Piel Saludable: Estructura, Afecciones Comunes y Rutinas Cosméticas Esenciales


La Piel: Estructura, Funciones y Tipos

Es el órgano más extenso del organismo; supone entre un 10-15 % del peso corporal, pudiendo llegar a pesar hasta 4 kilogramos. Su grosor varía a lo largo del cuerpo (la piel más fina es la de los párpados y la más gruesa, la de las manos y pies). Varía en función de la edad, la raza o el sexo.

Funciones de la Piel

  • Barrera física y bioquímica: Protege frente a agresiones externas, microbiológicas y de la pérdida de agua transepidérmica.
  • Inmunológica: Previene las infecciones gracias a las células de Langerhans.
  • Regula la temperatura corporal: Manteniéndola en 37 grados Celsius.
  • Reserva energética: En forma de acúmulos de grasa.
  • Órgano sensitivo y táctil: A través de receptores y terminaciones nerviosas, transmite el tacto, la temperatura o el dolor.
  • Metabólica: En ella se sintetiza la vitamina D.

Estructura de la Piel

Manto Hidrolipídico

Fluido que recubre nuestra piel y se compone de una mezcla de vapor de agua, dióxido de carbono y la emulsión epicutánea (compuesta de agua, sudor y grasa, proveniente de las glándulas sudoríparas y sebáceas). Tiene un pH entre 4,5 y 6 que favorece el crecimiento de los microorganismos que habitan en la piel, conocidos como el microbioma cutáneo. Es muy importante en la función inmunitaria.

Capas de la Piel

  • Epidermis

    Es la capa más superficial y se divide, a su vez, en 5 estratos. El más interno es el estrato basal. La epidermis es avascular, es decir, no tiene vasos sanguíneos.

    • Estrato basal o germinativo: Se asienta sobre la dermis. Las células de esta capa son las únicas sujetas a división celular; a medida que se forman nuevas células, las antiguas migran a capas superiores. Aquí se forman los queratinocitos y se encuentran las células de Merkel y los melanocitos.
    • Estrato espinoso o cuerpo de Malpighi: Las células están unidas por puentes de unión llamados desmosomas. Este estrato tiene un elevado contenido acuoso.
    • Estrato granuloso: A este nivel, las células comienzan a morir, rompiéndose la membrana y vertiendo su contenido al exterior.
    • Estrato lúcido: Formado por células transparentes y aplanadas, solo se manifiesta en las palmas de las manos y las plantas de los pies.
    • Estrato córneo: Es la capa más superficial, formada por células anucleadas llamadas corneocitos, que son queratinocitos muertos.
    Células de la Epidermis

    La epidermis consta de 4 tipos principales de células:

    • Queratinocitos o células epidérmicas: Son las principales células que producen queratina, una proteína que proporciona protección física e impermeabilización a la piel y forma parte del pelo y las uñas. El proceso de maduración y renovación de la piel dura, de media, unos 28 días, aunque se ralentiza con la edad y el envejecimiento.
    • Melanocitos: Células que producen un pigmento llamado melanina, que aporta color a la piel y nos protege frente a la radiación solar.
    • Células de Merkel: Se encuentran en el estrato basal y son las responsables del sentido del tacto.
    • Células de Langerhans: Están involucradas en la respuesta inmune.

    Los productos cosméticos actúan mayoritariamente en la epidermis, concretamente en el estrato córneo y en el manto hidrolipídico.

  • Dermis

    Capa intermedia de la piel que constituye su componente estructural. Está dividida en:

    • Zona papilar superficial: Rica en terminaciones nerviosas, consiste en un tejido conectivo con fibras de colágeno y elastina.
    • Capa reticular profunda: Formada por tejido conectivo denso que proporciona soporte estructural y elasticidad a la piel. Está compuesta por colágeno, elastina y ácido hialurónico.
    • Colágeno: Proteína muy abundante en el cuerpo que proporciona soporte y rigidez a la piel.
    • Elastina: Proteína que aporta elasticidad y permite la recuperación de la piel tras su estiramiento.
    • Ácido hialurónico: Su principal propiedad es la retención de agua, lo que confiere a la piel una correcta hidratación.

    En la dermis encontramos:

    • Glándulas sebáceas: Liberan sebo en la superficie de la piel.
    • Glándulas sudoríparas: Producen y liberan el sudor.
    • Vasos linfáticos y sanguíneos: Nutren la piel y ayudan a controlar la temperatura corporal.
    • Receptores sensoriales: Transmiten al sistema nervioso nuestras sensaciones.
    • Folículos pilosos: Donde se forma el pelo.
  • Hipodermis

    Capa más interna, formada por tejido graso y conjuntivo que confiere estructura y sustento al resto de las capas. Se compone principalmente de adipocitos, aunque su número y grosor difieren entre las distintas partes del cuerpo. La hipodermis es una capa muy vascularizada, lo que permite la absorción de los medicamentos administrados por vía subcutánea.

Tipos de Piel

En función de su apariencia y las sensaciones, la piel se clasifica en 5 tipos principales:

  • Piel normal o eudérmica: La piel normal podría considerarse una piel equilibrada, con un balance correcto de agua y grasa. Presenta una superficie lisa, con color uniforme, poros poco visibles y resistencia a cambios de temperatura. En la práctica, es difícil encontrar pieles definidas como normales, pero es un concepto muy utilizado en la clasificación de las cremas faciales.
  • Piel seca: Piel con tendencia a la aparición de placas escamosas, tirantez y enrojecimiento. El tamaño de los poros es muy pequeño, pero con líneas visibles debido a la falta de lípidos en la piel. Puede presentar aspereza, picor y descamación, síntomas que se agravan en los meses de invierno.
  • Piel grasa o seborreica: Piel brillante, caracterizada por una secreción excesiva de grasa, con poros visibles, textura irregular y predisposición a sufrir imperfecciones. Es untuosa al tacto y la capa de grasa es palpable.
  • Piel mixta: Piel que presenta zonas secas combinadas con zonas grasas. Es característica de esta piel la llamada zona T (frente, nariz y barbilla suelen ser más grasas, y la zona de los pómulos es más seca y sensible).
  • Piel sensible: Se caracteriza por enrojecimiento, irritación, ardor, picor y sequedad variable, debido a distintas causas médicas como la rosácea, eccemas, alergias, etc. Puede ser seca, mixta o grasa.

Todas las pieles pueden sufrir deshidratación, que se caracteriza por una pérdida de agua en el estrato córneo. Se puede producir por déficit de lípidos o hidrófilos, o por falta de secreciones acuosas en el manto hidrolipídico.

Acné: Causas, Tipos y Tratamientos

Patología en la que se produce una obstrucción e inflamación crónica del folículo pilosebáceo de la cara y la parte superior del tronco. Los fenómenos que se producen en este folículo son:

  • Alteración de la producción de sebo: Hay hipersecreción sebácea. El sol nunca mejora la patología, solo la enmascara al producir un engrosamiento de la capa córnea.
  • Obstrucción del canal pilosebáceo: Produce obstrucción del folículo, acumulándose células que deberían eliminarse y formando comedones. El comedón es la lesión inicial y consiste en una estructura formada por sebo y queratina que tapona el conducto pilosebáceo.
  • Cambios en la flora bacteriana: Proliferación de Cutibacterium acnes (anteriormente Propionibacterium acnes) que infecta la glándula sebácea, lo que produce un proceso inflamatorio.
  • Inflamación.

Tipos de Lesiones en el Acné

  • Lesiones no inflamatorias:
    • Puntos blancos o comedones cerrados: El aumento de sebo, las células muertas y las bacterias quedan atrapadas. Se aprecian como pequeñas protuberancias blancas cerradas en la piel.
    • Puntos negros o comedones abiertos: Son similares a los puntos blancos, aunque en este caso los poros están abiertos, por lo que el sebo y la queratina se oxidan en contacto con el aire y se vuelven de color negro.
  • Lesiones inflamatorias:
    • Pápulas: Son granos duros, pequeños, de color rojo y dolorosos al tacto. Se forman cuando un comedón blanco o negro se irrita, normalmente tras su manipulación. No contienen pus.
    • Pústulas: Rellenas de pus en el centro, son cavidades purulentas, superficiales, de color blanco o amarillento.
    • Quistes: Protuberancias más difíciles de eliminar, son bolsas suaves, purulentas, subcutáneas y muy dolorosas. Suelen dejar cicatrices profundas.
    • Nódulos: Lesiones duras sin pus, también son dolorosas y dejan cicatrices profundas.
  • Lesiones residuales:
    • Hiperpigmentadas: Aparecen tras una respuesta exagerada de los melanocitos debido a procesos inflamatorios reiterados por acné en las zonas afectadas. Estas lesiones son muy frecuentes tras la exposición solar sin la protección adecuada.
    • Cicatrices: Sobre todo, aparecen tras padecer acné nódulo-quístico severo. Suelen ser atróficas o hipertróficas.

El acné se clasifica en 4 grados, dependiendo de la lesión predominante:

  • Grado I o acné comedoniano
  • Grado II o acné pápulo-pustuloso
  • Grado III o acné pústulo-nodular
  • Grado IV o acné nódulo-quístico

Tratamiento Tópico del Acné

  • Queratolíticos:
    • Retinoides tópicos: Tretinoína, isotretinoína, adapaleno y tazaroteno.
  • Antimicrobianos:
    • Peróxido de benzoilo
    • Eritromicina
    • Clindamicina
  • Alfahidroxiácidos (AHA):
    • Ácido glicólico
    • Ácido azelaico

No debemos juzgar la eficacia de un tratamiento hasta pasados tres meses de su aplicación.

Recomendaciones Generales para el Acné

  • Limpiar la cara dos veces al día (mañana y noche) con un gel específico.
  • No friccionar al secar la zona afectada.
  • Evitar el contacto del pelo con la piel afectada.
  • Utilizar cosméticos oil-free no comedogénicos, incluyendo los fotoprotectores.
  • Evitar el estrés.
  • Practicar deporte.
  • Seguir una dieta equilibrada.
  • No tocar ni manipular las lesiones.
  • No tratar las cicatrices mientras las lesiones estén activas.
  • Tener paciencia y constancia en el tratamiento; la duración mínima es de 8 a 12 semanas.

Rosácea: Síntomas y Manejo

Afección crónica de la piel facial que cursa con enrojecimiento e inflamación del área centrofacial (frente, nariz, párpados, mejillas, barbilla y mentón). Puede evolucionar con la aparición de pápulas, pústulas y telangiectasias (arañas vasculares muy finas). Junto a estos síntomas, puede haber otros oculares como la blefaritis (inflamación de los párpados). Es más frecuente en mujeres y la edad de inicio va desde los 30 hasta los 50 años. Las causas son múltiples: vasculares, infecciosas, alimentarias, psicológicas, ambientales, productos cosméticos y fármacos.

Tratamiento Tópico de la Rosácea

Consigue reducir el número de pápulo-pústulas, aunque no mejora ni el eritema ni las telangiectasias.

  • Metronidazol 0,75 % (mañana y noche): Tratamiento de elección.
  • Ácido azelaico 15 % (mañana y tarde): Si no se tolera el anterior.
  • Ácido fusídico (mañana y tarde): Efectivo en blefaritis.

Recomendaciones Generales para la Rosácea

Procurar utilizar productos específicos para la patología, con pocos ingredientes, sin perfume y sin alcohol. Es preferible el uso de productos que no necesiten aclarado para evitar la tirantez que provoca el agua en las pieles reactivas. También se recomiendan los syndets (panes limpiadores) que carecen de tensioactivos irritantes, así como las leches limpiadoras.

  • Hidratación: Cremas para pieles sensibles que no sean de fase externa oleosa.
  • Protección solar: Es fundamental utilizar preferiblemente filtros físicos como dióxido de titanio y óxido de zinc.

Es recomendable el uso de aguas termales a discreción.

Envejecimiento Cutáneo y Estilo de Vida

El exposoma es el conjunto de factores ambientales y de exposición a los que estamos sometidos cada persona desde el momento en que nacemos hasta que morimos. Son factores externos que tienen un impacto y actúan sobre nuestro genoma y nuestra salud.

Factores que Afectan el Bienestar de la Piel

  • Alimentación: Los productos antioxidantes la protegerán del envejecimiento (frutas, verduras, etc.). El omega-3 contribuye a mantener su hidratación natural y el consumo de probióticos ayuda a mantener la microbiota cutánea, lo que contribuye al control de patologías como el acné y la rosácea.
  • Sueño: Las horas de sueño y el correcto descanso contribuyen a mejorar el estado de nuestra piel.
  • Contaminación ambiental: Los contaminantes atmosféricos como el ozono, el humo del tabaco, los hidrocarburos aromáticos o los agentes oxidantes pueden dañar el ADN de las células cutáneas.
  • Tabaquismo: El consumo de tabaco se asocia al envejecimiento prematuro, a la reducción de la capacidad de cicatrización y al empeoramiento de enfermedades dermatológicas como la psoriasis, los eccemas o la rosácea.

Productos Cosméticos: Definición y Clasificación

Un producto cosmético es toda sustancia o mezcla destinada a ser puesta en contacto con las partes superficiales del cuerpo humano, o con los dientes y las mucosas bucales, con el fin exclusivo o principal de limpiarlos, perfumarlos, modificar su aspecto, protegerlos, mantenerlos en buen estado o corregir los olores corporales. Los cosméticos se componen de: uno o varios principios activos responsables de la acción del cosmético; excipientes principales que vehiculizan estos principios activos; y aditivos y correctores utilizados con el fin de conservar, perfumar, corregir olores corporales o mejorar las propiedades organolépticas.

Clasificación de los Productos Cosméticos

  • Según su acción cosmética: Higiene, correctivos, corporales, para perfumar y de mantenimiento y protección.
  • Según el lugar de aplicación.
  • Según la forma farmacéutica:
    • Soluciones y lociones: Son líquidas, ya que los componentes se encuentran disueltos. Los excipientes principales suelen ser el agua o alcoholes como la glicerina. Ejemplos: tónicos, lociones limpiadoras, etc.
    • Suspensiones: Parte de los componentes se encuentra en estado sólido disperso en un excipiente líquido. Ejemplo: exfoliantes con gránulos.
    • Emulsiones: El agua se mezcla con una fase oleosa estabilizada por emulgentes.
    • Geles: Soluciones o suspensiones a las que se ha añadido un agente gelificante. Ejemplo: geles de baño.
    • Pastas: Formas semisólidas con alto porcentaje de sustancias sólidas pulverizadas dispersas en el excipiente acuoso u oleoso. Ejemplo: pastas de dientes.
    • Formas farmacéuticas sólidas:
      • Polvos: Sustancias sólidas que pueden encontrarse sueltas o compactas. Ejemplo: polvos de maquillaje.
      • Pastillas: Jabones de mano o champús sólidos.
      • Barras: Son formas cosméticas sólidas, compuestas por sustancias grasas como ceras y aceites. Ejemplo: pintalabios.
  • Según el envase utilizado:
    • Aerosoles: Formas envasadas a presión, formadas por un gas y un líquido que se mezclan, propulsando el cosmético en forma de gotas finas. Ejemplos: desodorante, laca, etc.
    • Espumas: Se incorpora gas en el excipiente sólido o líquido, formando una dispersión en un envase a presión. Ejemplo: espumas de afeitado, espumas de pelo, etc.
    • Pulverizadores: Con excipientes líquidos propulsados al exterior en forma de pequeñas gotículas sin ser envasados a presión. Ejemplo: aguas termales, etc.
    • Soportes impregnados: Soportes sólidos como toallitas, parches o discos impregnados con los excipientes y principios activos. Ejemplos: toallitas desmaquillantes, etc.
    • Frascos monodosis: Utilizados para almacenar principios activos fácilmente deteriorables o para aumentar su estabilidad. Pueden estar destinados a la aplicación de una sola dosis, ya que una vez abierto, el principio activo se podrá deteriorar. Ejemplo: ampollas, etc.

Interpretación del Etiquetado de Productos Cosméticos (INCI)

Todos los componentes de un producto cosmético se especifican atendiendo a la normativa vigente en su etiquetado. El fabricante no está obligado a indicar la concentración exacta de los componentes para respetar el secreto de fabricación.

El INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos) es el listado de ingredientes cosméticos que podemos encontrar en la etiqueta de los productos, donde se detalla la composición completa de principios activos y excipientes que forman parte de una formulación cosmética. Todos los componentes de la formulación se encuentran descritos en las etiquetas de los productos cosméticos de acuerdo con los siguientes criterios:

  • Principios activos y excipientes: Aparecen ordenados por su concentración de manera decreciente hasta el 1 %.
  • A partir de concentraciones inferiores al 1 %: Los ingredientes cosméticos pueden aparecer desordenados.
  • Los ingredientes: Se escribirán en inglés o latín; en el caso de las plantas, se utiliza el nombre científico con el género y la especie.
  • Las marcas: Están obligadas a declarar todos los alérgenos que contenga la fórmula. Al final de la fórmula suelen aparecer los colorantes y los pigmentos, así como los perfumes.

Cosmética Facial: Rutinas y Productos Esenciales

Establecimiento de una Rutina Cosmética Personalizada

Para establecer una rutina cosmética, debemos aprender a evaluar diferentes factores como el tipo de piel, el estado en el que se encuentra y las necesidades que presenta. Para ello, hay que analizar las pautas de cuidado que el paciente está siguiendo, sus hábitos de vida y los aspectos externos que puedan afectar de forma directa al estado de la piel. Con toda esta información, tendremos las herramientas necesarias para realizar un tratamiento dermocosmético personalizado y enfocado a los objetivos que el paciente desea alcanzar con su cuidado diario. La dermoasesoría se realiza con la finalidad de crear rutinas personalizadas en pieles sanas. En caso de detectar problemas en la piel que deban ser evaluados por un médico, el paciente deberá ser derivado al dermatólogo. Los pasos a seguir en el asesoramiento son:

  • Mediante el examen visual de la piel, en el que se analiza el aspecto, el color y las posibles anomalías que presenta, se podrá determinar tanto el estado como el tipo de piel del paciente. Si la consulta se realiza telefónicamente, será necesario disponer de al menos dos fotos de calidad de la piel.
  • Para determinar la textura, la elasticidad y el tipo de piel, se podrá utilizar un dermoanalizador o realizar una serie de cuestiones que indiquen el estado de la piel.
  • Además, realizaremos un cuestionario para conocer sus hábitos de vida, la reacción que presenta su piel ante agentes externos y cuál es el tratamiento actual que sigue, para poder modificarlo o adaptarlo a sus necesidades. Siempre hay que tener en cuenta el orden de aplicación de los cosméticos y el objetivo final del paciente.

Orden de Aplicación de los Cosméticos

  1. Limpieza y tónico.
  2. Contorno de ojos.
  3. Ampollas y/o sérum.
  4. Crema hidratante.
  5. Protector solar.
  6. Maquillaje (opcional).

Productos Esenciales de Cosmética Facial

Productos para la Limpieza Facial

La limpieza facial es fundamental para mantener la piel sana. La piel se ensucia a diario debido a la contaminación, el maquillaje, etc. El uso de limpiadores no solo eliminará la suciedad de la piel, sino que permitirá mantener un correcto equilibrio de los microorganismos que habitan en ella de forma natural. La limpieza debe realizarse por la mañana y por la noche con agua tibia y secándose la cara con una toalla suave sin frotar. El uso de toallitas faciales está desaconsejado, ya que puede provocar irritación y arrastran la suciedad sin conseguir una limpieza efectiva.

Todos los limpiadores contienen tensioactivos, que son moléculas anfipáticas con afinidad por la grasa y el agua, que actúan disminuyendo la tensión superficial y eliminando la grasa.

  • Pastillas de jabón: Pueden ser agresivas para la piel delicada, aunque ya existen formulaciones respetuosas con la piel. Eliminan la grasa de manera efectiva, aunque esto podría comprometer la función barrera de la piel al eliminar también los lípidos de la grasa superficial. Se deberán evitar en la mayoría de los casos, excepto en pieles grasas en las que se podrán utilizar de manera esporádica.
  • Leches limpiadoras: Permiten limpiar la piel sin dañar su estructura, disuelven el sebo y la suciedad, y son adecuadas para pieles secas y sensibles gracias a la sensación de confort e hidratación que aportan, ya que suelen incorporar activos hidratantes en su formulación. Se pueden retirar con un disco de algodón o con agua.
  • Espumas faciales: Los limpiadores espumosos producen espuma al mezclarlos con el agua, lo que permite una limpieza profunda de la piel. Suelen recomendarse en pieles mixtas o grasas, o en pieles propensas a sufrir imperfecciones.
  • Geles limpiadores no espumosos: Los limpiadores no espumosos normalmente son geles suaves que no producen espuma al mezclarse con agua. Son eficaces en pieles secas o sensibles; si llevan activos astringentes, pueden utilizarse en pieles grasas.
  • Aguas micelares: Productos que utilizan tensioactivos no iónicos en forma de micelas suspendidas en el agua para extraer las impurezas de la piel. Estos productos están formulados para usarse sin necesidad de aclarado, pero se necesitaría mucha cantidad para eliminar la suciedad de la piel. Su uso se recomienda como primer paso de limpieza para pieles sensibles en las que el agua del grifo puede dañar la piel, o en situaciones en las que no se disponga de otro limpiador.
  • Aceites y bálsamos limpiadores: Han adquirido popularidad gracias a su acción limpiadora frente al sebo. Existen formulaciones para todo tipo de pieles y se recomiendan en la limpieza nocturna como primer paso de la rutina facial.

Tónicos Faciales

Su utilización no es totalmente imprescindible, pero puede aportar beneficios a nuestra piel. Utilizado después de la limpieza, prepara la piel y potencia los efectos de los productos usados a continuación. Los hay con distintas propiedades (tónicos exfoliantes, calmantes, etc.).

Contorno de Ojos

La piel del contorno de ojos es 4 veces más fina que la del resto del cuerpo. Existen distintos tipos de contornos de ojos en función de sus propiedades: hidratantes, antibolsas, antiojeras, antiarrugas, etc. Se debe utilizar una pequeña cantidad y aplicarla sobre el hueso periorbital de dentro hacia fuera.

Solo deberá usarse en el párpado superior bajo recomendación del fabricante.

Transformadores Cutáneos

Favorecen la renovación celular y evitan el envejecimiento prematuro. Suelen ser utilizados en tratamientos nocturnos, dependiendo de su composición, ya que pueden producir irritación y fotosensibilización.

  • Retinoides (Vitamina A): Son derivados de la vitamina A utilizados para el tratamiento del envejecimiento de la piel. Su uso continuado permitirá reducir las arrugas, las manchas y la pérdida de firmeza, gracias a que actúan mejorando la renovación celular y estimulando la producción de colágeno. El ácido retinoico se emplea en concentraciones que van del 0,01 % al 0,2 %. Es un ácido fotosensibilizante; debe evitarse su uso en verano y siempre debe combinarse con fotoprotección. Las mujeres embarazadas no deben usarlo. Debe ser incorporado progresivamente en la rutina para minimizar los efectos irritantes que se pueden producir en el proceso de retinización de la piel.
  • Niacinamida (Vitamina B3): Vitamina soluble en agua y alcohol que penetra en el estrato córneo, donde actúa como precursor de cofactores enzimáticos que participan en muchas reacciones en la piel. Presenta acción seborreguladora, despigmentante, calmante del enrojecimiento y protectora de la función barrera.
  • Despigmentantes: Son utilizados para el tratamiento del melasma o los léntigos solares y actúan inhibiendo alguna parte del proceso de formación de la mancha mediada por la producción de melanina. Ayudan a su control o eliminación, pero no siempre son suficientes. Agentes despigmentantes más utilizados:
    • Hidroquinona 2 %
    • Ácido kójico
    • Ácido azelaico
    • Ácido alfalipoico
    • Ácido glicólico
  • Exfoliantes químicos: Producen una mejora inmediata del aspecto de la piel al eliminar las células muertas de su capa más superficial. Los exfoliantes químicos se clasifican en tres grandes grupos:
    • Alfa-hidroxiácidos (AHA): Grupos de ácidos naturales hidrosolubles que actúan suavizando la piel, mejorando las arrugas, estimulando la síntesis de colágeno y potenciando los tratamientos anteriores, ya que mejoran la permeabilidad de otros activos. Son:
      • Ácido glicólico
      • Ácido málico
      • Ácido láctico

      Pueden producir irritación y no se recomiendan en pieles sensibles.

    • Beta-hidroxiácidos (BHA): Moléculas liposolubles que actúan en los poros realizando una acción queratolítica. El más utilizado es el ácido salicílico, que además presenta propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, siendo ideal para pieles grasas y con imperfecciones.
    • Poli-hidroxiácidos (PHA): Ácidos con pesos moleculares más elevados, con efectos similares a los alfa-hidroxiácidos, pero que producen menos irritación. Ejemplos: gluconolactona, el ácido lactobiónico y el ácido maltobiónico.

Antioxidantes Cutáneos

Su función principal es evitar el envejecimiento de la piel, impidiendo la oxidación producida como consecuencia de los radicales libres procedentes de la radiación solar, la contaminación y otros factores externos. Previenen el daño oxidativo, aportando luminosidad a la piel.

  • Vitamina C (Ácido Ascórbico): Interviene en la síntesis de colágeno, disminuye las arrugas superficiales, las manchas solares y mejora la textura de la piel. Se oxida muy rápido.
  • Vitamina E (Alfa-tocoferol): Disminuye la formación de radicales libres, fortalece la función barrera y reduce la pérdida de agua de la piel.
  • Resveratrol: Procede de la uva y es antioxidante.

Productos para la Hidratación y Nutrición Cutánea

Los productos hidratantes se dividen en 3 grandes grupos:

  • Humectantes: Actúan atrayendo y reteniendo el agua en la piel, aportan volumen y disminuyen las arrugas y las líneas de expresión. Ejemplos: ácido hialurónico, urea y pantenol.
  • Oclusivos: Crean una barrera sobre la piel impidiendo la pérdida de agua de la superficie cutánea. Son utilizados en pieles secas y deben ser evitados en pieles grasas o con tendencia acneica.
    • Vaselina
    • Lanolina
    • Parafina
    • Cera de abeja
    • Manteca de Karité
    • Dimeticona
  • Emolientes: Actúan reemplazando los lípidos y rellenando los espacios entre las células cutáneas, hidratando y mejorando la elasticidad de la piel.
    • Aceite de rosa mosqueta
    • Vitamina F
    • Aceite de borraja

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *