Formación de la Orina: Dónde y Cómo Sucede
La formación de la orina ocurre en los riñones mediante un proceso que involucra las siguientes etapas:
Filtración
Tiene lugar en el corpúsculo renal y es el proceso por el cual se filtra el agua y diversas sustancias disueltas en la sangre. La sangre llega al glomérulo, que filtra productos de desecho metabólicos y también algunos nutrientes esenciales de bajo peso molecular que sí son útiles para el organismo. El líquido resultante pasa a la cápsula de Bowman y se denomina filtrado glomerular.
Reabsorción
Tiene lugar en el sistema tubular y consiste en la recuperación de agua y nutrientes esenciales que fueron filtrados en el glomérulo, reincorporándolos a la sangre.
Secreción
También tiene lugar en el sistema tubular. En este caso, las sustancias nocivas (o aquellas beneficiosas presentes en proporción excesiva en el organismo) son eliminadas para su posterior expulsión.
Recorrido de la Orina desde su Formación hasta la Salida al Exterior
La formación de la orina se inicia en las nefronas del riñón, donde la sangre se filtra en el corpúsculo renal (glomérulo y cápsula de Bowman) para formar el filtrado glomerular. Este filtrado atraviesa luego el sistema tubular de la nefrona, donde tienen lugar los procesos de reabsorción de sustancias útiles y agua de vuelta a la sangre, y de secreción de desechos hacia el líquido tubular. La orina ya formada pasa de las nefronas a los túbulos colectores, que desembocan en las papilas renales. Desde las papilas, la orina fluye hacia los cálices menores y luego a los cálices mayores, que son conductos que la recogen y la dirigen hacia la pelvis renal. La pelvis renal conduce la orina fuera del riñón hacia los uréteres, dos conductos musculares que la transportan mediante movimientos peristálticos hasta la vejiga urinaria. La vejiga es un órgano hueco y expandible, con paredes compuestas por capas serosa, muscular y mucosa, que almacena la orina. Finalmente, durante la micción, un reflejo espinal que puede ser controlado conscientemente, el músculo detrusor de la vejiga se contrae y los esfínteres uretrales se relajan, permitiendo que la orina sea expulsada desde la vejiga al exterior a través de la uretra.
Recorrido de un Espermatozoide desde la Formación hasta la Fecundación de un Óvulo
La espermatogénesis, proceso de formación de los espermatozoides, tiene lugar en las paredes de los túbulos seminíferos de los testículos. Dentro de los lóbulos testiculares, los túbulos seminíferos contienen células espermatogénicas o espermatogonias (Tipo A y Tipo B), de las cuales las de Tipo B se transformarán en espermatocitos primarios. Tras varias divisiones y cambios, se obtienen cuatro espermátidas, que sufrirán espermiogénesis transformándose en espermatozoides maduros. La regulación de la espermatogénesis es controlada por la adenohipófisis: la hormona luteinizante (LH) estimula la producción de testosterona por las células de Leydig, y tanto la LH como la hormona folículo estimulante (FSH) se unen a las células de Sertoli para promover la espermatogénesis. Los espermatozoides maduros son almacenados en el epidídimo, un órgano situado en la cara posterior de los testículos, que también promueve su maduración final. Desde la cola del epidídimo, el espermatozoide pasa al conducto deferente. Una vez en el interior del abdomen, el conducto deferente se unirá con el conducto de la vesícula seminal para formar el conducto eyaculador. Este conducto eyaculador atraviesa la próstata para unirse a la uretra prostática. La próstata, una glándula con forma de castaña que produce fluido prostático, es el punto donde el conducto eyaculador y la uretra prostática se fusionan, marcando la unión del sistema urinario y reproductivo. El semen, compuesto por espermatozoides de los testículos y líquido de las glándulas seminales y fluido prostático, es transportado por la uretra, un conducto muscular que transporta la orina desde la vejiga al exterior durante la micción, y en el caso de los genitales masculinos, también forma parte del aparato reproductor para la salida del semen. En el aparato reproductor femenino, el óvulo maduro es liberado del folículo de Graaf en el ovario durante la ovulación, siendo recogido por las fimbrias de las trompas de Falopio. La fecundación tiene lugar en la porción ampular de la trompa de Falopio.
Recorrido de un Trozo de Zanahoria desde su Ingestión hasta su Salida al Exterior
Al ser ingerido, el trozo de zanahoria entra en la cavidad oral, donde los dientes lo cortan, trituran y muelen, y la lengua ayuda a masticarlo y deglutirlo. Las glándulas salivares producen saliva que contiene amilasa para la digestión de carbohidratos y mucina para la protección. El bolo alimenticio pasa de la boca al esófago a través de la faringe, donde el paladar blando y la úvula impiden que la comida entre en la cavidad nasal durante la deglución. El esófago conduce el bolo mediante movimientos peristálticos, regulados por el esfínter esofágico superior e inferior, hasta el estómago. En el estómago, el trozo de zanahoria se mezcla con el jugo gástrico y se convierte en quimo. El píloro permite el paso del quimo del estómago al duodeno. En el intestino delgado (duodeno, yeyuno e íleon), la absorción de nutrientes es facilitada por las vellosidades y microvellosidades, mientras que la papila duodenal mayor es la desembocadura de los conductos biliares y pancreáticos. Los alimentos no digeridos pasan al intestino grueso (colon), que incluye el colon ascendente, transverso, descendente, sigma, recto y canal anal. En el colon descendente se acumula parte del material no digerido, y el sigma direcciona los excrementos hacia el recto. El recto acumula los restos de la digestión en forma de heces, y su salida al exterior a través del ano es controlada por los esfínteres anales interno y externo, lo que constituye la defecación.
División Funcional del Hígado
Funcionalmente, el hígado puede ser dividido en ocho segmentos. Cada uno de estos segmentos tiene una rama de la vena porta, una rama de la arteria hepática y un conducto biliar. De esta manera, es posible realizar una disección quirúrgica sin interrumpir la irrigación sanguínea del resto de segmentos. En esta división, los lóbulos funcionales hepáticos derecho e izquierdo se encuentran separados por un plano entre la vesícula biliar y la vena cava inferior. Los segmentos son: el segmento I corresponde al lóbulo caudado; los segmentos II, III y IVa corresponden al lóbulo hepático izquierdo; el segmento IVb corresponde al lóbulo cuadrado; y los segmentos V, VI, VII y VIII corresponden al lóbulo hepático derecho.
Procesos Básicos del Sistema Digestivo
A continuación, se enumeran y explican los procesos básicos que se realizan en el sistema digestivo:
Ingestión
Es el proceso inicial por el cual los alimentos y líquidos se introducen en el cuerpo a través de la boca. La cavidad oral está compuesta por vestíbulos y la propia cavidad oral. La lengua manipula los alimentos y los dientes los mastican, iniciando la digestión mecánica.
Digestión
Es el proceso por el cual los alimentos se descomponen para que el cuerpo pueda absorber sus nutrientes. En el estómago, las contracciones musculares trituran y mezclan los alimentos con los jugos gástricos, formando el quimo. En el intestino delgado, la segmentación mezcla el quimo con las secreciones intestinales, pancreáticas y biliares.
Absorción
Es el proceso por el cual los nutrientes digeridos pasan del lumen del tracto gastrointestinal a la sangre o a la linfa. La mayor parte de la absorción ocurre en el intestino delgado. Los nutrientes pasan a través de las células epiteliales del intestino delgado y entran en los capilares sanguíneos. El agua también se absorbe, principalmente en el intestino delgado.
Defecación
Eliminación de desechos, sustancias no digeribles, bacterias, células descamadas y los materiales digeridos que no fueron absorbidos. Este material eliminado recibe el nombre de heces y sale del cuerpo a través del ano.
Recorrido de una Molécula de Urea desde la Arteria Renal hasta su Salida
El recorrido de una molécula de urea se puede dividir en las siguientes etapas:
Entrada al Riñón y Filtración
La molécula de urea, contenida en la sangre, llega al riñón a través de la arteria renal, que nace de la aorta abdominal. Esta arteria renal se divide y ramifica en el parénquima renal, hasta formar las arteriolas aferentes que llegan al glomérulo. En el glomérulo, la urea es filtrada junto con otros productos de desecho metabólicos, pasando a la cápsula de Bowman para formar el filtrado glomerular.
Recorrido por la Nefrona y Eliminación
El filtrado glomerular, que contiene la molécula de urea, pasa del corpúsculo renal (glomérulo y cápsula de Bowman) al sistema tubular de la nefrona. Este sistema tubular está compuesto por el túbulo contorneado proximal, el asa de Henle, el túbulo contorneado distal y el túbulo colector. Durante el proceso de secreción en el sistema tubular, las sustancias nocivas, como la urea, son desechadas para ser expulsadas.
Vías Urinarias Intrarrenales
Desde los túbulos colectores de las nefronas, la orina (que contiene la urea) desemboca en la papila renal. Luego, es conducida a los cálices menores, que reciben la orina de las papilas renales. De los cálices menores, la orina pasa a los cálices mayores (normalmente 3: superior, medio e inferior). Finalmente, de los cálices mayores, la orina es enviada a la pelvis renal.
Vías Urinarias Extrarrenales y Salida
La pelvis renal conduce la orina hacia el uréter. Los uréteres son dos conductos musculares que descienden por el retroperitoneo, conduciendo la orina desde los riñones hasta la vejiga gracias a movimientos peristálticos. La orina se acumula en la vejiga, un órgano hueco situado en la pelvis. Finalmente, la orina es transportada desde la vejiga al exterior durante la micción a través de la uretra, un conducto muscular que se inicia en el cuello de la vejiga y finaliza en el meato urinario.