El régimen franquista se caracterizó por ser una auténtica dictadura. Diversos pensamientos ideológicos intervinieron en su formación y consolidación:
- Falangismo: Se utilizó la estructura del partido unificado, creando secciones para la educación política de jóvenes y mujeres.
- Catolicismo: Se aceptó la adulación de los obispos, permitiendo que la Iglesia impusiera sus criterios en numerosos aspectos de la vida política, social y cultural de España.
- Militarismo: La vinculación con el ejército confirió al régimen un carácter autoritario.
- Nacionalismo centralista: Todos los franquistas defendían un estado centralista inflexible. España fue definida como «unidad de destino en lo universal».
- Nacionalsindicalismo: Esta idea promovía la creación de un estado corporativo donde obreros y empresarios se integraran en las mismas organizaciones.
Todo esto conformó un sistema denominado democracia orgánica, donde la representación recaía en las unidades orgánicas de la sociedad.
Apoyos Principales del Franquismo
- La Iglesia Católica: Brindó apoyo desde el principio al golpe de estado, recibiendo a cambio dinero, poder e influencia.
- El Ejército: Se erigió como una pieza clave del régimen.
- Terratenientes, grandes empresarios, pequeñas burguesías provincianas y el campesinado católico: Apoyaron el nuevo régimen político con notable interés.
A partir de los años sesenta, la base social del franquismo se amplió:
- Clases medias: Aceptaron las restricciones políticas a cambio de bienestar económico.
- Obreros «apoliticos»: Mejoraron su situación al ser contratados en las nuevas industrias.
- Pequeñas burguesías: Se beneficiaron del proteccionismo oficial de la industria en Cataluña y el País Vasco.
Leyes Fundamentales del Régimen
A partir de estas bases ideológicas y sociales, se promulgaron una serie de Leyes Fundamentales:
- Fuero del Trabajo (1938): Estableció los fundamentos económicos del nuevo estado, promoviendo una economía capitalista y un sindicato único y obligatorio.
- Ley Constitutiva de las Cortes (1942): Establecía unas Cortes con miembros designados de oficio (la mayoría) y algunos directamente por Franco.
- Fuero de los Españoles (1945): Una especie de declaración de derechos que podían ser suspendidos por el Gobierno.
- Ley de Referéndum Nacional (1945): Solo contemplaba la posibilidad de convocar referendos, siempre por decisión de Franco.
- Ley de Sucesión de la Jefatura del Estado (1947): Franco quedaba como jefe vitalicio y se le reconocía el derecho a nombrar sucesor.
- Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958): Sirvió para consolidar la posición de Falange como partido único.
- Ley Orgánica del Estado (1967): Intentó adaptarse, suavizando formalmente algunos de los planteamientos más totalitarios.
Evolución del Régimen Franquista
1. Los Años Cuarenta
La mayoría de los españoles vivió esta década como un período terrible. Pocos meses después de finalizar la Guerra Civil, estalló la Segunda Guerra Mundial. España se declaró neutral; Franco exigió a Hitler y Mussolini condiciones para entrar en guerra que no quisieron conceder. La participación se limitó al envío de un ejército voluntario, la División Azul. España no fue admitida en la ONU, y los aliados declararon que el régimen debía ser sustituido por uno democrático. La actividad de la oposición crecía y la lucha de guerrilla se extendía.
En cuanto a la economía, la Guerra Civil tuvo consecuencias muy negativas. Uno de los objetivos fue conseguir la autosuficiencia económica (autarquía), con dos ejes de actuación: la reglamentación de las exportaciones e importaciones y el fomento de la industria. El Estado controlaba directamente el mercado con precios fijados, lo que provocó un considerable aumento del mercado negro.
2. Los Años Cincuenta
La alianza entre los países occidentales y la Unión Soviética se convirtió en un conflicto conocido como la Guerra Fría. Los principales apoyos para que España fuera reconocida en el exterior vinieron de Estados Unidos y del Vaticano. Franco aceptó la «amistad» con EE. UU. por supervivencia, concediéndole permiso para instalar bases militares a cambio de alimentos para equilibrar el mercado interior. Con el Vaticano a favor de las buenas relaciones, se firmó un Concordato. Se evidenció que la autarquía era insostenible; se liberalizaron los precios y se estableció un Plan de Estabilización que hizo aumentar los ingresos, pero como consecuencia, se incrementó la emigración.
3. Los Años Sesenta
El gran objetivo de esta década fue incrementar la renta nacional. Tres Planes de Desarrollo impulsaron a España a tener una de las tasas de crecimiento más altas, aumentando las importaciones y las inversiones extranjeras. Los mayores beneficiarios fueron la banca y los grandes grupos industriales.
4. Los Últimos Años del Franquismo
Franco hizo que las Cortes nombraran a Juan Carlos de Borbón su sucesor. En julio de 1969, estalló el caso Matesa, que se había beneficiado de créditos y subvenciones del Estado de manera fraudulenta. La reacción de Franco fue formar un nuevo gobierno. El régimen se debatía entre quienes creían necesaria la evolución hacia formas más liberales y los inmovilistas. Luis Carrero Blanco, mano derecha del «caudillo», tomó las riendas y defendió las esencias del régimen. Fue asesinado en Madrid. Carlos Arias Navarro le sustituyó. En la madrugada del 20 de noviembre de 1975, Franco moría en la Clínica de la Paz de Madrid. Una etapa larga y penosa de la Historia de España concluía.