Nutrición por Etapas de Vida: Adolescencia, Infancia y Edad Avanzada


Nutrición Esencial en la Adolescencia

La adolescencia es una etapa de rápido crecimiento y desarrollo, lo que implica necesidades nutricionales específicas para asegurar una salud óptima.

Requerimientos Nutricionales Clave en la Adolescencia

Energía

Los aportes calóricos deben cubrir los gastos energéticos del organismo, que incluyen:

  • Gasto Energético en Reposo (GER): Energía necesaria para las funciones vitales básicas.
  • Actividad Física: Energía consumida durante el ejercicio y el movimiento diario.
  • Velocidad de Crecimiento: Energía requerida para el desarrollo y la maduración corporal.

Un aporte excesivo de energía se acumula en el tejido adiposo en forma de grasa, lo que puede provocar obesidad. Por el contrario, un déficit energético conlleva retraso en el crecimiento y la maduración corporal.

Glúcidos (Hidratos de Carbono)

Son esenciales para cubrir las necesidades energéticas del adolescente, siendo la principal fuente de combustible para el cuerpo y el cerebro.

Proteínas

Fundamentales para hacer frente al crecimiento y al desarrollo muscular, especialmente en los chicos. El consumo de proteínas debe suponer aproximadamente un 12-15% de las calorías totales, con un aporte equilibrado entre las proteínas de origen animal y vegetal (aproximadamente 50% de cada una). Las ingestas recomendadas de proteínas en niños y niñas hasta aproximadamente los 9-13 años son iguales: 34 gramos por día.

Grasas

Las grasas deben representar el 30-35% de la energía total. Se recomienda no sobrepasar el 7-8% en forma de grasas saturadas y un 5-6% de poliinsaturadas, siendo aconsejable una ingesta de grasas monoinsaturadas del 15 al 20%. Es crucial recordar que un aporte adecuado de grasas asegura la cobertura de las necesidades de ácidos grasos esenciales y vitaminas liposolubles. Se aconseja el consumo de grasas de origen vegetal.

Fibra Dietética

Es importante mantener una buena ingesta de fibra (30-35 g/día) a partir de cereales integrales, verduras, hortalizas, frutas y legumbres. La fibra contribuye a la salud digestiva y a la prevención de enfermedades crónicas.

Vitaminas

Durante la adolescencia, los requerimientos de vitaminas aumentan debido al rápido crecimiento y desarrollo:

  • Vitaminas del Complejo B (B1, B2, B3): Experimentan un incremento, ya que intervienen en el metabolismo intermediario de los hidratos de carbono.
  • Vitaminas B6, B12 y Ácido Fólico: Sus necesidades están aumentadas porque son esenciales para la síntesis normal de ácidos nucleicos y para el metabolismo proteico.
  • Vitamina D y Calcio: El rápido crecimiento óseo exige cantidades elevadas de estas, fundamentales para la mineralización ósea.
  • Vitaminas C, A y E: Es necesaria una mayor cantidad para mantener la normalidad estructural y funcional de las nuevas células.

La vitamina C y el ácido fólico son las más problemáticas en cuanto a su ingesta adecuada. La expresión “5 al día” sintetiza el número de raciones de frutas y verduras que se recomienda consumir diariamente.

Minerales

  • Calcio: Durante el crecimiento puberal se intensifica especialmente el proceso de calcificación, lo que justifica la ingesta recomendada de 1300 mg/día.
  • Hierro: El aumento en la ingesta de hierro se debe a:
    • Mayor cantidad de hemoglobina provocada por la expansión del volumen de sangre.
    • Mayor cantidad de mioglobina originada por el aumento de la masa muscular.
    • Aumento de los citocromos que acompañan al incremento del ritmo de crecimiento.

    A esto se añade, en las mujeres, la instauración de la menstruación, que incrementa aún más las necesidades de hierro.

  • Zinc, Yodo, Selenio: Otros oligoelementos importantes para el desarrollo y las funciones metabólicas.

Agua

Las necesidades de agua se estiman en 1-1,5 ml/Kcal metabolizada, siendo fundamental para todas las funciones corporales.

Recomendaciones Dietéticas para Adolescentes

La dieta de un adolescente debe ser:

  • Abundante en cereales integrales, verduras y frutas.
  • Baja en grasa total, grasa saturada y sal.
  • Suministrar calcio, hierro y otros oligoelementos y vitaminas en las cantidades necesarias para satisfacer los requerimientos de un organismo en crecimiento.

A continuación, se detallan las raciones recomendadas por grupo de alimentos:

  • Cereales, Pan y Pasta: Un adolescente debe consumir de 4 a 6 raciones de este grupo al día.
  • Frutas: Se recomienda consumir 3 o más raciones al día.
  • Verduras y Hortalizas: Se aconseja un consumo mínimo de 300 g diarios (2 raciones), aunque lo deseable sería consumir alrededor de 400 g por día, priorizando las variedades de temporada.
  • Lácteos (Leche, Yogur, Queso): Un adolescente debe consumir de 2 a 4 raciones diarias.
  • Carnes: Es asumible el consumo de 3 raciones semanales.
  • Pescado: Es conveniente el consumo de 3 a 4 raciones semanales.
  • Huevos: El consumo de 3 a 5 huevos a la semana, o incluso más, es adecuado.
  • Legumbres: Se recomienda consumir al menos de 2 a 4 raciones semanales.

Nutrición en la Primera Infancia y Lactancia

La alimentación durante los primeros años de vida es crucial para el crecimiento, desarrollo y establecimiento de hábitos saludables.

Primeros 6 Meses de Vida: La Lactancia Materna

La leche materna asegura un óptimo crecimiento y desarrollo del niño, además de proporcionar múltiples ventajas frente a otras formas de alimentación. En el transcurso del período de lactancia se producen 3 tipos de leche:

  • Calostro: La primera leche, rica en anticuerpos y nutrientes esenciales para el recién nacido.
  • Leche de Transición: Del día 7 al 15, la leche es más acuosa y contiene más grasa, lactosa, vitaminas hidrosolubles y liposolubles, y calorías que el calostro, mientras disminuyen las inmunoglobulinas.
  • Leche Definitiva o Madura: Después de las primeras 2 semanas tras el parto. Es más rica en grasa y lactosa que las anteriores, y tiene un contenido energético mayor.

Composición Nutricional de la Leche Materna

  • Glúcidos: En la leche de la mujer, el 90% de los carbohidratos son lactosa, que favorece la absorción del calcio y también el crecimiento del Lactobacillus bifidus y el resto de la flora bacilar intestinal. El 10% restante son oligosacáridos.
  • Lípidos: Son la principal fuente de energía de la leche materna (aproximadamente 50%) y constituyen el vehículo de las vitaminas liposolubles y el ácido linoleico.
  • Proteínas: Incluyen caseína, alfa-lactoalbúmina y lactoferrina, entre otras, con funciones nutricionales e inmunológicas.
  • Vitaminas y Minerales:
    • En ocasiones, es necesario suplementar la dieta del lactante con Vitamina D.
    • La Vitamina K se encuentra en concentración escasa en la leche materna.
    • La leche materna cuenta con suficiente Vitamina A y C.
    • La leche de mujer tiene 3 veces menos sodio que la de vaca, lo cual es fisiológicamente importante ya que el riñón del lactante es incapaz de eliminar una dosis alta de sodio.
    • La leche materna tiene menos hierro y calcio que la de vaca, pero la absorción de estos minerales es significativamente mayor.

Alimentación Complementaria a partir de los 6 Meses

A partir de los 6 meses, el niño puede hacer 4 o 5 tomas distribuidas de la siguiente forma:

  • Desayuno: Leche materna o fórmula adaptada y cereales (200-250 ml/toma).
  • Comida: Puré de verduras y carne.
  • Merienda: Puré de frutas y leche materna o fórmula adaptada si es necesario.
  • Cena: Leche materna o fórmula adaptada y cereales. Algunos días a la semana se le puede ofrecer un puré ligero de carne y verdura.
  • Quinta Toma (opcional): Sobre las 23 h se puede dar una toma de leche materna o fórmula adaptada, sobre todo en los niños más pequeños para evitar que pasen demasiado tiempo sin recibir alimento.

El agua es indispensable a partir de los 6 meses.

Introducción de Nuevos Alimentos

  • 9-10 Meses: Se introduce el pescado cocido (fresco o congelado) añadido al puré de verduras. Se inicia con pescado blanco, que tiene menos grasa, alternándolo con la carne (pollo, vaca, ternera, cordero). Puede ofrecerse yogur natural elaborado con leche de fórmula adaptada. A partir de los nueve meses se introducirá el huevo, comenzando por la yema, en cantidades crecientes y siempre cocido.
  • 12 Meses: Se puede administrar el huevo entero y las legumbres trituradas. Es importante incorporar al niño a la mesa familiar.

Alimentación de los Niños de 12 a 24 Meses

Es bueno mantener la leche materna o fórmula adaptada de continuación hasta los 2 años. Es recomendable ampliar al máximo la gama de alimentos, de manera que a los 2 años el niño pueda comer casi lo mismo que los adultos, adaptando la textura y el tamaño de las porciones.

Distribución de Macronutrientes por Edad

La proporción de macronutrientes en la dieta varía según la etapa de desarrollo:

  • Primeros 6 Meses de Vida: Las proteínas de la dieta deberán aportar el 15% de la energía, los hidratos de carbono entre el 35% y las grasas entre el 50% de las calorías totales de la dieta.
  • Resto de las Edades (a partir de los 6 meses): Las proteínas deberán aportar el 15% de la energía, los hidratos de carbono entre el 50% y las grasas entre el 35% (en chicos mayores se puede aumentar los hidratos de carbono al 55% y reducir las grasas al 30%).

Nutrición y Valoración en la Edad Avanzada

La nutrición en la edad avanzada y la valoración geriátrica integral son fundamentales para mantener la calidad de vida y prevenir enfermedades.

Recomendaciones Alimentarias para Mujeres en la Menopausia

Las ingestas recomendadas de energía para las mujeres españolas entre 40-50 años con una actividad física moderada se han establecido en unas 2200 kcal. Es conveniente distribuir la alimentación total diaria en 4 o 5 comidas ligeras.

  • Los alimentos ricos en hidratos de carbono complejos (cereales integrales, arroz, pasta, pan integral, patatas) deben constituir la base de la alimentación.
  • Las frutas y las verduras (3-5 raciones diarias) deben consumirse diariamente, ya que aportan cantidades apreciables de vitaminas, minerales y fibra, lo que contribuye a mantener un buen estado nutricional.
  • Reducir el consumo de grasa saturada.
  • Potenciar el consumo semanal de pescado azul, rico en ácidos grasos poliinsaturados omega-3.
  • El calcio juega un papel fundamental en la prevención de la osteoporosis postmenopáusica.
  • La vitamina D, abundante en los pescados grasos, en los lácteos enteros y en el huevo, es imprescindible para fijar el calcio en los huesos.
  • Mantener una correcta hidratación.

Raciones recomendadas para adultos mayores (o en menopausia):

  • Legumbres: 2-3 raciones semanales.
  • Productos Lácteos: 3-4 raciones diarias.
  • Carnes, Pescados, Huevos: 2-3 raciones diarias (alternando).

Valoración Geriátrica Integral (VGI)

El concepto de salud es más difícil de perfilar con claridad en las personas mayores. Por lo tanto, para saber si un anciano está sano, debemos valorar estos cuatro aspectos clave de la VGI:

  • Multidimensional: Porque se valoran todos los componentes de la salud del anciano, tanto el área médica como la situación funcional física y social.
  • Interdisciplinaria: Porque la valoración del anciano debe ser realizada por distintos profesionales sanitarios: básicamente médico, enfermera, terapeuta físico y trabajador social.
  • Valoración Funcional: Debe registrarse no solo la situación en la que se encuentra el paciente en el momento de la entrevista, sino también la evolución hasta llegar a esta situación.

Fórmula de Peso Corregido

Para ciertas valoraciones nutricionales, se puede utilizar la siguiente fórmula de peso corregido:

Peso corregido (Kg) = (Peso real – Peso ideal) X 0,25 + Peso ideal

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