Planificación desde una perspectiva sistemática



Los investigadores son expertos con una demanda concreta y los investigados son sujetos mas o menos objetivizados que participan como fuente de información. La diferencia entre uno y otro es radical. Los actores a los que luego se les transformaran sus condiciones de vida no conocen a menudo los objetivos del proyecto;
Mientras que en la intervención social planteada con el EML los sujetos participan en su creación.
Esta diferencia entre intervención e investigación social resulta fundamental a la hora de diseñar el proyecto. Si la investigación solo pretende ofrecer conocimiento sobre una realidad sobre la que necesita intervenir, el papel del proyecto desde esta perspectiva estará limitado a cumplir esta exigencia. Para el investigador, su relación con el sujeto se circunscribe en la lógica de la investigación científica que propone conocer, generalizar ese conocimiento y difundirlo para que sea contrastado por la comunidad científica. Por el contrario, la intervención pretende modificar la realidad social directamente. La relación entre el experto y el sujeto es la del reconocimiento del resultado. El proyecto se cumplirá cuando se construya la escuela, cuando aumente el numero de personas que saben leer o cuando se reduzca la mortalidad infantil, Por lo tanto, el hecho de compartir el objetivo de transformar la realidad social no es suficiente tampoco para que ambos modelos compartan la lógica de la investigación científica.


PLANIFICACIÓN POR OBJETIVOS

Planificar significa anticipar la realidad de una acción; define planificar como someter a un plan estudiado cierta actividad. Cuando hablamos de planificación en el marco de la intervención social, lo hacemos refiriéndonos a una acción que pretende observar una actividad o problemática desde una perspectiva general;
Mientras que el proyecto lo hace desde una perspectiva concreta.
El punto de discordancia entre la planificación y el proyecto es de niveles. Al estar el proyecto integrado como un resultado dentro de la meta mas general que propone la planificación, el fin del proyecto (para qué y por qué) es de un nivel inferior. Se planifica para resolver problemas generales y complejos que serán resueltos a través de proyectos que incidirán sobre aspectos específicos de esa problemática.

 La diferenciación de los niveles de planificación no se circunscribe solamente al plano sobre el que incide el proyecto. En la practica la planificación se establece sobre otros dos niveles superiores que se concretan en los planes y programas. En conjunto, estas tres instancias de planificación suelen ser planteadas a través de relaciones causa-efecto entre problemas y objetivos jerarquizados. La consecuencia de esta acción conjunta es la capacidad de abordar globalmente ámbitos complejos de intervención.
En síntesis, la planificación de la intervención social actualmente se realiza desde una perspectiva sistemática. Los problemas de un campo de actividades son complejos y han de ser fraccionados en sus dimensiones mas elementales para resolverlos de una manera sistemática. El método de planificación nos resulta ya familiar: se acota el campo, se plantean líneas de actuación que atienden a conjuntos de programas que, una vez individualizados, son abordados por objetivos específicos; el sentido de la planificación va de lo general (plan-programa-proyecto) a lo particular; mientras que la intervención se ciñe al momento de la ejecución del proyecto.
Los planes abordan campos amplios de actuación, planean metas generales, pretenden transformar las condiciones de vadi de un gran numero de personas y, lógicamente, su tiempo de aplicación suele ser largo (entre tres y cinco años). En el segundo nivel de planificación se encuentran los programas. Su intención de centra en la identificación de problemas específicos que son atribuidos posteriormente a proyectos concretos. El grupo de población sobre el que interviene es menor y se identifican a través de la carácterísticas que definen la problemática especifica a resolver. Su tiempo de aplicación suele ser mas corto (dos años), lo que permite evaluar el cumplimiento de sus objetivos en las zonas temporales intermedias de los planes. Finalmente, los proyectos son el nivel mas especifico de la acción. En el EML, cada proyecto se fija sobre un único objetivo. Define las tareas y medios que necesita para su realización y suele tener una duración mas corta aun (un año). El grupo de población al que se dirige el proyecto es muy concreta y debe poder ser abarcado por el diseño.

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *