto de arcos concéntricos en las portadas románicas y góticas.
- Pantocrátor: Representación de Cristo como juez supremo, típico del arte románico.
- Deambulatorio: Pasillo semicircular que rodea el altar mayor en las iglesias.
- Parteluz: Columna que divide en dos un vano, especialmente en portadas y rosetones.
- Arco apuntado: Arco con forma de punta, característico del estilo gótico.
- Bóveda de crucería: Bóveda gótica con nervios entrecruzados que refuerzan la estructura.
- Arbotantes: Estructuras exteriores que transmiten el peso de la bóveda a los contrafuertes.
- Pináculos: Elementos decorativos verticales en forma de aguja en la arquitectura gótica.
- Tracerías: Decoración geométrica calada en ventanas y rosetones góticos.
- Retablos: Estructuras decoradas con imágenes religiosas situadas detrás del altar.
Obras Maestras de la Historia del Arte
El Descendimiento de la Cruz de Rogier van der Weyden
El Artista y su Época
El Descendimiento de la Cruz es la obra maestra de Rogier van der Weyden, una de las pocas atribuidas con certeza al pintor flamenco. Nacido en Tournai (actual Bélgica), se formó en el taller de Robert Campin y recibió influencias de Jan van Eyck. De ellos aprendió la técnica de la pintura al óleo, que permitía una minuciosa representación de los detalles. Aunque viajó a Italia en 1450, su estilo permaneció más cercano a la tradición flamenca que a la italiana. Desde 1435 se estableció en Bruselas, donde fue nombrado pintor oficial. Produjo numerosos polípticos y dípticos, entre los cuales se encuentra esta obra, encargada por el gremio de ballesteros de Lovaina para su capilla en la iglesia de Nuestra Señora Extramuros. En honor a sus patronos, el artista incorporó pequeñas ballestas en los ángulos superiores del cuadro.
Contenido
La pintura representa un episodio del Evangelio de San Juan: el descenso del cuerpo de Cristo tras la crucifixión. José de Arimatea y Nicodemo sostienen el cadáver con la ayuda de un ángel, mientras la Virgen María, al presenciar la escena, se desmaya y es auxiliada por San Juan. También están presentes María Magdalena y otros personajes, todos expresando un profundo dolor.
Análisis
Esta obra es la tabla central y única conservada de un tríptico. Van der Weyden dispone a diez figuras en un espacio comprimido sobre un fondo dorado, logrando una composición equilibrada sin sensación de amontonamiento. San Juan y María Magdalena enmarcan la escena, cerrando la composición como si fueran un paréntesis visual. Uno de los recursos más impactantes es el paralelismo entre Cristo y la Virgen María: el cuerpo inerte de Jesús y la figura de María desmayada siguen una línea de movimiento similar, enfatizando su conexión. En primer plano, una calavera simboliza la muerte reciente. El fondo dorado y la solidez de las figuras dan a la obra un aspecto escultórico, como si fuera un relieve. La luz incide principalmente sobre el cuerpo de Cristo, atrayendo la mirada del espectador. El dramatismo es una de las características más destacadas de la obra: la expresión de tristeza en cada personaje y la disposición de sus cuerpos transmiten un dolor intenso. Van der Weyden consigue con maestría no solo representar un evento religioso, sino también evocar una profunda emoción en el espectador.
Catedral de Notre-Dame de París
El Artista y su Época
Notre-Dame de París es una de las catedrales más icónicas del mundo y pertenece a los primeros momentos del gótico. Esta época se caracteriza por el crecimiento de las ciudades, el auge del comercio y la aparición de la burguesía. En los núcleos urbanos, la figura del obispo cobra gran importancia y su máxima expresión artística es la catedral. A medida que las ciudades se consolidan, las escuelas catedralicias reemplazan progresivamente a la enseñanza monástica, sentando las bases de las primeras universidades. Se debate si la primera piedra fue colocada por el obispo Maurice de Sully o por el propio papa Alejandro III, pero lo cierto es que la construcción se prolongó incluso después de su consagración en 1245. Durante este período, Francia está gobernada por los reyes Capetos, destacando Felipe Augusto, quien expandió el reino e hizo de París su capital.
Función
Como muchas otras catedrales, Notre-Dame se edificó sobre un lugar de culto anterior. En la Île de la Cité, los primeros habitantes de la ciudad celebraban ritos celtas en el siglo III a.C. Posteriormente, se construyó un templo a Júpiter durante la ocupación romana, seguido por la iglesia de Saint-Étienne en el siglo VI y una posterior catedral románica. Con la llegada del gótico, las catedrales se convierten en los edificios más importantes de las ciudades, reflejando su poder cultural y económico. El obispo Maurice de Sully fue el principal impulsor de Notre-Dame, siguiendo el ejemplo del abad Suger en la basílica de Saint-Denis.
Análisis
Notre-Dame presenta una planta de cinco naves, con la central más ancha y un transepto poco pronunciado. La cabecera cuenta con un ábside rodeado por un doble deambulatorio, lo que permite una circulación fluida en el interior. En el alzado, destacan sus dos imponentes torres en la fachada occidental, que siguen el esquema en H, característico del gótico francés.
La fachada está dividida verticalmente en tres calles por contrafuertes y cuenta con:
- Triple pórtico con arcos abocinados esculpidos.
- Galería de los reyes con esculturas de monarcas.
- Rosetón central, flanqueado por arcos geminados.
- Cornisa superior con las famosas gárgolas.
Las fachadas norte y sur también poseen portadas con gabletes y rosetones, mientras que el conjunto exterior está reforzado por contrafuertes y arbotantes, otorgándole un aspecto ligero y equilibrado.
En el interior, la nave central presenta tres niveles:
- Arquerías apuntadas sobre pilares circulares.
- Galería de arcos triples, que en la zona del coro se transforman en geminados.
- Vidrieras superiores, que filtran la luz y generan el efecto característico del gótico.
Notre-Dame de París es, por tanto, un ejemplo clave del gótico temprano, combinando avances estructurales, riqueza escultórica y un uso innovador de la luz.