Contexto y Fundamentos del Realismo Literario
Realismo: centró su atención en la sociedad para representarla de la manera más exacta y fomentar en el hombre español una conciencia histórica y social de su realidad. El conflicto de la sociedad era la desigualdad. Ideologías: estuvo dominada por una fuerte ideología en torno al materialismo. Esto motivó una visión materialista de la vida que chocó con las realidades sociales de la época. Positivismo: influyó decisivamente en el pensamiento de la época y fue expresado en el realismo como una forma de manifestar la realidad de la manera más objetiva. Burguesía: clase social cuyo principio se centró en el comercio y la acumulación de riquezas. Arte: las desigualdades sociales y las figuras representativas del mercantilismo, como el burgués y la industria, fueron el centro. Literatura realista: el género que predominó fue el narrativo porque ahí se crearon novelas y cuentos. El teatro tuvo un desarrollo breve y de escasa importancia. Los temas que resaltaron estaban relacionados con los cambios sociales en distintos niveles. Narrativa: inicia en 1868 con la obra de Benito Pérez Galdós. Describió su entorno y reflejó distintas disputas ideológicas que generaron cambios en la sociedad española. Principales preocupaciones: expresó un conflicto ideológico entre los tradicionalistas y los reformistas desde dos posturas: la añoranza de una sociedad agraria y tradicional, y, por otro lado, la defensa de las ideas de modernización.
La Novela y el Teatro en el Siglo XIX
Tipologías de la Novela
- Novela social: se quiso mostrar la realidad social española e invitar al lector a asumir su posición crítica sobre su entorno.
- Novela de tesis: fue una excusa para celebrar una ideología o para defender postulados de tendencia conservadora o progresista.
- Novela de corte espiritual: sufre un proceso inverso, y la postura ideológica cede terreno a concepciones de carácter interior, psicológico, individual y espiritual (León Tolstói, Fiódor Dostoyevski).
Medios de Difusión
- La prensa: la novela se publicaba por partes en los diarios. Esto permitió que tuviera más popularidad, ya que los lectores de diarios eran muchos.
- La novela por entregas: consistió en publicar periódicamente partes de una novela; así se creaba una atmósfera de intriga y emoción que se mantenía hasta el final.
Temas y Recursos Narrativos
Temas: los aspectos rurales, el mundo aristocrático, la vida provinciana, el anticlericalismo, las tensiones políticas y sociales, y los sucesos históricos próximos al tiempo del autor. Recursos: las descripciones detalladas de lugares, personajes y objetos, que sirvieron para crear una atmósfera más creíble; los diálogos entre personajes; y el narrador omnisciente, que puede intervenir para moralizar.
El Teatro y la Alta Comedia
Teatro: también conocido como la alta comedia, se desarrolló entre 1855 y 1880; se habló de la preocupación moral, el conflicto de ideas y la estimación de los valores de la sociedad. La alta comedia: se centró en señalar las realidades en búsqueda de una sociedad ideal; en consecuencia, los personajes expusieron hondas psicologías y comportamientos humanos que representaron su entorno. Temas: la cotidianidad y la realidad circundante, el conflicto de ideas y valores sociales, y el comportamiento humano. Recursos: descripciones detalladas del entorno, análisis psicológico de los personajes, reflexiones morales y un tono sencillo y directo, libre de retoricismos.
Desarrollo de la Conciencia Social y Literaria
Realismo: centró su atención en la sociedad para representarla de la manera más exacta y fomentar en el hombre español una conciencia histórica y social de su realidad. El conflicto de la sociedad era la desigualdad. Ideologías: estuvo dominada por una fuerte ideología en torno al materialismo. Esto motivó una visión materialista de la vida que chocó con las realidades sociales de la época. Positivismo: influyó decisivamente en el pensamiento de la época y fue expresado en el realismo como una forma de expresar la realidad de la manera más objetiva. Burguesía: clase social cuyo principio se centró en el comercio y la acumulación de riquezas. Arte: las desigualdades sociales y las figuras representativas del mercantilismo, como el burgués y la industria, fueron el centro. Literatura realista: el género que predominó fue el narrativo porque ahí se crearon novelas y cuentos. El teatro tuvo un desarrollo breve y de escasa importancia. Los temas que resaltaron estaban relacionados con los cambios sociales en distintos niveles. Narrativa: inicia en 1868 con la obra de Benito Pérez Galdós. Describió su entorno y reflejó distintas disputas ideológicas que generaron cambios en la sociedad española. Principales preocupaciones: expresó un conflicto ideológico entre los tradicionalistas y los reformistas desde dos posturas: la añoranza de una sociedad agraria y tradicional, y por otro lado la defensa de las ideas de modernización.
Formatos Narrativos y Escénicos
NOVELAS: Novela social: se quiso mostrar la realidad social española e invitar al lector a asumir su posición crítica sobre su entorno. Novela de tesis: fue una excusa para celebrar una ideología o para defender postulados de tendencia conservadora o progresista. Novela de corte espiritual: sufre un proceso inverso, y la postura ideológica cede terreno a concepciones de carácter interior, psicológico, individual y espiritual (León Tolstói, Fiódor Dostoyevski). MEDIOS DE DIFUSIÓN: La prensa: la novela se publicaba por partes en los diarios. Esto permitió que tuviera más popularidad ya que los lectores de diarios eran muchos. La novela por entregas: consistió en publicar periódicamente partes de una novela, así se creaba una atmósfera de intriga y emoción que se mantenía hasta el final. Temas: los aspectos rurales, el mundo aristocrático, la vida provinciana, el anticlericalismo, las tensiones políticas y sociales, y los sucesos históricos próximos al tiempo del autor. Recursos: las descripciones detalladas de lugares, personajes y objetos, que sirvieron para crear una atmósfera más creíble; los diálogos entre personajes; y el narrador omnisciente que puede intervenir para moralizar. Teatro: también conocido como la alta comedia, se desarrolló entre 1855 y 1880; se habló de la preocupación moral, el conflicto de ideas y la estimación de los valores de la sociedad. La alta comedia: se centró en señalar las realidades en búsqueda de una sociedad ideal; en consecuencia, los personajes expusieron hondas psicologías y comportamientos humanos que representaron su entorno. Temas: la cotidianidad y la realidad circundante, el conflicto de ideas y valores sociales, y el comportamiento humano. Recursos: descripciones detalladas del entorno, análisis psicológico de los personajes, reflexiones morales y un tono sencillo y directo, libre de retoricismos.
Impacto de la Burguesía y el Positivismo
Realismo: centró su atención en la sociedad para representarla de la manera más exacta y fomentar en el hombre español una conciencia histórica y social de su realidad. El conflicto de la sociedad era la desigualdad. Ideologías: estuvo dominada por una fuerte ideología en torno al materialismo. Esto motivó una visión materialista de la vida que chocó con las realidades sociales de la época. Positivismo: influyó decisivamente en el pensamiento de la época y fue expresado en el realismo como una forma de expresar la realidad de la manera más objetiva. Burguesía: clase social cuyo principio se centró en el comercio y la acumulación de riquezas. Arte: las desigualdades sociales y las figuras representativas del mercantilismo, como el burgués y la industria, fueron el centro. Literatura realista: el género que predominó fue el narrativo porque ahí se crearon novelas y cuentos. El teatro tuvo un desarrollo breve y de escasa importancia. Los temas que resaltaron estaban relacionados con los cambios sociales en distintos niveles. Narrativa: inicia en 1868 con la obra de Benito Pérez Galdós. Describió su entorno y reflejó distintas disputas ideológicas que generaron cambios en la sociedad española. Principales preocupaciones: expresó un conflicto ideológico entre los tradicionalistas y los reformistas desde dos posturas: la añoranza de una sociedad agraria y tradicional, y por otro lado la defensa de las ideas de modernización.
Estructura de la Ficción Realista
NOVELAS: Novela social: se quiso mostrar la realidad social española e invitar al lector a asumir su posición crítica sobre su entorno. Novela de tesis: fue una excusa para celebrar una ideología o para defender postulados de tendencia conservadora o progresista. Novela de corte espiritual: sufre un proceso inverso, y la postura ideológica cede terreno a concepciones de carácter interior, psicológico, individual y espiritual (León Tolstói, Fiódor Dostoyevski). MEDIOS DE DIFUSIÓN: La prensa: la novela se publicaba por partes en los diarios. Esto permitió que tuviera más popularidad ya que los lectores de diarios eran muchos. La novela por entregas: consistió en publicar periódicamente partes de una novela, así se creaba una atmósfera de intriga y emoción que se mantenía hasta el final. Temas: los aspectos rurales, el mundo aristocrático, la vida provinciana, el anticlericalismo, las tensiones políticas y sociales, y los sucesos históricos próximos al tiempo del autor. Recursos: las descripciones detalladas de lugares, personajes y objetos, que sirvieron para crear una atmósfera más creíble; los diálogos entre personajes; y el narrador omnisciente que puede intervenir para moralizar. Teatro: también conocido como la alta comedia, se desarrolló entre 1855 y 1880; se habló de la preocupación moral, el conflicto de ideas y la estimación de los valores de la sociedad. La alta comedia: se centró en señalar las realidades en búsqueda de una sociedad ideal; en consecuencia, los personajes expusieron hondas psicologías y comportamientos humanos que representaron su entorno. Temas: la cotidianidad y la realidad circundante, el conflicto de ideas y valores sociales, y el comportamiento humano. Recursos: descripciones detalladas del entorno, análisis psicológico de los personajes, reflexiones morales y un tono sencillo y directo, libre de retoricismos.