TEMA 7
El Debate sobre el Continuo Social: Intersecciones entre Sociología y Biología
Se hace innegable la peculiar ambivalencia de las relaciones entre sociólogos y biólogos. En la oposición histórica a la tesis de la continuidad de las formas sociales, Frus observa una resistencia psicológica defensiva, señalándola como una de las tres grandes ofensas históricas al narcisismo de la humanidad:
- La *psicología*, atribuida a Freud.
- La *cosmología*, por Copérnico al retirar la Tierra del centro del universo.
- La *biología*, por Darwin al demostrar que el hombre proviene del mono.
Otro factor de resistencia frente al continuismo social radica en la antipatía que parece producir ciertas teorías sobre la evolución de las organizaciones sociales de homínidos, como la hipótesis del cazador o del mono asesino, lanzada por Dart. Ello, unido al canibalismo y los sacrificios humanos, propició la representación de la evolución humana como especialmente sangrienta. La antipatía que despiertan estas teorías cae en la falacia de obviar una gran cantidad de estadios intermedios en la evolución humana, cuyo estudio permitiría conocer mejor los orígenes de las formas de lo social. Se resaltan las diferencias entre humanos y primates sin comprender que el verdadero salto es el que se establece entre las comunidades de simios más desarrolladas y las especies desaparecidas.
Dado que para los humanos la sociedad es parte de su realidad, una de las pretensiones iniciales de la sociología consistía en fijar las diferencias entre sociedad humana y sociedad animal. En la actualidad, el desarrollo de los estudios etológicos permite profundizar en distintos tipos de relaciones sociales animales. La mayoría de los animales viven en sociedad, y los tipos de agrupaciones sociales son muy diversos. Wilson distingue cuatro arquetipos básicos de la evolución social:
- Las colonias de microorganismos e invertebrados.
- Los insectos sociales.
- Los mamíferos (no humanos).
- Los humanos.
Sociedades Animales: Estructura y Dinamismo
Las Sociedades de Insectos
Constituyen uno de los tipos de sociedades animales más antiguas, presentando formas de organización social muy sofisticadas. Se trata de sociedades básicamente estáticas en las que no existen márgenes significativos de variación en el comportamiento de los individuos. Lo social es morfológico y la diferencia de papeles se basa en la diferencia biológica de los individuos. Según Marcel Sire, estas presentan puntos comunes con las humanas; sin embargo, debemos concluir que, mientras las sociedades de insectos se basan en lo automático y orgánico, las de los vertebrados se basan en la evolución psíquica.
Las Sociedades de Animales Vertebrados
Su instinto difiere por completo del de los insectos; los individuos mantienen amplios márgenes de independencia y libertad. Umberto Melocotti distinguió siete grados de vida social y cuatro tipos fundamentales de sociedades:
- Arborícolas del bosque.
- Terrícolas de la sabana.
- Terrícolas de zonas áridas.
- Grandes primates.
El conjunto de los estudios permite establecer algunos rasgos comunes en la sociedad de monos:
- Territorialidad.
- Autorregulación demográfica.
- Diferenciación de lazos sociales y de estructuras de dependencia.
Lancaster distinguió entre las jerarquías generales de dominación (madre-hijo, hembra-macho), las relaciones afectivas entre individuos del mismo sexo y los papeles diferenciados según edad y sexo. El papel de lo individual garantiza un dinamismo social interno con cierto grado de desorden; esta amenaza es lo que produce en la sociedad una continua reorganización permanente y la posibilidad de cambio e innovación social.
Orígenes de la Sociedad Humana: Cultura, Lenguaje y Evolución
Descubrimientos arqueológicos vienen a cuestionar la concepción de la inteligencia como barrera diferenciadora cualitativa entre humanos y animales. La tendencia de los sociólogos ha sido establecer una barrera cualitativa en torno a la cultura, la cual viene a ser considerada como el verdadero rasgo diferenciador entre sociedades.
En cuanto al tiempo y la manera en que surgen las culturas humanas, Bonner manifestó su convicción de que todos los cambios relativos fueron relativamente graduales. Para algunos, la continuidad del proceso sociocultural descansa en ciertos paralelismos, como la habilidad de los primates para manipular objetos y comunicarse. Sin embargo, existe una frontera de vacío en el modo en que se produce el desarrollo de estas potencialidades. Algunos antropólogos señalan ese momento en la aparición del Homo sapiens junto al desarrollo del lenguaje verbal.
Nuevos estudios muestran que en las comunidades de monos existe un sistema de comunicación. A pesar de esta sofisticación para expresar sus emociones, apenas tienen capacidad de comunicación con su entorno. Entre los estudios sobre diferencias y similitudes del hombre y el mono, destaca Sabater Pi, quien enumeró un conjunto de capacidades conductuales básicas del chimpancé similares a las del hombre, así como el uso de herramientas.
Siendo una evolución de miles de años, parece evidente que existe una imbricación importante entre los procesos de evolución fisiológica y de evolución sociocultural. Como afirmó Mostovici, si nuestra anatomía desciende de los primates, lo mismo debe suceder con nuestro cuerpo social.