El Proceso de Crecimiento de las Empresas
Los mercados evolucionan y presentan retos y oportunidades que exigen nuevas respuestas por parte de la empresa. En la actualidad, los nuevos retos están relacionados con la globalización de la economía y con la búsqueda de la dimensión adecuada para atender mercados cada vez más amplios y competitivos. Dentro de este contexto, en la medida en que las empresas adquieren una posición relevante en el mercado, surge en ellas su vocación de desarrollo y crecimiento.
Este crecimiento puede orientarse en diversas direcciones en función de la respuesta que dé la empresa a las siguientes cuestiones:
- ¿Especialización o diversificación? Las empresas pueden crecer incrementando la actividad en la que son especialistas, o bien entrando en nuevos productos y negocios diversificados.
- ¿Crecimiento interno o externo? A su vez, la empresa puede crecer contando solamente con sus propios recursos (crecimiento interno) o bien puede unir sus recursos con los de otras empresas (crecimiento externo) para aumentar, de este modo, su dimensión.
- ¿Mercado nacional o multinacional? A partir de una cierta dimensión, el mercado nacional puede resultar demasiado estrecho y la empresa tendrá que plantearse su expansión geográfica.
Ventajas del Crecimiento: Las Economías de Escala
La empresa, sea cual sea su dimensión inicial, buscará alcanzar con el paso del tiempo su dimensión óptima, es decir, aquella dimensión que le permita producir con el mínimo coste posible como consecuencia de las denominadas economías de escala.
Las economías de escala se obtienen al disminuir el coste medio (coste por unidad) a medida que crece la empresa y aumenta la cantidad de producción.
Las razones que explican estas economías son:
- En el aspecto productivo, la gran dimensión posibilita un alto grado de mecanización y permite:
- Aprovechar mejor las ventajas de la división del trabajo y la especialización, con la consiguiente mejora en la destreza y habilidad de los trabajadores, menor pérdida de tiempo en los cambios de tarea, etc.
- Utilizar equipos polivalentes, automatizar los procesos y emplear robots y máquinas con gran capacidad para realizar simultáneamente varias tareas, con el consiguiente ahorro en costes y personal.
- En el aspecto comercial, la gran empresa reduce costes en sus compras al hacerlo a gran escala, ya que consigue mejores precios de sus proveedores. Esto, unido a las ventajas en el aspecto productivo, le permite disponer de más recursos para promoción y publicidad, investigación de mercados, etc. Al dedicar más recursos al conocimiento del mercado, está en mejores condiciones para renovar sus productos en función de la demanda, diferenciarlos de los de sus competidores, etc.
- En el aspecto financiero, las grandes empresas tienen más posibilidades de acceso a las diferentes fuentes financieras (bolsa, financiación internacional, etc.), y obtienen, además, mejores condiciones, ya que su tamaño las convierte en clientes preferentes que se benefician de los tipos de interés más bajos.
En conclusión, la gran empresa presenta ventajas económicas que le permiten, como consecuencia del abaratamiento de sus costes, disminuir los precios de sus productos y, por tanto, ser más competitiva en el mercado.
¿Especialización o Diversificación?
En su desarrollo, las empresas pueden crecer por medio de la especialización o a través de la diversificación. En el crecimiento por especialización, la empresa intensifica el esfuerzo en sus productos actuales, mejorándolos y ampliando sus ventas tanto en los mercados actuales como en nuevos mercados. El crecimiento por diversificación, en cambio, supone una cierta ruptura con la trayectoria de la empresa, al desarrollarse en nuevos mercados y con nuevos productos.
La matriz mercados/productos contempla las distintas opciones de crecimiento.
La Estrategia de Especialización
La estrategia de especialización presenta diversas variantes:
- Penetración de mercados. Consiste en aumentar las ventas de los productos actuales de la empresa entre sus clientes habituales o en conseguir clientes nuevos. La mayor participación en el mercado puede obtenerse con la mejora de la calidad, la publicidad y la promoción; con la reducción de precios, etc.
- Desarrollo de mercados. Con esta estrategia, la empresa introduce sus productos actuales en nuevos mercados, tanto en nuevas áreas geográficas como en nuevos segmentos de un mismo mercado. Así, muchas empresas de la UE (fabricantes de automóviles, electrodomésticos, ropa, etc.) están introduciendo sus productos habituales en China y Europa del Este con gran aceptación.
- Desarrollo de productos. Con ella, la empresa se mantiene en su mercado actual, pero desarrolla nuevos productos complementarios o relacionados con los productos actuales. Las leches enriquecidas, los yogures con bífidus, los electrodomésticos «ecológicos», etc., son ejemplos con los que la empresa renueva sus productos y ofrece una imagen de innovación.
La Estrategia de Diversificación
La empresa se diversifica cuando crece añadiendo nuevos productos y nuevos mercados a los ya existentes, ampliando su cartera de negocios. Existen diversas estrategias de diversificación:
- Diversificación horizontal (o relacionada). Se da cuando existe alguna conexión o similitud entre los productos nuevos y antiguos de la empresa (misma tecnología, similar sistema de comercialización, etc.). Con ella, la empresa añade nuevos productos complementarios o sustitutivos a los ya existentes, tratando de ofrecer una gama más diversa para atraer a nuevos clientes. Por ejemplo, el grupo Leche Pascual fue añadiendo a su línea de productos lácteos otros productos complementarios, como la línea de desayunos (cereales, miel, confituras, etc.), la línea de postres, la línea de zumos de frutas, etc.
- Diversificación vertical (integración vertical). Consiste en crecer añadiendo nuevas actividades a las actuales, pero dentro del mismo sector. Así, una cooperativa agrícola puede decidir ampliar su negocio envasando ella misma sus verduras o creando una red de tiendas para su distribución. Supone extender su actividad integrando otras actividades dentro de la cadena de valor del sector.
- Diversificación heterogénea (no relacionada o de conglomerado). En ella no hay ninguna relación entre los productos nuevos y antiguos; se trata de explotar oportunidades rentables, aunque no tengan relación con la actividad de la empresa. Un ejemplo es el de un fabricante de ropa que se convierte, además, en promotor y constructor de viviendas. Es la estrategia más arriesgada, ya que la empresa entra en entornos competitivos nuevos que implican nuevos conocimientos y nuevas estructuras empresariales.
