Historia de la Dictadura de Primo de Rivera y la Segunda República Española


La Dictadura de Primo de Rivera

Temas (1913)

El rey Alfonso XIII apoyó la instauración de este régimen. Se buscaba establecer un sistema más democrático, reducir la influencia de los poderes tradicionales en España y limitar el poder del rey en ciertos ámbitos institucionales.

El 13 de septiembre de 1923, el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, da un golpe de Estado. El rey Alfonso XIII le otorga su apoyo inmediato.

Causas del Golpe de Estado

  • Crisis política y social.
  • Auge del nacionalismo periférico.
  • Crisis económica.
  • Desprestigio del sistema político de la Restauración.
  • Conflictos sociales crecientes.
  • La problemática de la Guerra de Marruecos.

Objetivos del Régimen

  • Regenerar la vida política nacional.
  • Eliminar el caciquismo y la corrupción.
  • Asegurar el orden público.
  • Frenar la conflictividad obrera y garantizar la unidad nacional.

Bases de la dictadura: Contó con el apoyo de la burguesía, las clases medias y una buena parte del Ejército, estableciéndose como un régimen autoritario.

El Directorio Militar (1923–1925)

Este periodo estuvo formado únicamente por militares y se caracterizó por las siguientes medidas:

  • Suspensión de la Constitución.
  • Disolución del Parlamento.
  • Ilegalización de los partidos políticos.
  • Prohibición de sindicatos.
  • Supresión de la libertad de prensa.
  • Centralización del poder.

Para acabar con el caciquismo, se disolvieron ayuntamientos y juntas locales, nombrando nuevos cargos. Para frenar la oposición obrera, se aplicó una política muy represiva, especialmente contra la CNT. En 1924 se creó la Unión Patriótica, el partido único del régimen, logrando el restablecimiento del orden público y el control del protectorado de Marruecos.

El Directorio Civil (1925–1930)

Integrado por miembros de la Unión Patriótica, buscó la institucionalización del sistema mediante:

  • Creación del Consejo de Trabajo para frenar conflictos laborales y controlar el movimiento obrero.
  • Intervención del Estado en la economía: desarrollo de obras públicas, ferrocarriles, carreteras y planes hidráulicos.
  • Creación de monopolios estatales como CAMPSA.
  • Implementación de una política proteccionista que generó un crecimiento económico inicial.

Política Anticatalana de la Dictadura

Inicialmente, el Capitán General de Cataluña no hostilizó al catalanismo ni a su lengua y cultura. Por ello, la burguesía y la Lliga dieron soporte al golpe de Estado en sus comienzos. Sin embargo, en septiembre de 1923 se emitió un decreto para la represión del separatismo:

  • Desmantelamiento de las instituciones públicas y privadas catalanistas.
  • Decisión de prescindir de la Mancomunitat y desarticularla hasta su disolución definitiva en 1925.
  • Clausura de ateneos, sociedades recreativas y asociaciones corales.
  • Prohibición de manifestaciones en lengua catalana y del uso público de la bandera.
  • Prohibición de celebraciones como el Onze de Setembre y los Jocs Florals.
  • Censura de prensa y depuración de maestros e instituciones educativas vinculadas a la Mancomunitat.
  • Conflicto con sectores eclesiásticos y el cierre del estadio del FC Barcelona.

La Oposición a la Dictadura

Aunque al principio no tuvo una oposición importante, con el tiempo surgieron diversos sectores críticos:

  • Republicanos: Campaña de desprestigio de la dictadura con figuras como Lerroux.
  • Anarquistas: Conflictos como el de La Canadiense (1926).
  • Intelectuales y estudiantes universitarios: Denunciaron la censura de prensa y la falta de libertad de expresión (destaca Miguel de Unamuno).
  • Sectores catalanistas: Desgaste de la política catalana en los partidos nacionalistas radicales e incremento de su influencia (Hechos de Prats de Molló, 1926).
  • Oposición obrera: Especialmente la CNT (en 1927 se funda la FAI, Federación Anarquista Ibérica) y el Partido Comunista.
  • PSOE: Entra en contacto con los republicanos.

En 1930 se firma el Pacto de San Sebastián, que unió a republicanos, socialistas y nacionalistas contra el régimen.

Caída de la Dictadura y Advenimiento de la República

La crisis económica derivada del crack del 29 provocó un incremento del paro y descontento social. La dictadura perdió sus apoyos y, en enero de 1930, Primo de Rivera presentó su dimisión.

El rey nombró al general Berenguer para convocar elecciones (periodo conocido como dictablanda). Le sustituyó el almirante Aznar en febrero de 1931, quien convocó elecciones municipales para el 12 de abril de 1931. El 14 de abril de 1931 se proclamó la Segunda República.

Las Elecciones del 12 de abril de 1931

Se plantearon como un plebiscito sobre la monarquía. En las grandes ciudades y núcleos industriales triunfó la república, mientras que en el mundo rural ganaron los monárquicos.

El 14 de abril

Eibar fue la primera ciudad en proclamar la República, movimiento que se extendió por toda España. Ese mismo día, el rey Alfonso XIII abandonó el país. En Cataluña, ERC (con Companys y Macià) proclamó la República Catalana, aunque finalmente se aprobó el restablecimiento de la Generalitat.

Gobierno Provisional

Los partidos laicos tomaron el poder en un contexto de anticlericalismo popular y conflictividad social. Sus primeras acciones incluyeron:

  • Libertad para los presos sindicalistas.
  • Concesión del Estatuto de Autonomía a Cataluña.
  • Consolidación del triunfo de las izquierdas.

Constitución de 1931

Definió a España como una «República de trabajadores de todas las clases» y estableció:

  • Sufragio universal masculino y femenino.
  • Amplias libertades colectivas e individuales.
  • Estado laico y autonomía regional.
  • Educación primaria obligatoria y gratuita.
  • Posibilidad de expropiación por utilidad pública.
  • Matrimonio civil y divorcio.

El Bienio de las Izquierdas (1931–1933)

Reforma Religiosa

Los objetivos de la República eran limitar la influencia de la Iglesia y secularizar la sociedad española:

  • Medidas Constitucionales: Aconfesionalidad del Estado, supresión del presupuesto para el clero, autorización del divorcio y matrimonio civil, y secularización de cementerios.
  • Ley de Congregaciones: Prohibición a las órdenes religiosas de dedicarse a la enseñanza y la posible disolución de aquellas que no se sometieran al Estado (como la Compañía de Jesús).

Reacciones: Los sectores católicos se sintieron atacados, lo que provocó un resurgimiento de ataques populares anticlericales e incendios de iglesias. Figuras como el cardenal Vidal i Barraquer y el cardenal Segura (quien fue expulsado de España) protagonizaron la resistencia eclesiástica.

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