Ortega y Gasset y Descartes: Raciovitalismo, Perspectivismo y la Superación del Racionalismo Moderno


José Ortega y Gasset: Raciovitalismo, Perspectivismo y la Realidad Radical de la Vida

José Ortega y Gasset es uno de los filósofos más importantes del pensamiento español. Su filosofía busca superar las divisiones clásicas entre sujeto y objeto, razón y vida, o historia y verdad. Para ello, desarrolla una filosofía original que pasa por tres etapas: una inicial objetivista, otra perspectivista y raciovitalista, y una última historicista.

Pilares del Pensamiento Orteguiano

  1. Crítica al Realismo e Idealismo

    Ortega rechaza tanto el realismo (que afirma que el mundo existe independientemente del sujeto) como el idealismo (que cree que el mundo es solo una construcción mental). Propone en su lugar la fórmula: «yo soy yo y mi circunstancia», es decir, el ser humano no puede entenderse sin el entorno que lo rodea.

  2. La Circunstancia y la Libertad

    La circunstancia no es solo el contexto externo, sino todo lo que condiciona la vida del individuo (historia, cultura, sociedad…). Ortega entiende la libertad no como algo absoluto, sino como la capacidad de elegir dentro de esos límites. No elegimos nuestras circunstancias, pero sí cómo actuar en ellas.

  3. Perspectivismo

    Ortega rechaza tanto el racionalismo dogmático (que busca verdades universales sin tener en cuenta la historia) como el relativismo escéptico (que niega la verdad). Su alternativa es el perspectivismo: toda verdad depende del punto de vista del sujeto, aunque eso no significa que todo valga lo mismo. Las verdades se complementan al integrar diferentes perspectivas.

  4. Raciovitalismo

    Para Ortega, la razón no puede separarse de la vida. Frente al racionalismo abstracto y al irracionalismo vitalista, propone una razón vital, que es una razón al servicio de la vida. Pensar es dar sentido a nuestra existencia concreta, no una actividad aislada.

  5. La Vida como Realidad Radical

    La vida es el fundamento de toda experiencia. No es solo algo biológico, sino biográfico: un proyecto que construimos. Vivir es actuar, elegir, asumir el tiempo y la finitud. Es enfrentarse a un destino que debemos construir con libertad y responsabilidad.

  6. Razón Histórica y Generación

    Ortega añade a su filosofía la idea de razón histórica, según la cual no tenemos una esencia fija, sino que nos vamos formando históricamente. Introduce el concepto de generación, grupo de unos quince años en el que conviven masas conservadoras y minorías creativas. Estas minorías son las que impulsan el cambio y el progreso.

Conclusión sobre el Pensamiento Orteguiano

La filosofía de Ortega y Gasset entiende al ser humano como un ser situado, racional y proyectivo, que construye su vida en un mundo concreto, con responsabilidad y en diálogo con la historia.

René Descartes: El Padre de la Filosofía Moderna y la Búsqueda de la Certeza

Durante la Edad Moderna, la filosofía experimenta un giro hacia el sujeto. El pensamiento moderno se caracteriza por la búsqueda de un conocimiento seguro, la crítica a la tradición y la confianza en la razón. En este contexto, René Descartes es considerado el padre de la filosofía moderna, ya que propuso un método racional basado en la duda metódica y en la certeza del yo pensante: «pienso, luego existo». A partir de esta verdad indudable, Descartes reconstruye el conocimiento y afirma que la razón es suficiente para alcanzar verdades universales, sin depender de los sentidos. Su método se basa en cuatro reglas: evidencia, análisis, síntesis y enumeración.

El Dualismo Cartesiano y la Sustancia

Descartes propone una visión dualista de la realidad: distingue entre la sustancia pensante (res cogitans) y la sustancia extensa (res extensa). El alma es pensamiento, el cuerpo es extensión. Además, introduce a Dios como garante de que nuestras ideas claras y distintas corresponden con la realidad exterior, resolviendo así el problema del conocimiento del mundo.

Diálogo Filosófico: La Crítica de Ortega y Gasset a René Descartes

Sin embargo, Ortega y Gasset critica profundamente este enfoque. Considera que Descartes comete un error al reducir al ser humano a pensamiento puro, olvidando que el ser humano es, ante todo, un ser que vive. Para Ortega, la vida es la realidad radical, y pensar es una actividad que surge en el interior de una vida concreta. Por eso propone su famosa fórmula: «yo soy yo y mi circunstancia». No existe un yo aislado, sino un ser humano situado en un entorno histórico, social y vital.

La Vida como Realidad Radical frente al Yo Pensante

Además, Ortega rechaza la idea de que podamos alcanzar verdades absolutas. Frente al ideal cartesiano de certeza matemática, él defiende una razón vital e histórica, que se adapta a las circunstancias y se construye en diálogo con la experiencia. La verdad no es única ni total, sino parcial y perspectivista: cada individuo conoce desde su situación concreta.

La Visión del Mundo: Escenario Vital vs. Máquina Mecanicista

También rechaza la visión mecanicista de la naturaleza propuesta por Descartes. Este veía el mundo físico como una máquina sin finalidad, incluso considerando a los animales como autómatas. Ortega, en cambio, entiende el mundo como el escenario en el que el ser humano vive su vida y toma decisiones. Así, el conocimiento no puede limitarse a lo cuantificable, sino que debe incluir la historia, la emoción y la vida misma.

La Cuestión de Dios en Ambas Filosofías

Por último, Ortega niega que la existencia de Dios pueda demostrarse racionalmente. Para él, Dios no es objeto de conocimiento filosófico en términos absolutos. La filosofía debe centrarse en comprender la vida humana y su sentido en el mundo, no en buscar verdades metafísicas inalcanzables.

Conclusión Comparativa: Dos Modelos Filosóficos

Mientras que Descartes busca una verdad universal partiendo del yo racional y separado del mundo, Ortega propone una filosofía centrada en la vida concreta del ser humano, en su relación inseparable con el mundo y en una razón al servicio de esa vida. Son dos modelos opuestos: el racionalismo abstracto frente al raciovitalismo y perspectivismo orteguiano.

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *