Gradación y Estadificación del Tumor
La gradación y la estadificación de los tumores son procesos esenciales que ayudan a determinar el pronóstico y a establecer el tratamiento adecuado para el cáncer.
Gradación Tumoral: Evaluación Histológica
La gradación implica la evaluación de la apariencia de las células tumorales y su grado de diferenciación. Proporciona información sobre el tejido de origen y se basa en la evaluación histológica del tumor bajo el microscopio por el patólogo. El objetivo es observar el tamaño y la forma de las células, la proporción de células en división y la estructura del tejido tumoral.
Sistema de Gradación de los Tumores
- Grado 1 (Tumor bien diferenciado): Las células tumorales se parecen mucho a las células normales del tejido. Estos tumores tienden a crecer y diseminarse más lentamente.
- Grado 2 (Tumor moderadamente diferenciado): Las células tumorales son algo diferentes de las células normales y presentan una tasa de crecimiento y diseminación intermedia.
- Grado 3 (Tumor poco diferenciado): Las células tumorales son muy diferentes de las células normales y tienden a crecer y diseminarse más rápidamente.
- Grado 4 (Tumor indiferenciado o anaplásico): Las células tumorales no se parecen en nada a las células normales del tejido de origen y muestran un alto grado de agresividad.
Estadificación del Tumor: El Sistema TNM
La estadificación se refiere a la extensión del cáncer en el cuerpo y se basa en el tamaño del tumor, la invasión de tejidos cercanos y la metástasis (diseminación a otras partes del cuerpo). El sistema de estadificación más utilizado es el sistema TNM.
Componentes del Sistema TNM
- T (Tumor): Describe el tamaño y la invasión local del tumor primario.
- N (Nódulos Linfáticos): Indica si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos cercanos.
- M (Metástasis a Distancia): Se refiere a la diseminación del cáncer a órganos distantes.
Combinando las categorías T, N y M se asigna un estadio global al cáncer, que va del estadio 0 al estadio IV.
Estadios del Cáncer
- Estadio 0: Carcinoma in situ, sin invasión de tejidos cercanos.
- Estadio I: Tumor pequeño y localizado, con afectación nula o mínima de los ganglios linfáticos.
- Estadio II: Tumor más grande o con mayor afectación de ganglios linfáticos, pero sin metástasis a distancia.
- Estadio III: Tumor localmente avanzado con mayor afectación de ganglios linfáticos, pero sin metástasis a distancia.
- Estadio IV: Presencia de metástasis a distancia, independientemente del tamaño del tumor o la afectación de ganglios linfáticos.
Diagnóstico y Procedimientos en Oncología
El diagnóstico clínico del cáncer es un proceso multidisciplinar que requiere el enfoque integrado de especialistas en oncología, radiología, patología y laboratorio clínico, con el fin de identificar con precisión el tipo de cáncer, su estadio y gradación.
Procedimientos Diagnósticos Iniciales
Como en todos los procedimientos diagnósticos, se deben llevar a cabo la anamnesis, la exploración física y las exploraciones complementarias necesarias:
- Anamnesis: Se recoge información detallada sobre los síntomas que presenta el paciente, el motivo de la consulta asociado a una posible neoplasia, antecedentes personales y familiares de cáncer, y los determinantes medioambientales o estilos de vida que incluyan factores de riesgo asociados a agentes carcinogénicos.
- Exploración Física: Se evalúa el estado general del paciente, los signos vitales relevantes y los posibles signos locales o generales del cáncer.
Exploraciones Complementarias
Pruebas de Laboratorio Clínico
Las pruebas de laboratorio y sus resultados dependen del tipo de cáncer y su ubicación. Incluyen:
- Hemograma completo y bioquímica general: Para detectar alteraciones sistémicas y marcadores tumorales.
- Marcadores tumorales: Proteínas secretadas por las células neoplásicas que pueden encontrarse en la sangre. Su detección ayuda a establecer sospechas, pero requiere confirmación mediante estudios de anatomía patológica.
- Pruebas inmunohistoquímicas: Se utilizan para detectar proteínas concretas asociadas al cáncer.
- Pruebas moleculares y genéticas: Se emplean para detectar mutaciones y receptores específicos.
Diagnóstico por Imagen
El tipo de imagen a obtener dependerá de la sospecha clínica:
- Radiografía: Útil para visualizar masas y lesiones en los huesos y el tórax.
- Tomografía Computarizada (TC): Proporciona imágenes detalladas del cuerpo y ayuda a evaluar la extensión del tumor.
- Resonancia Magnética (RM): Se utiliza para obtener imágenes detalladas de tejidos blandos, como el cerebro y la médula espinal.
- Ecografía: Útil para evaluar masas en el abdomen, la pelvis y otras áreas.
- Tomografía por Emisión de Positrones (PET): Esencial para el diagnóstico del cáncer, ya que detecta la actividad metabólica de las células cancerosas en el cuerpo.
Estudios de Anatomía Patológica
Estos estudios son cruciales para la confirmación diagnóstica:
- Biopsias de tejido tumoral: Se realizan mediante distintos métodos (aguja fina, aguja gruesa o quirúrgica). La preparación del tejido se observa al microscopio para analizar la morfología y el tamaño celular.
- Biopsias líquidas: Prueba que permite identificar biomarcadores en sangre o fluidos corporales (células, fragmentos de ADN y otras moléculas como el ARN mensajero o proteínas tumorales) que los tumores liberan al torrente sanguíneo.
Citologías
Consisten en el estudio de células individuales o grupos de células mediante la observación microscópica. Las células se obtienen por medios no invasivos o mínimamente invasivos, como por ejemplo el frotis de Papanicolau para el cáncer cervical (cáncer de útero).
Endoscopias
Exploración muy utilizada en el diagnóstico de tumores, ya que permite obtener imágenes del interior de órganos o cavidades del cuerpo a través de la cámara del endoscopio. Esto facilita la detección de neoplasias y posibilita la extirpación de tejido patológico para su análisis o eliminación.
