La Escalada del Conflicto
Las etapas en el desarrollo de la gravedad de un conflicto (escalada del conflicto) son:
- Incomodidad: Es la sensación intuitiva de que algo va mal, aunque en muchas ocasiones cuesta describirlo; se trata de un pequeño gesto o detalle que nos ha molestado.
- Incidentes: Ocurre algo poco importante que deja una sensación de preocupación o irritación durante un breve periodo de tiempo. En sí mismo, un incidente es un problema sencillo que, mal resuelto, puede adquirir mayores proporciones.
- Malentendidos: Aparecen cuando, a causa de una comunicación defectuosa, se hacen suposiciones erróneas.
- Tensión: Predominan las actitudes negativas y las opiniones preconcebidas. Toda la relación es una fuente de preocupación.
- Crisis: Se ve al otro como a un enemigo y se le deshumaniza a través de una percepción determinada exclusivamente por una evaluación negativa, por lo que se legitima la violencia.
Tipos de Conflictos: Según su Causa
- Conflictos de información: Se producen cuando falta información necesaria para tomar decisiones correctas o cuando las personas están mal informadas, interpretan de modo diferente los datos o tienen criterios distintos sobre su importancia. La solución pasa por compartir los datos de tal modo que las partes puedan partir de la misma información sobre un acontecimiento que les afecta. Ejemplo: Una pelea de pareja; se pelean por una tontería, pero en realidad hay un conflicto mayor subyacente por falta de comunicación clara sobre los hechos.
- Conflictos de intereses o necesidades: Es cuando existe un problema de contenido. Se trata de buscar la forma de satisfacer los intereses y las necesidades a través de alguna solución alternativa que supere la contraposición de las posiciones iniciales. Ejemplo: Una pelea de pareja donde uno quiere ir al cine y el otro prefiere quedarse en casa.
- Conflictos por recursos: Son los conflictos que se generan por tener, acceder, prestar… No solamente objetos, sino tiempos, espacios y todo tipo de recursos. Ejemplo: Dos personas que comparten un coche y discuten sobre quién lo usa y cuándo.
- Conflictos por actividades: Desacuerdos en la forma de realizar trabajos o tareas. Ejemplo: Cuando dos personas juegan al parchís y, al comer una ficha, uno dice que se cuenta hasta 20 y otro dice que no, que hasta 10. Es el mismo juego, pero cada uno juega con sus reglas.
- Conflictos por preferencias, valores o creencias: En cuanto a las diferencias de valores, si las hay, quizás se puedan buscar valores superiores que compartan todos, teniendo en cuenta que no todos los valores están en el mismo nivel de jerarquía. Ejemplo: Una pareja de novios, uno de ellos es creyente y el otro completamente ateo; puede llegar a un conflicto si se habla de un tema religioso donde sus valores fundamentales difieren.
Tipos de Conflictos: Según la Forma que Pueden Tomar
- Latentes: Son conflictos escondidos porque se ignoran o posponen.
- Manifiestos: Aquellos que se perciben claramente.
Tipos de Conflictos: Según la Relación entre las Personas
-
Intrapersonales: Tienen un origen interno. Suelen generar ansiedad y desequilibrio y, cuando se mantienen durante cierto tiempo, pueden dar lugar a estrés, ansiedad y/o trastornos psicológicos. Se diferencian tres modalidades:
- Conflictos por frustración: Se produce al no lograr alguna meta propuesta, lo que origina respuestas de tipo defensivo.
- Conflictos de intereses: Surgen cuando varias motivaciones personales, incompatibles entre sí, están presentes al mismo tiempo.
- Conflictos de roles: Los objetivos de los diferentes roles que desempeña una persona en un mismo contexto se contraponen entre sí.
- Interpersonales: Dos o más personas se enfrentan a causa de una tercera o de un bien que pretenden conseguir. Estos conflictos (ejemplo: disputa por la custodia de los hijos en un divorcio, o por los bienes derivados de una herencia) deterioran mucho las relaciones, es decir, suelen conllevar una escalada muy rápida.
Estilos Personales de Enfrentamiento al Conflicto
- Competición (Ganar/Perder): Perseguir tus objetivos personales a costa de los otros, sin detenerse a pensar en los demás.
- Evitación (Perder/Perder): Actitud básica que se caracteriza por no afrontar los problemas; se evitan o posponen los conflictos, lo cual implica no tenerse en cuenta a uno mismo ni a los demás.
- Compromiso (Acuerdo Parcial): Es una actitud basada en la negociación, en la búsqueda de soluciones de acuerdo, normalmente basadas en el pacto y en la renuncia parcial al interés del individuo o de los grupos. La solución satisface parcialmente a ambas partes.
- Acomodación (Perder/Ganar): Supone ceder habitualmente a los puntos de vista de los otros, renunciando a los propios.
- Colaboración (Ganar/Ganar): Implica un nivel de incorporación de unos y otros en la búsqueda de un objetivo común; supone explorar el desacuerdo, generando alternativas comunes que satisfagan a ambas partes.
Vías para la Resolución de Conflictos
-
Definir el problema:
No podemos regular o resolver aquello que no somos capaces de entender o, al menos, definir suficientemente. La definición exacta del problema es uno de los puntos más importantes y difíciles. Se deben seguir los siguientes aspectos:
- Despersonalizar el problema: El análisis racional y riguroso de un problema es una garantía para la consecución de una solución integradora.
- Definir el problema de una manera que sea aceptable para ambas partes: El asunto en conflicto se debe definir en términos neutrales, sin que se manipule la información con el objetivo de definir el problema de forma beneficiosa para una de las partes.
- Definir el problema como una finalidad y buscar conjuntamente el camino para solucionarlo.
- Separar la definición del problema de la búsqueda de soluciones: El análisis demasiado rápido de un problema puede hacer llegar a soluciones precipitadas. Es conveniente mirar el problema con perspectiva, intentar comprenderlo en su totalidad para encontrar soluciones creativas.
-
Idear alternativas:
Plantear algunas soluciones de modo tentativo. La generación de soluciones alternativas requiere un alto grado de creatividad y un gran compromiso de las partes en conflicto. Existen técnicas que favorecen la generación de ideas, como la Lluvia de ideas (Brainstorming).
-
Evaluar alternativas y tomar una decisión:
Seleccionar una solución, valorando las fortalezas y debilidades de cada propuesta, y teniendo en cuenta las consecuencias y posibles apoyos. En este apartado es fundamental el consenso.
-
Poner en práctica la decisión tomada:
Planificar su ejecución y comprometerse con la decisión tomada, tanto por lo que respecta a su aplicación, como al seguimiento de los acuerdos tomados.